Capitulo 61

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Atsushi jamas espero despertar y que lo primero en ver fuera a Akutagawa.

Sip, nunca se lo esperaría.

Lo primero que se le cruzó fue gritar y apartarse pero dejo la idea al ver el sereno rostro del azabache.

"-¿Esta dormido?-" pensó sin quitarle la mirada. Llevo un dedo tembloroso a la frente del mayor y le dio un ligero toque esperando un insulto por su parte pero en cambio no obtuvo nada "-Si lo esta-".

Sonrió al procesar el ambiente y entender que Akutagawa fácilmente pudo quitarlo del futon pero no, este estaba al lado suyo y extremadamente cerca, se sonrojo ante eso.

Nervioso busco su celular para verificar la hora y se asusto soportando no sacar un grito al notar que había dormido todo el día.

Trato de levantarse pero fue inútil, cualquier movimiento despertaría a akutagawa y cabe decir que si este era no muy amigable despierto no quisiera saber como lo era recién y mas si era provocado por su culpa.

Quería disfrutar de ese pequeño momento en su departamento, tener al azabache durmiendo de una manera tan tierna para el le estaba gustando mucho para ser la primera vez que lo hacia, pero byakko vendría en unos minutos si no se equivocaba.

-Deja de moverte- escucho la ronca y somnolienta voz del mayor.

-Estas despierto...- verificó con temor.

-No, estoy dormido así que no me hables- dijo con sarcasmo y algo de verdad al querer volver a conciliar el sueño.

Atsushi hizo un puchero y lo vio mal -Si tienes sueño ve a la port mafia o donde sea que duermas- hablo mientras se levantaba buscando el botón para prender la luz -Byakko-chan vendrá pronto-.

Akutagawa se acomodo mejor gracias a que el albino ya no le estorbaba –aunque nunca pensó en que lo hacia– inhaló ligeramente y un olor que desprendía el futon llego a su nariz mas exacto donde el menor estuvo hace unos segundos.

-En serio eres un gato- dijo sin importarle si le escuchaba y inhalando un poco mas siendo discreto, el olor no era tan fuerte era ligero y eso le gusto de cierta forma.

-y tu eres un perro oliendo de esa forma- okey no fue tan discreto -tengo que ordenar las cosas de byakko-chan- dijo para si mismo.

-Seguirás hablando solo- se quejo sabiendo que su sueño se estaba llendo con tanto murmullos y movimientos del albino.

-Si, lo seguiré haciendo- le contestó sin importancia sin ver como el azabache se sentaba en el futon y le veía con brazos cruzados -Akutagawa... tú... como te sent-tiste al....- tenia vergüenza –y sabe que su rostro esta colorado de un fuerte rojo– de decirlo pero tenia curiosidad, se volteo para encararlo aun sabiendo que estaba sonrojado -Como te sen... pff jajajaja- olvidando rápidamente lo que le iba a decir  comenzó a reír al ver el estado en el que se encontraba el cabello del azabache.

-De que te ries- oh... si se estaba burlando de el... no sabe el albino de lo que le pasaría -De que te ries- le volvió a preguntar  fulminándolo con la mirada viendo como este se seguía riendo.

-Jajajaja tu cabello jajajaja se ve gracioso- pudo articular sin evitar seguir riendo.

Akutagawa sabía que su cabello cuando se levantaba siempre estaba de una forma ridícula. Nunca le dio importancia nadie le miraba mas que Dazai –que no dudó en burlarse de él cuando lo vio por primera vez– así que olvido que el albino estaba con el y que obviamente lo miraría.

-¿Como puede estar así?- pregunto sin entender -no te movias para nada- se acercó ya sin reír -deja de verme así- le fulminó igual que como lo hacia el mayor.

-No se como es que queda de esa forma- contesto sin apartar al albino que tenia sus dos manos en su cabello intentando arreglarlo -Que haces- ya lo sabia pero quería escucharlo.

-Arreglando tu desastroso cabello- le dijo con gracia -¿Alguien mas te a visto?- pregunto con curiosidad viéndolo, estaban muy cerca del otro, Frente a frente así que ocultando como pudo sus nervios llevó su vista de vuelta al cabello.

