XXII: Hasta nunca

825 61 39
                                    

El reloj marco las 7:30 a.m cuando George abrió lentamente sus ojos luego de la anterior atareada noche. La luz del sol golpeó contra su rostro despertando lo rápidamente.
Aleteo sus pestañas sobre sus ojos, para eliminar esa pequeña capa borrosa con la que ves por la mañana.

Paso sus manos por su rostro intentando eliminar el sueño que aún le quedaba por cumplir, mientras de fondo se escuchaba la suave respiración de Belle, quien aún dormitaba sobre el hombro del pelirrojo.

Al girar su rostro, se encontró con el de Belle unos centímetros más abajo, sonriendo ante la joven quien dormía sobre su hombro con calidad.

-Buenos días Belli... -susurro el pelirrojo, luego de unos segundos, vio como Belle pasaba sus manos por sus ojos, para luego mirarlo aún con los ojos entrecerrados- ¿Te desperté?.

Belle coloco una mano sobre el pecho del pelirrojo, intentando abrir un poco los ojos para verlo mejor y admirar aquella sonrisa que seguro tenía plasmada en su rostro, pero sus ojos no cedieron.

-No, ya estaba despierta. --mintió.

La verdad era que Belle no había podido conciliar el sueño en ningún momento de la noche, mientras sus pensamientos la atormentaban una y otra vez, y siempre que lograba quedarse un poco dormida, el recuerdo de aquellos años terroríficos en hogwarts volvían para atormentar su mente.

Aquellos años que habían creado un trauma en su mente y su forma de vivir luego de su graduación, que poco a poco fue superando.

Sin embargo, no pensaba hablar del tema ni con George ni con nadie.

George se percató de la mentira que le había lanzado la joven, sin embargo, decidió restarle importancia y preguntarle más tarde.

Coloco su mano sobre la de Belle, sintiendo aquel calor característico que tan bien le hacía sentir.
Ambos sonrieron ante el tacto del otro.

Se quedaron desparramados sobre el colchón, tapados con las suaves sábanas sobre sus cuerpos, proporcionándoles aquel calor que lograba enternecer sus cuerpos.

Unos minutos después, ambos se levantaron de la cama, se acomodaron un poco la vestimenta, y en el caso de Belle, también el cabello.

Salieron de la habitación rumbo a la cocina, encontrandose con que Fred y su pareja seguían durmiendo, o eso querían creer.

El ruido de los pajaritos fuera y el frío que habitaba en la sala era el suficiente como para hacer sentir a Belle un poco más despierta.

Ingresaron a la cocina, tomando dos tazas, y mientras George hacia el café, Belle hacia unas tostadas con mantequilla.

George dirigió la mirada hacia Belle, notando la palidez de su piel y algunas ojeras debajo de sus ojos, notando así, que Belle no había pasado una muy buena noche de descanso.

Preocupado por ello, se acercó a ella, sin embargo, no recibió ninguna de sus miradas o sonrisas tan características.

-¿Me vas a decir que pasa?. -pregunto George luego de unos segundos, rompiendo con el silencio que habitaba en la cocina.

-¿Que pasa con que?. -Belle lo miro extrañada, analizando sus ojos color avellana por unos segundos.

Un silencio se creo otra vez en la cocina, silencio dónde George aprovecho para sonreírle de forma agradable, llenando un vacío en el corazón de Belle.

-Contigo, parece que no dormiste bien.

-Oh, bueno, si lo hice. -volvio a mentir.

Belle nunca era tan evidente cuando mentía, más bien, siempre lo ocultaba perfecto y sus mentiras parecían reales.

Serendipia Pelirroja | G Weasley | +18Where stories live. Discover now