Novela Concluida
Kerem Rabinowitz ...
Un apuesto joven que vivía como un judío polaco más y Ebba Baumann , la joven hija de un General de la SS...
Cruzarán sus caminos víctimas del odio y de la venganza.
Pero con el paso de los días los planes de...
Kerem se había instalado en una de las habitaciones de la pequeña casa del servicio. Esta estaba contigua a la gran casa de los Baumann. La Sra Günther se había encargado de acomodarle. Ahora era uno más de los que dedicaban su vida al bienestar del General y de su hija Ebba.
Kerem entró acompañado del ama de llaves , se quitó la gorra y peinó su travieso cabello con sus dedos apartándolo de su rostro mientras observaba todo a su alrededor. Una pequeña habitación con una cama , una mesilla de noche junto a una lámpara y un mueble viejo supletorio formaban el sencillo dormitorio . Y frente al lecho una pequeña ventana que daba al preciado jardín junto a esos escasos muebles serían toda su compañía ,nada más y nada menos. Pensó en lo diferente que era la vida para unos ... Mientras los Baumann vivían con todo lujo de detalles , los criados se rodeaban simplemente de lo esencial.
_Si necesita algo Sr Kaufmann... hágame saberlo , ya sabe dónde encontrarme.- Le dijo la Sra Günther observando al guapo soldado.
_¡Gracias! Será suficiente.- Le respondió Kerem mirando cada ligero detalle de la simple habitación. La puerta se cerró tras él y entonces extrañas sensaciones le envolvieron .
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Se sentía un extraño... un extraño el cual tenía un gran cometido.El cometido de entregar al General a la Resistencia pero... no pensó en la posibilidad de que Baumann tuviera una hija. Una hija que parecía un ser delicioso , una hermosa joven por la que podía suspirar cualquier hombre. Miles de extrañas sensaciones le envolvieron al recordar su suave perfume por aquel lúgubre y largo pasillo. Lanzó su gorra de barquillo sobre la vieja cama , se desabrochó la chaqueta de su uniforme y se asomó por la ventana que daba frente al hermoso jardín , donde había un pequeño banco que debía servir para relajarse bajo los cálidos días de sol. Donde seguramente la bella Srta Baumann debía pasar algunas horas bajo el sol primaveral leyendo u observando el color variopinto de las flores.
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Además un viejo pozo y una vieja fuente debían servir para aliviar el calor de las bellas flores. Todo allí era magistral ... parecía ser ajeno a la guerra que estaban sufriendo. Decidió echarse sobre el viejo lecho y empezó a pensar en su pobre familia y en su malograda suerte. Estando pensando en los suyos,oyó unas risas que parecían provenir del exterior. Kerem se levantó de la vieja cama y apartó el ligero visillo blanco que tapaba los cristales de la ventana. La Srta Baumann y su prometido estaban abrazados y haciéndose todo tipo de caricias y arrumacos sin importarles las miradas ajenas. Kerem observó la escena con disimulo tras el viejo ventanal. Pero... Hermann se dio cuenta de que estaban siendo observados y se lo contó a Ebba...
