Cap.41 Rozando el Límite

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Habían pasado varias semanas desde que Kerem habitaba en la
habitación colindante a la casa del servicio de los Baumann. Alemania y sus tropas
dominaban por tierra y  aire derrotando al enemigo haciendo sentir orgulloso al Führer y a
sus seguidores. Kerem en este tiempo había empezado a conocer en profundidad a la hija del General. Si bien él había tenido una idea equivocada de esta  , ella seguía pensando que Kaufmann era un nazi más que aplaudía la absurda ideología de Hitler al igual que su fiel padre. Pensaba en Hermann su prometido...

Este amaba ser un soldado del Tercer Reich y ella en cambio aborrecía todo lo que tenía que ver con ser un soldado nazi siervo del Führer. No quería llegar a ser la esposa de un hombre dedicado a la causa y enfermo por erradicar el judaísmo. La relación con su prometido no iba últimamente como esperaba. Este se pasaba
la mayoría de su tiempo en la comandancia con sus respectivas obligaciones como soldado .Cada vez se veían menos y cuando lo hacían ,este se pasaba el tiempo hablando de sus avances en el ejército sin reparar en las necesidades de Ebba de estar junto a él.

Cada vez le veía más como un extraño que pensaba tan sólo en sus hazañas en el ejército y con la necesidad de partir hacia el frente para ser un soldado condecorado y aspirar a ser de su anhelado Tercer Reich. Se sentía rodeada por hombres con hambre de poder y con la mente embebida en absurdas ideas que impartía el partido Nacional socialista. Tan sólo le quedaba su música para evadirse por unos instantes de su aburrida vida junto a un padre y un prometido que parecía que no reparaban en su existencia...

Era una mañana a mediados de Mayo , hacía un día soleado,los  pájaros canturreaban  posándose en los árboles y en los arbustos mimados por Norbert. Las mariposas revoloteaban por las preciadas flores del jardín. Para estas había llegado el tiempo maravilloso del cálido sol primaveral. Aquella mañana Ebba decidió levantarse tarde ,se sentía triste y apagada además de sola como de costumbre. Pidió que Minna le llevara el desayuno a su habitación , no se sentía con ánimos de ver a nadie...

_Srta Baumann ...no quiero ser indiscreta pero creo que debería usted desayunar y salir a tomar el sol al jardín. Hoy hace un día maravilloso , le hará bien salir de estas cuatro paredes. Está usted tan pálida...-
Se atrevió a decirle el ama de llaves dejando la bandeja con
el desayuno sobre una pequeña mesilla redonda en la misma habitación , observando la gran apatía que sentía la joven . Minna comenzaba a preocuparse por su salud...

 Minna comenzaba a preocuparse por su salud

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_Minna ...¡Por favor ! No
intentes convencerme , yo...no
me siento con ganas de hacer
nada.-
Le respondió esta resoplando.

_¡Está bien ! Pero ...niña coma algo... va a caer usted enferma.
¡Prometame que se tomará el desayuno!-
Exclamó esta arqueando una de sus cejas.

_¡Lo prometo! Lo tomaré pero no quiero que me moleste nadie en todo el día. Hoy no tengo humor ni fuerzas para nada.-
Le pidió a la Sra Günther mientras tomaba de su taza.

La Hija del General y el  ChóferWhere stories live. Discover now