XXX: Noche de Niñeros

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George deslizó su mano sobre su centelleante cabello pelirrojo, sintiendo como el silencio de la oficina lo absorbia completamente.

El ruido de los clientes en la tienda era acallado por las duras paredes de cemento, permitiendo solo escuchar un murmullo un poco irritante.

Chasqueo la lengua, mientras se apoyaba contra el escritorio detrás de el, intentando recobrar el aliento.

La puerta de la oficina se abrió, sobresaltado un poco a George ante el golpe repentino de esta.

-: ¡George! ¡A qué no sabes que...!. -Fred levantó la vista de el papel entre sus manos, analizando a su gemelo con detenimiento, notando las marcas moradas a los lados de su cuello, y la camisa desabotonada y ligeramente mal colocada-. ¿Te pasaste la aspiradora por el cuello?.

George lo miro fulminante, a la vez que el pelirrojo mayor soltaba una risa que caía en decadencia al ver la expresión sería de su gemelo.

Rápidamente paso saliva y se intento recomponer, poniéndose un poco más serio.

-¿Que mierda te paso?, Acabo de ver a Sonia salir echa una furia de la tienda. -dejo el papel sobre el estante a su lado, mientras esperaba la respuesta de su gemelo, quien solo bajo la mirada furioso.

-No debes dejar pasar a los clientes hasta mi oficina si no son invitados, puede ser peligroso. -respondio, intentando mantener la calma y controlar la vergüenza e irá que se iba expandiendo por su cuerpo.

Fred arqueo una ceja indignado, analizando la expresión de su gemelo que claramente intentaba contener una ira que poco a poco se le iba de las manos.

-No seas idiota, yo no deja pasar a absolutamente nadie. -confeso, creando cierto desconcierto por parte de ambos gemelos-. ¿Te la ibas a follar?.

-¿Que? No... no podría hacerle eso a...

-...¿Belle?. -agrego Fred, sonriendole con ternura-. pero no son novios, ¿O si?.

Ambos se miraron por unos segundos.

-Si... no --se retracto-, no somos nada. -George se sentó en la silla de oficina, tomando la lapicera entre sus dedos intentando prestarle atención a la cantidad exorbitante de números de la hoja, sin embargo, la mirada fija de su hermano no lo dejaba concentrarse-. ¿Algo más, Fred?.

El pelirrojo mayor se sentó sobre una esquina del escritorio, mirándolo con cierta sonrisa de cómplice.

George odiaba esa sonrisa, eso significaba que el pelirrojo mayor se burlaba de el internamente y eso le desagradaba.

-¿Por qué no se lo pides?, ¿Tienes miedo?. -bromeo, George río entre dientes.

-Claro que no, simplemente no se me dió la oportunidad. -George garabateo un par de líneas confusas sobre una hoja en blanco-. De todas formas, planeaba hacerlo en algún momento.

-Si, pero te lanzas hacia atrás con facilidad. -Fred miro a su hermano, recibiendo solo una mirada cortante-. George, te he visto coqueteando con chicas en hogwarts y luego lanzarte hacia atrás con facilidad.

-Era adolescente.

-Eras un idiota.

George empujó a su hermano fuera del escritorio, quemando con su mirada a Fred, quien solo le dió una mirada burlona.

-Bueno... -Fred acercó su cabeza hasta chocar la de su hermano, este respondió echándose hacia atrás-. Deberías de apúrarte, ví a Caleb muy interesado en ella.

-Caleb que se vaya a la puta mierda, con eso digo todo. Belle no saldría con una persona como el.

Intentando engañarse a si mismo, ya que sabía que Caleb era un chico encantador, profundo y atractivo que enamoraría a cualquier chica que se lo posará enfrente.

Serendipia Pelirroja | G Weasley | +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora