La Hija del General y el Chófer

Cap. 8 El Canto del Temor

Era la una de la noche cuando se escuchó el canto de la lechuza que emulaban los partisanos al otro lado del muro. Kerem se preparó para atrapar todo el número posible de sacos pensando en los zlotys que debía llevar a su casa. Los pequeños sacos empezaron a caer a través del muro, los cogían al vuelo , alguno caía sin hacer apenas ruido al estar bien recubiertos de viejas telas. Yaziel en una de las esquinas iba de un lado al otro al igual que Asher , Kerem se movía al compás de estos. Estando esperando por si algún saco más caía a través del muro , escucharon a unos soldados que iban cantando en el silencio de la noche y a la vez despertaban el miedo. La lechuza cantó por última vez , debían salir de allí a toda prisa ya que corrían el riesgo de ser descubiertos.
El sonido tan peculiar de los pasos de los soldados de la SS junto a sus risas se acercaban a paso ligero , al igual que el palpitar del corazón de Kerem...

_Was war das?-
(¿Qué ha sido eso?)
Preguntó uno de los soldados.

_Awww ... es war nur eine eule!-
(Tan sólo ha sido una lechuza).
Contestó el otro riéndose.

Tras pararse unos minutos a escuchar , estos continuaron su marcha entre cantos y risas.
Los tres habían podido ocultarse en un edificio en ruinas contiguo al lugar donde se encontraban , estos tras escuchar como los soldados se alejaban , salieron de su escondrijo , se miraron  presos de  su respiración agitada y salieron de nuevo a la calle , sorteando una vez más sus vidas por el camino , hasta llegar a la casa de Amir. Entraron en el patio abandonado respirando ya más tranquilos , los latidos de sus corazones volvieron a tomar su ritmo normal al verse a salvo.

Amir les vio llegar ...
Este estaba tras la vieja cortina de la ventana esperándoles , eran las tres de la madrugada cuando regresaban, les abrió la puerta y abrazó a cada uno dejándoles paso hasta el interior de la vieja casa...

_¿Cómo ha ido muchachos?-
Preguntó al verles exhaustos a causa de la tensión.

_¡Dios mío Amir! ¡Ha venido de poco que nos descubrieran esos malditos soldados!. Tenemos que dar las gracias al viejo edificio abandonado que hay a escasos metros de donde estábamos , de no haber sido por este , hubiéramos sido descubiertos.-
Respondió Asher respirando agitado.

_Kerem...¿Tú qué opinas?-
Le preguntó alzando una de sus espesas cejas.

_Asher tiene razón , ha sido una suerte encontrar ese viejo portal que estaba abierto, Amir ... es un gran riesgo .-
Le decía pasando la mano por su bonito cabello rubio.
Yaziel intervino...

_Chicos...sabíamos que era un riesgo cuando aceptemos hacerlo, ahora no es tiempo de lamentaciones. Amir ...será mejor que arreglemos nuestras cuentas.-
Con cara de pocos amigos dijo este.

_¡De acuerdo Yaziel! -
Contestó este dirigiéndose a una pequeña habitación que había contigua , de la que trajo un puñado de zlotys.

_Asher ... aquí tienes 60 zlotys.
Este los tomó y se los guardó en un bolsillo. Yaziel... esta es tu parte.-
Los contó y se los entregó.

_¿Tan sólo 40 zlotys? ¿No puedes adelantarme algo? ...
Esto es muy poco por el riesgo que he corrido Amir.-
Replicó al ver el dinero entre sus manos.

_Dije que ...serían 20 zlotys por saco ,ese fue el trato Yaziel.
¡Lo tomas o lo dejas! .
Reprendió Amir molesto.
Yaziel cogió el dinero y entre quejas lo guardó en uno de sus bolsillos.
Kerem ... esto te corresponde
a ti , 80 zlotys ¡Buen trabajo muchacho!-
Este le dio unas palmadas en su espalda.

Kerem cogió el dinero con una ligera sonrisa , hacía días que no se veía ni una moneda en su casa y pensó en su madre que por fin podría tener más que patatas en su cocina , hacía algún tiempo que el Sr Wexler ya no les daba más alimentos fiados. Amir abrió los sacos bajo la atenta mirada de Kerem que era la primera vez que veía tantas armas juntas, varias pistolas estaban cubiertas de viejas telas que las protegían ,
pistolas listas para ser usadas.

_Amir en realidad...
¿Crees qué vais a poder con todos ellos? Apenas quedamos judíos en este antro.-
Dijo Kerem cogiendo una de las armas entre sus manos .
Pensó en sus padres si le vieran en ese momento.

_Kerem... no importa los que seamos ¡No debemos rendirnos! .¡Debemos resistir y luchar! ... Nuestras vidas son tan valiosas como las suyas ¿Comprendéis ?.
¡Nuestra sangre no es diferente!, ¡Esta corre igual por nuestras venas! ¡Y es de su mismo color! .
Sólo hay que buscar el modo de llegar hasta ese maldito General de la SS , este se pasea a menudo al otro lado del Gueto para deportar a nuestra gente a los campos de exterminio.
¡Ese malnacido debe morir!...
¿Comprendes? ¡Quiero ver a Baumann muerto! -
Exclamó este con desdén y rabia , una animadversión que emanaba desde el fondo de sus entrañas.

_¿Baumann? ¡Se quién es!...
Le vi un par de veces cuando aún el Gueto abría sus puertas y podíamos ver lo que había al otro lado del muro... ese muro que nos separa del resto como  si fuéramos escoria.-
Explicó este con desprecio en sus palabras.

_¿Quieres unirte a nosotros? ... Serás bien recibido en nuestro equipo.-
Asintió este intentando encender un trozo de cigarrillo que había sobre un platillo viejo y desconchado.

_Lo pensaré Amir.-
Kerem salió de la casa de este y de nuevo intentó regresar a su casa sin ser descubierto . Ese era el riesgo que debía correr cada tres noches por unos pocos zlotys,  así era la dura vida de los que vivían al otro lado del muro...
Una vida llena de miedo , de incertidumbre, de carencias ... Una vida ensombrecida por el odio, esa vida que había sido cálida en un tiempo y donde se podía respirar el olor de las flores en Mayo , el sutil aroma del Kamish recién hecho , o el simple perfume de una mujer envolviendo la estancia , todo ello se había convertido en  el aroma de la muerte... la muerte que aguardaba en cualquier esquina y en cualquier momento.