Serendipia Pelirroja | G Weasley | +18

V : Casamiento casi perfecto

(TW: violación/intento de violación)

Con este capítulo pretendo concientizar sobre estos temas, sepan que jamás van a estar solos.
Si necesitan ayuda hablen con una persona de confianza, pidan ayuda, no se callen, y si pasaron por esto quiero decirles que son muy fuertes, y que jamás van a estar solos.
Se que en muchos casos no es fácil pedir ayuda, el miedo los come y les gana, pero jamás se queden callados ante esa violación a sus derechos.

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George caminaba por las heladas calles de Londres, intentaba llegar hasta la casa de su ex novia, Sonia, la cual le había enviado un búho diciendo que efectivamente su embarazo era real.
Camino y camino hasta llegar a una casa completamente fina y reluciente, está podría ser una de las casas más hermosas que George había visto en su vida.

Sonia era una mujer muy elegante, fina y delicada, su fortuna y sus mansiones por todos lados eran para ella su mejor logro, pero detrás de todo eso se encontraba una mujer egoísta, poco considerada y egocéntrica.

George se había enamorado de ella en sus años en hogwarts, la chica acepto salir con el cuando pusieron la tienda con Fred, sin embargo el juraba en esos momentos que su amor era sincero y sin filtros, se equivocaba.

Subió los escalones de mármol y golpeó suavemente la puerta, luego de unos minutos la puerta se abrió, sobresaltando al joven.

-George, ¿Que haces aquí?. -pregunto zerafina, la madre de Sonia.

-Buenos días Señorita Clearwater, vine ya que Sonia quiso hablar conmigo.

La mujer le sonrió suavemente y lo invito a pasar.

-Esta en su habitación. --dijo señalandole las escaleras.

George asintío y subió las escaleras de mármol blanco, hasta llegar a una puerta de un rosa chillón, rápidamente la abrió y paso por esta, encontrandose a Sonia del otro lado sonriente.
Está corrió hacia George y lo abrazo.

-¡Seremos padres, Georgie! -grito dejando un beso sobre su mejilla.

El corazón de George se paró, al igual que su respiración.
Sonia besaba sus mejillas mientras George quería hundirse en el suelo y jamás salir.

-Sonia...

-¡Oh por dios, seremos una familia muy feliz!. -dijo echándose sobre el pelirrojo.

-Sonia, nosotros hemos usado anticonceptivos, es imposible que estés embarazada de mi.

La sonrisa de la chica se desvaneció, mientras llevaba las manos a su vientre.

-Papi no los quiere. -susurro maliciosamente.

-Sonia, deja los juegos...

-¡George eres su padre!.

El pelirrojo llevo una mano a su frente mientras intentaba organizar sus pensamientos.

-¿Es por esa zorra, verdad? -dijo con furia la mujer- ví como la mirabas, maldita puta.

George se extraño ante la pregunta de Sonia, retiro la mano de su frente mientras la miraba con una ceja arqueada.

-¿Zorra?, Sonia no se de que estás hablando.

-¡Vi como la mirabas! ¡Cómo si quisieras besarla, fue asqueroso!. -la mujer lo empujó hacia atrás.

-Sonia, no se de qué hablas.

-¡De esa tal Belle! ¿¡Te gusta, te gustaría acostarte con ella verdad!?. -los ojos de Sonia se llenaron de lágrimas.