-Gin y Dazai-san y no dudo en reírse mas que tú- vio al albino que estaba estúpidamente concentrado en su cabello pero de alguna forma se sentía bien. Le agradaba.

-Es algo que haría- río al imaginar al castaño, omitiría el preguntar quien era 'Gin' ya que suficiente debía tener el que le estuviera preguntando, pero no pudo evitar sentirse molesto con ese tal gin -¡Ya esta!- elevo la voz y con una sonrisa de orgullo lo vio.

-No tenías por que hacerlo-

-Quería hacerlo y ya- se defendió -deberias agradecerme- le sacó la lengua.

Akutagawa bufo ante esa aptitud infantil pero no dudo en llevar sus manos a ambas mejillas del menor y empujar sus labios con los contrarios.

Atsushi se sorprendió ante tan inesperado contacto pero no se separó y como inexperto en besos y demás se dejó llevar por el azabache.

Akutagawa con una mano sostuvo al albino para que este no se le ocurriera escapar, medio sonrió arrogante al ver como el menor estaba mas que sumido con sus ojos cerrados y un gran sonrojo en sus mejillas.

Ambos sintieron una conexión al besarse después de una semana sin haberse visto. De una manera repentina pero les agradaba.

Nunca fueron planeados sus encuentros y al parecer sus besos de ahora en adelante tampoco lo serian.

-Aún sigues siendo tan malo en besar- articulo aun sin despegar los labios.

Atsushi en cambio si se separo teniendo el ceño fruncido del mayor -No se aprende de la noche a la mañana y no es como si anduviera besando todo el tiempo- se defendió después de regular su respiración.

¿Debería aprender a besar para no sufrir esos ataques cada que Akutagawa lo hiciera?

-Yo igual no estoy besando a toda hora pero si aprendí de la noche a la mañana- hablo con deje de burla al robarse la frase para molestar al albino.

-Creó que un mafioso puede aprender de todo de la noche a la mañana- dijo intentado safarse del agarre donde estaba cautivo, si se quedaba un minuto mas tan cerca de akutagawa su corazón le iba a fallar -Aunque creía que a los perros se le tienen que entrenar- claro que no olvidaría devolverle la burla y también como una oportunidad de que este le soltara.

Akutagawa se frustró al ver como no podría continuar con el beso y digamos que el comentario de atsushi no fue tan halagador para que este le premiara con otro.

Con mas fuerza acorralo al menor y con la mano con la que sostenía una de las mejillas la llevo a la oreja y la guiño midiendo su fuerza pero si con un poco para que sintiera el castigo por compararlo con un perro –a pesar de que no le molestaba solo quería hacerlo–

-Ay ay ay!! eso duele!!!- grito con dolor llevando su mano al brazo que tenia cautiva su oreja -¡duele idiota! sueltame!!-.

-Creí que los gatos no soportaban un guiñon de oreja pero al parecer lo estas disfrutando- hablo lo contrario de las expresiones que mostraba el albino.

-E-esa es la cola no la oreja, no soy un gato y no lo estoy disfrutando para nada!- grito aun intentando quitar al azabache de su oreja y de el.

No veía necesario el usar su fuerza para esto ya que el azabache tampoco la esta usando con el.

"-Este es el 'golpe' mas natural que me a dado-" pensó.

-Arruinaste el beso y te crees muy gracioso creo que esto es lo que buscabas ¿no? masoquista- al fin le soltó de la cintura pero sin quitar la otra mano de la oreja y para finalizar con su gran castigo llevo la mano desocupada para apresar una mejilla y de igual guiñar de ella.

Cabe recalcar que estaba disfrutando mucho hacerlo.

La piel del albino fuera de las peleas y rasguños que se han dado hasta ahora pudo sentir que era relativamente suave. Ignorando las quejas y gritos de dolor del albino siguió tanteando.

Atsushi estaba a punto de negar ser masoquista cuando el toque de la puerta los hizo a ambos ver a esa dirección, uno callando sus gritos y el otro aun con su movimiento de manos.

¡¡Un Bebe de Akutagawa!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora