Novela Concluida
Kerem Rabinowitz ...
Un apuesto joven que vivía como un judío polaco más y Ebba Baumann , la joven hija de un General de la SS...
Cruzarán sus caminos víctimas del odio y de la venganza.
Pero con el paso de los días los planes de...
_Srta Baumann debería terminarse el desayuno... Está usted muy delgada y pálida.- Dijo mirándola de arriba-abajo.
_¡Por Dios Minna! Sólo he dejado una tostada en el plato.- Refunfuñó y acto seguido tomó un sorbo de su zumo de naranja.
_Srta Baumann yo sólo cumplo las órdenes de su padre, ya sabe cómo es de estricto . Entienda que ...él quiere lo mejor para usted pues... es su única hija. ¿Comprende?- Replicó el ama de llaves.
_Awww ...¡Si lo sé! Mi padre quiere lo mejor para mi pero... en cambio nunca está conmigo. Por lo que veo es más importante todo lo que tiene ver con el partido Nacional socialista. ¡Estoy harta! Me paso el día sola en esta inmensa casa. Desde que mamá murió , no tengo con quien conversar a parte de ti , Norbert o Heidi. ¡No lo soporto más! - Manifestó Ebba alzando el tono de su voz.
_¡Niña ! ¡No hable así! Su padre hace todo lo que puede , él es un General del ejército alemán y se debe a su país, comprenda que es un hombre ocupado con muchas obligaciones , entienda que... ¡Estamos en guerra! ¡Debería ser más generosa con él! - Exclamó la Sra Günther.
_¡No soy ninguna niña! ¡Ya soy una mujer! ¿Sabes Minna? ... A veces pienso que estás enamorada de mi padre. Esa manera tan tuya de defenderle siempre... hace que piense en esa posibilidad ¿No crees? - Preguntó con una sonrisa de niña traviesa.
_Pero Srta Baumann yo jamás ...¡Quítese semejante tontería de su cabeza! ¡Es usted una atrevida! - Ebba le guiñó un ojo y soltó una carcajada. La Sra Günther salió refunfuñando del salón.
Ebba era una muchacha joven de 23 años , era rubia , con unos ojos azules preciosos y su piel era blanca como la porcelana, era la típica muchacha alemana , la perfecta raza aria. Esta había heredado la belleza de su madre Frederika y a su vez era una joven inteligente y con un desparpajo que sorprendía a todos los que la rodeaban. Había estudiado arte en una escuela de Múnich , hablaba y escribía el francés perfectamente, además también había aprendido a cocinar para ser un ama de casa ejemplar , esta había formado su bonito cuerpo gracias al ballet y al ejercicio físico que le impartió la escuela en su Múnich natal , pero su afición era el canto y el piano. Ebba frecuentaba una escuela en el centro de Múnich tres veces por semana , para perfeccionarse , ya que su sueño era convertirse en una gran pianista y ser reconocida en el mundo de la música , su sueño era viajar alrededor del mundo y tocar el piano en los mejores teatros y auditorios conocidos con su propio cartel de presentación...
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La Srta Anke Dietrich siempre había hecho hincapié en su gran voz y en su gran potencial tocando el piano. Ebba había empezado a edad muy temprana a formarse, era una muchacha de carácter alegre y jovial pero a su vez tenía las ideas muy claras. Esta no estaba de acuerdo con la ideología que impartía el Führer y Dieter Baumann se había enrolado en el Partido Nacional Socialista y se había dejado envolver por el fanatismo, si bien nunca fue un padre cariñoso con ella , ahora había dejado de comportarse simplemente como un padre, el padre que extrañaba Ebba y el cual se había vuelto en un fiel servidor de Hitler y la nación , sin pensar en la soledad que esta vivía en la gran casa que compartían a las afueras de Múnich. Ni ella ni su madre , antes de que esta falleciera , entendieron la postura que había tomado el cabeza de familia. Lo que sí entendía Ebba y a lo que debía resignarse era a que su padre nunca le predicaría el amor que ella esperaba y este cada vez se alejaba más de ella y de ser el padre que necesitaba , este se acercaba más a ser un siervo más del partido nazi y todas sus absurdas ideas .
