Beyond the cameras / Más allá de las cámaras

Capítulo 57 - Todo sale a la luz

Por algunos cortos minutos toda la atención de la madre y hermano de Jungkook se centraron en él y su esposo quienes se encontraban abrazados y llorando desde hacía ya varios minutos. Realmente estaban extrañado de que él no hubiera aparecido antes para estar con Kook pero esos pensamientos se esfumaron rápidamente, sus emociones se sentían muertas y sus tristezas y atenciones estaban todas centradas en el difunto.

Cuando Jungkook vio a su esposo no pudo evitar romper en llanto nuevamente, él era una parte en su vida que destapaba su lado más sensible y eran los brazos en los que quería estar refugiado para poder llorar sin control. Con su madre debía ser fuerte y brindar sus brazos para reconfortarla, no al revés. Con su hermano era algo diferente, los únicos brazos que encajaban a la perfección con lo que su alma sentía eran esos.

Sin embargo el interruptor de la conciencia, la rabia, el dolor y los recuerdos se prendió en ese instante, luego de haber llorado varios minutos en sus brazos. Levantó su cabeza para mirarlo seriamente y luego limpiar sus lágrimas, no había nada en su mirada, todo desapareció en ese instante. Separó su cuerpo repentinamente dejando a Taehyung en un desconcierto total.

— Gracias por venir, pero creo que sería mejor si te marcharas ahora.

Todos los presentes, que ahora incluían a sus amigos, junto a la mujer de Jeon Jung Hyun quien entraba nuevamente luego de acostar a los niños se quedaron observando desconcertados a Jungkook, no entendían que este no quisiera estar al lado de Taehyung.

— Amor no seas así por favor, vamos hablar un momento. — Replicó Tae acercándose para hablar bajo, prácticamente en su oído.

—¿No ves que n es el momento ni el lugar? Sé que eres algo egoísta pero por lo menos respeta el velorio de mi padre. — Contestó entre dientes, tratando de que nadie más notara la fría atmósfera que había entre ellos aunque eso era casi imposible, todos lo habían notado ya.

— Jungkook, por favor...

Jungkook se arrodilló frente a su madre y hermano para disculparse un momento, ellos asintieron entendiendo que debía ocurrir algo serio entre ellos para que algo así estuviera sucediendo. Cuando recibió la aprobación de sus familiares le hizo un gesto a Tae para que lo siguiera, dirigiéndose fuera de aquel sitio. Caminaron en silencio hasta que llegaron al ático de la casa, Kook no quería correr el riesgo de ser interrumpidos y mucho menos escuchados por nadie más.

— No tienes derecho a aparecerte cuando se te da la gana, irrespetando la memoria de mi padre de esa manera. Es el velorio de mi padre. ¿A caso entiendes eso? — Las lágrimas corrieron por su rostro y su esposo se apresuró para limpiarlas pero de un manotazo quitó sus manos.

Las manos de Tae se quedaron suspendidas en el aire así como su corazón, entendía que Kook estuviera pasando por un mal momento pero ver que lo tratara así le partía el corazón, ahora que estaba decidido a regresar con él y enfrentar los malos entendidos, acciones, todo lo que los separaba, sus miedos, todo...

En esos momentos esa era la historia de ese amor que lloraba en silencio. No habían más lágrimas en sus ojos a pesar de que estuvieran cristalizados, solamente estaban ellos, mirándose fijamente, parado uno frente al otro sin decir una palabra. Era como si una canción de una batalla final estuviera sonando a su alrededor.

— El dos de enero me mandaste el primer mensaje, la primera acción que comenzaba a ponerle fin a nuestra relación. — Rompió el silencio Jungkook, su rostro en esos momentos reflejaban molestia, dolor, decepción. — Yo estaba desesperado, no entendía que mi esposo quisiera terminar conmigo aunque estuviera atravesando una situación tan incómoda como esa porque yo siempre había estado ahí para él pero aún así quise entenderte, apoyarte, nos me rendí y fui en tu búsqueda. Después...