Beautiful Angel《H.S》

14

A la mañana siguiente me levanté por los molestos golpes en mi puerta por parte de mi madre. Cubrí mi cabeza con la almohada y gruñí, como odiaba que me despierte así, ¿no podía entrar y despertarme como una persona normal?

—¡Summer, despierta! — gritó dando más golpes en la puerta — ¡Tenemos que ir al aeropuerto a recoger a tu tío y a Charlotte!

Demonios, ¿qué clase de persona despierta a su hija a las 6: 30 am? Me levanté de malas y abrí la puerta, miré a mi madre con enojo. Que pésima forma de empezar mi día.

—¿Es necesario que vaya? No lo creo — apoyé la espalda en el marco de la puerta.

—¡Claro que sí! A Charlotte le va a encantar verte de nuevo — sonrió emocionada y entro a mi habitación.

—Lo dudo — siseé — ¿Qué estás haciendo? — pregunté al ver que mi madre revisaba el armario.

—Buscando algún atuendo, te tienes que ver bien — sacó una blusa azul — Mira, esta blusa es hermosa.

Puse los ojos en blanco y caminé hacia ella quitándole la blusa, ¿cree que tengo tres años? No quiero que escoja mi ropa.

—Mamá creo que soy capaz de escoger mi propia ropa — la guíe hasta la salida de la habitación — Estaré lista en media hora — cerré la puerta y me metí en el baño.

Me di una ducha rápida, normalmente me demoro veinte minutos, pero ahora lo hice en tiempo récord, al igual que mi maquillaje, solo me aplique mascara de pestañas y un labial color nude.

Le di un vistazo a las compras que había hecho ayer, y encontré un buen conjunto, una falda de cuadros negra con rayas blancas, un sweater negro y unas converse que combinaban. Me negaría a usar falda en NY estando en diciembre, pero Eleanor me hizo comprar unas mallas que eran súper abrigadas, agradecía eso.

Al salir de la habitación, mi madre me quedó viendo de pies a cabeza con completa desaprobación y mi abuela sólo sonreía.

—Summer Winston, no voy a permitir que salgas con eso— refutó — ¿Sabes a cuantos grados estamos, niña? Ve a cambiarte.

—Judith, déjala — rió mi abuela — Te ves muy bien mi amor, solo ponte un abrigo— se acercó a mí y me rodeo con sus brazos.

—¿Nos vamos? — mi padre salió de su habitación — Te ves hermosa Sum — sonrió y mi madre bufó.

—Mama dice que no voy a salir así — me crucé de brazos — Que me debo ir a cambiar.

—Pues no hay tiempo — mi padre nos guio a mamá y a mí a la puerta — No tardáremos — le dijo a la abuela.

Al salir de casa nos encontramos con Harry, quien también iba de salida. Se veía guapísimo con su ropa deportiva, no estaba enterada que era una persona madrugadora.

—Buenos días — nos saludó con una sonrisa.

—Buenos días Harry — respondieron mis padres al unísono.

—Sum, te ves bien — susurró en mi oído cuando mis padres nos dieron la espalda para llamar al ascensor — ¿A dónde vas?

—Iremos al aeropuerto a recoger a Charlotte y a mi tío — respondí, sentía mis mejillas arder — ¿Y tú? — subimos al ascensor.

— Iré a correr un poco, me gusta hacer ejercicio por las mañanas — dijo presumiendo, en verdad admiraba a las personas que se levantaban tan temprano para hacer eso. Una vez lo intente, pero el hábito me duró dos días — Más tarde iré a casa de Louis, menciono algo de un 'día de chicos' — se burló — Pero Eleanor y Karla van a estar ahí, así que no creo que cuente como un día de chicos — hizo una mueca — Si quieres puedes venir.