Serendipia Pelirroja | G Weasley | +18

LI: N.A.M

Sintió como las últimas gotas de aquel líquido rosado caían sobre el tubo de ensayo, logrando que una corta y agradable efervescencia hiciera efecto en el momento en que la gota se deslizara por los bordes del tubo.

Una sonrisa escapó de los labios del pelirrojo, mientras el aroma a frambuesa ingresaba por su nariz.

Definitivamente robarle ese libro de pociones a su ex profesor, Severus Snape, le había beneficiado más de lo que creía. Incluso menos pensaba que algunos de los escritos viejos del fallecido le darían frutos tan satisfactorios para su tienda de bromas.

Lo cual, era gracioso, puesto que Severus jamás hubiera estado de acuerdo en que sus fórmulas se utilicen en una tienda de bromas. Y mucho menos si se trataba de la tienda de bromas de los gemelos Weasley, los cuales, Severus detestaba.

Deslizó una sonrisa de lado cuando el aroma a frambuesa se combino con el de vainilla, causándole un leve dolor de cabeza en el lado izquierdo.

Lo froto cortamente antes de volver a agregar un líquido morado en el tubo de ensayo únicamente de color rosado.

Antes de que la gota de desprendiera, un pergamino cayó sobre su escritorio, y, para desgracia de el, sobre la hornalla prendida, la cual comenzó a quemar las esquinas del pergamino.

George soltó la pipeta plástica para tomar el pergamino ya casi consumido por las llamas encandiladas de fuego.

Lo sacudió lo más que pudo hasta que el fuego se apagó completamente, dejando que el pergamino dispersara sus cenizas sobre todo el escritorio del pelirrojo.

—Mierda... —— soltó en un quejido, sacudiendo las cenizas sobre el escritorio.

Se apoyo con una de sus manos sobre el escritorio, quitándose los lentes de descanso antes de ojear el contenido de la carta.

Un suspiro escapó de sus labios.

"Querido George:

Corre lo más que puedas, en mi búsqueda, en la búsqueda de mis ojos observando casa movimiento que das con esas manos asquerosamente deformes.

Búscame en el departamento de tu amada pelinegra.

Entrégate a mi George, y dejaré viva a tu amada.
Entrégate a mi, y dejaré en paz a tu prometida.
Entrégate a mi antes de que le arranque aquellos ojos que tanto amas.

Entrégate a mi y todo será más fácil para ella.

Conejillo asustado, corre a mis brazos.

Te ama, N.A.M"

George logro reconocer la letra de su novia con rapidez al leer la primera palabra, sin embargo, un mal presentimiento respecto a ella inundó su ser.

Frunció levemente el ceño antes de dejar los lentes sobre el escritorio, junto con el pergamino.

Sacudió su camisa de los restos de pólvora impregnados en ella, antes de salir por la puerta de la oficina, rumbo a su propia sentencia de muerte.

...

El semblante serio y amenazador de la
pelinegra lograba llevarse una mueca de curiosidad de los clientes de Sortilegios Weasley, quienes inspeccionaban los nuevos productos con emocion.

Belle inspeccionó su campo de vision, aun, y luego de pasar veinte minutos buscando a el gemelo mayor, no lo encontró por ningún rincon de la tienda. E incluso no noto ninguna cabellera pelirroja a lo largo de su dia.