3

1K 194 69
                                    


Una camiseta negra, un jean y chaqueta de cuero con su nombre artístico en la espalda, ha sido su elección para esta noche. Peina un poco su cabello castaño, coloca un poco de perfume en su cuerpo, se siente tan nervioso como si de una cita se tratase. Son las 8 de la noche, tiene tiempo suficiente para llegar al club.

Se siente ganador.

Le tomó unos 20 minutos de camino en taxi hasta en club BUKU, en Itaewon, puede ver como todas las noches en aquel barrio, la algarabía y la buena música retumban en cada rincón. Ya es conocido en el lugar, lo que hace más fácil entrar, saluda a todos en el sitio y solo le queda esperar a que comience la batalla.

Se encuentra bebiendo una cerveza en la barra, conversando de cosas triviales con el encargado de esta, hasta que uno de los jueces del show de esa noche le hace un llamado de atención para que se prepare. La batalla está a punto de empezar.

Las luces se encienden, el show va a empezar, la tensión en el ambiente se siente, únicamente el bullicio de los expectadores se puede escuchar, de pronto la música de fondo comienza. Min Yoongi ha empezado su improvisación, la gente grita y aplaude al escuchar las rimas perfectas del chico. Namjoon sorprendido porque es mucho mejor de lo que esperaba, en algún momento sintió sus piernas flaquear, pero lo dió todo en el escenario.

Luego de una intensa batalla, Min Yoongi, por elección unánime de los jueces presentes, fue el ganador.

Jadeando y con el corazón latiendo a mil por horas, Namjoon pese a haber perdido, se encontraba satisfecho, pudo dar mucho más de lo que había planeado. Aplausos y ovaciones recibe por parte de los jóvenes, se limita a sonreír, estaba feliz, realmente lo estaba.

Esquivando a la gente y el ruido por la música de Hip Hop del sitio, sale por un momento para fumar, así aplaca un poco los nervios del momento. Se encuentra distraído expulsando el aire del cigarrillo y un grupo se le acerca, entre ellos Min Yoongi con una sonrisa ladina se coloca frente a él.

Las estaturas de ambos son notables, Namjoon en mucho más alto que Yoongi pero la presencia del más bajo es imponente, podría hacerte sentir diminuto por el aura que transmite.

- Buena batalla - comentó el chico, mientras le estira el puño para saludarlo.

- Me diste una paliza - responde Namjoon con una sonrisa, devolviendo el saludo, chocando los puños y pisando la colilla de cigarrillo.

- Me gusta el estilo que tienes, deberíamos charlar, ¿una cerveza? - pregunta Yoongi, Namjoon a su vez asiente un tanto emocionado, tal vez perdió la batalla pero ganó una posibilidad de una buena amistad.

La noche transcurre y entre cervezas y una buena plática, descubrió que ambos tienen mucho en común, Yoongi asiste a la misma universidad en la que fue admitido, esto lo hizo sentir un poco más cómodo ya que no iba a estar tan solo, caminando perdido en el campus. Quedaron en algún momento ir juntos al estudio de Yoongi, la idea le emocionaba en sobremanera. Fue automático, Namjoon y Yoongi se volvieron muy cercanos desde entonces.

Es la 1 de la mañana y Namjoon ha llegado a su pequeño departamento, somnoliento a causa del cansancio y las cervezas, se dirige al baño arrastrando los pies para limpiar su cuerpo de los olores impregnados del club.

Apenas se coloca la ropa interior, aún con el cabello mojado, sin importar si la noche se había vuelto un poco fría, se mete bajo las sábanas y apenas iba a quedarse dormido, recordó la mirada intensa de aquel chico. Parecía que aún sus ojos los tuviera clavados en él, una extraña sensación recorrió su interior.

¿Por qué lo miraba tan profundamente?

Decidió dejar sus pensamientos en segundo plano, este día de principio a fin ha sido realmente intenso en muchos aspectos, se acomodó en su suave cama y al instante se queda dormido.

...

Despertó casi al medio día, no tiene mucho que hacer ya que es sábado, se estira sobre la cama y aún quiere permanecer un rato más en ella.

Siente un poco de frío, se dio cuenta que había dormido casi desnudo por causa del cansancio, aún puede recordar la gran noche que tuvo, aquello lo hace sonreír.

- Creo que mejor me levanto -, se dice, convencido de que hay algo más afuera que sería seguramente más interesante que fundirse en su sofá todo el día. Se asea, cepilla sus dientes y va a la cocina a prepararse algo para desayunar.

Unas tostadas con miel y por supuesto, su café. Revisa en su teléfono las últimas noticias y le llamó la atención una nueva exposición en uno de los museos en el centro de la ciudad, sonrió alegremente, estaba dicho, ya tenía planes para hoy.

Namjoon elige un atuendo sencillo para visitar el museo, no olvida su abrigo, el cielo se encuentra lleno de nubes grises, lo cual le indica que no saldrá el sol. Sale de su departamento y decide caminar y apenas salió de su edificio, la brisa fresca cubrió su rostro, llenó sus pulmones de aire y caminó sin mucho apuro por las calles de la ciudad.

Llegó al museo y notó que se encontraba vacío, lo cual lo hizo sentir mucho más cómodo, encuentra paz en estos lugares, una paz indescriptible.

Mira con atención cada cuadro, con sus detalles, observa en la placa informativa y asiente a gusto con el talento del artista. Continúa caminando sin hacer un solo ruido, con su mirada atenta sin querer perderse de nada.

Está tan sumido en el arte y su belleza, que mientras caminada de espaldas, no se percató de que alguien hacía exactamente lo mismo del otro lado, sus pensamientos fueron interrumpidos al choque de ambos.

- ¡Oh! Lo siento - dijo avergonzado el joven mientras hacía una reverencia.

Namjoon de dio vuelta y sonrió, creo que está de suerte el día de hoy, un joven hermoso, alto y delgado, cabello lacio y negro que tapaba un poco su rostro, ojos brillantes, labios gruesos y rosados y por supuesto, mejillas sonrojadas por el incidente.

- No pasa nada, yo también estaba distraído - respondió mientras una pequeña sonrisa se formaba en sus labios.

- Y-yo, bueno...Disculpa nuevamente, ten un buen día - mencionó el chico antes de alejarse. Namjoon no tuvo oportunidad de contestar, se limitó a sonreír porque le causó un poco de ternura la timidez del muchacho. Siente un poco de inquietud, por la rapidez en que sucedieron los hechos. Pero un cuadro al final del pasillo lo hizo volver en sí y olvidar lo que acababa de ocurrir.


Corregido 20032023

Chico Del Museo ~ NamJinTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang