Cap.59 Melancolía

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Aquella noche Ebba no pudo conciliar el sueño. El pensar en
su boda con Hermann la tenía desesperada  y la incertidumbre de no saber nada de Kaufmann la tenía sumida en una triste
agonía. Los días transcurrían con rapidez y Ebba seguía apática , su tristeza era evidente, no le apetecía salir a tomar los rayos del sol veraniegoen el jardín. Su piano extrañaba sus manos acariciando sus teclas que repartían hermosas melodías repletas de dulces sensaciones . Llevaba ya sin saber de Kaufmann un largo mes ...
Sabía que debía olvidarse de él, aunque su corazón le dictaba lo contrario. Estando mirando por la ventana de su habitación llamaron a su puerta...

_¡Adelante! -
Exclamó sin ganas y sumida en su constante tristeza.

_¡Buenos días Srta Baumann!
¿Va usted a desayunar hoy con nosotros? Creo que le sentará bien distraerse  un poco escuchando las historias de Norbert y las ocurrencias de nuestra Heidi.-
Le decía Minna intentando convencerla para que saliera de su encierro.

_Minna... yo... no tengo apetito, únicamente quiero dormir y olvidar.-
Respondió melancólica.
Minna se acercó a ella y ambas
se sentaron sobre el lecho de la joven. Esta cogió sus delicadas manos e intentó animarla...

_Mi preciosa muchacha ...sé que le está resultando difícil todo lo que está ocurriendo pero...no debe abandonarse así, debe ser fuerte . Quizás...

_¿Quizás qué... Minna? ¿Quizás no sea tan mala idea casarme con Hermann? ¿Es lo qué ibas a
decir? ¡Estoy harta de todos! Yo...
¡Yo ya no amo a Hermann
Vetter!  ¿Tan difícil os resulta poder entenderlo?-
Le reprendió esta mientras sollozaba.

_¡Niña por supuesto que la comprendo! Pero ... no soporto verla así. Lleva días sin comer como es debido , ni siquiera sale al jardín a tomar el sol.
¿Es que quiere enfermar? Y que me dice de su piano...
¡Lleva semanas sin tocarlo!
¡No es así como será una gran pianista !. Niña... se lo ruego baje a desayunar como es debido, estoy segura que luego verá las cosas de diferente manera pues lleva demasiados días encerrada en su habitación sin apenas probar un triste bocado. Además hoy...
Minna carraspeó.
Vendrá la ...Sra Müller pues...
recuerde que le toca la prueba del vestido de... novia.-
Masculló mirando a la joven .
Para Minna resultaba difícil ver así a la joven , para ella era su pequeña. Aquella niña que sólo había conocido el amor por parte de su madre y la disciplina por parte de un padre exigente y carente de sentimientos.

_¡No pienso bajar a desayunar ! Y menos a

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_¡No pienso bajar a desayunar !
Y menos a ...¡Probarme ese vestido! Déjame sola Minna , no tengo fuerzas para seguir con esto.-
Decía llorando sobre su cama.
Minna acarició su cabello y salió por la puerta. La Sra Günther un tanto envalentonada decidió ir a hablar con el General.
Tras llamar a su puerta...

_¡Pase! -
Respondió este que estaba frente a su mesa de cartografía.

_Señor Baumann yo... yo verá...
Titubeó nerviosa ante este.

La Hija del General y el  ChóferDonde viven las historias. Descúbrelo ahora