Chico Del Museo ~ NamJin

50. Final.

Un par de semanas después y Namjoon ya estaba de vuelta en la universidad. Camina despacio y sin apuros, siendo el centro de atención. Muchos se sorprendieron de su llegada, algunos creyeron que aún se encontraba en pésimas condiciones.

A su lado, Seokjin lo llevaba de la mano, esta vez, caminando prestando atención a cada movimiento que su novio daba y el resto de chicos, parecían guardaespaldas alrededor de él.

— ¡Qué exagerados! — decía Namjoon entre risas y algo avergonzado, al ver a Jimin y a Hoseok abriendo los brazos evitando que nadie se acercara y mirando a todos lados como un par de paranoicos.

— Necesitamos protegerte, Nam
— respondió convencido Jimin que miraba a todos lados. Lo que no se dieron cuenta, es que alguien a una distancia considerable los observaba.

El día de clases transcurrió de manera normal, Namjoon cómo siempre, prestaba atención y anotaba todas las ideas importantes en su libreta. Seokjin cómo presidente del consejo, iba de un lado a otro con su grupo de compañeros. Jungkook, se convirtió en el primero de su clase de Inglés, gracias a la ayuda que su mayor le brindó. Namjoon no podía estar más feliz por él.

Yoongi y Hoseok se estaban despidiendo al haberse reunido nuevamente en cuánto terminó la jornada de clases, cuando la presencia de Taehyung los sorprendió a todos.

Notoriamente había un cambio en él, a pesar de que lo ignoraban, se habían dado cuenta que almorzaba solo, ya no hablaba con su grupo de falsos amigos y tampoco asistía a sus fiestas. Jungkook al verlo se sorprendió mucho, resultó ser el chico que estaba a punto de saltar del puente aquella noche.

— ¿Tú? — exclamó Jungkook con sorpresa y el resto de chicos lo miraron confundidos al no entender la situación. Taehyung abrió los ojos y lo miró por varios segundos para luego bajar la cabeza.

— ¿Qué quieres Taehyung? — preguntó con indiferencia Seokjin, Namjoon lo miraba en silencio pero con algo de dolor, pues el chico no era más que un zombie.

— ¿Puedo hablar con Namjoon?

— Lo que tengas que decir, dícelo aquí.

— Jinnie, está bien. Vamos Taehyung — respondió Namjoon apretando la mano de Seokjin y dándole un beso en la mejilla, caminó junto a Taehyung que estaba sumamente tenso, el moreno no acompañó con las manos en los bolsillos ante la mirada de desconcierto del resto.

Los dos chicos se alejaron un poco hasta detenerse en un pequeño sitio que no era utilizado en el campus. Namjoon miró al menor de los Kim que no decía absolutamente nada, tan solo escuchaba pequeños sollozos que salían de sus labios.

— ¿Qué tienes Tae?

Todo pasó tan rápido y apenas pudo sentir cuando Taehyung cayó al piso de rodillas aferrándose a su pantalón, lloraba tanto que Namjoon se quedó quieto y sorprendido por lo que estaba ocurriendo.

— Tae, qué-

— ¡Perdóname Namjoon, te lo ruego!

— ¿Pero por qué? Ya todo está en el pasado.

— ¡No lo entiendes, yo te hice todo esto!

Namjoon se agachó al nivel de Taehyung, confundido, lo tomó de los brazos y lo puso de pie, el chico se aferró con fuerza a su camiseta y puso su frente en su pecho, seguía llorando y el moreno no entendía nada de lo que estaba pasando.

— ¿Taehyung, a qué te refieres?

— ¡Yo fuí quien envió a esos hombres a golpearte!

Namjoon lo soltó y dió un par de pasos hacia atrás por aquella confesión, se llevó las manos a la boca por la impresión y su corazón dolió. Taehyung no paraba de llorar, el chico no podía moverse de su sitio, en su mente pasaron miles de recuerdos dolorosos, verse así mismo en su sueño profundo, despertar y sentir dolor en cada rincón de su cuerpo, ver llorar a su novio cada noche con desesperación, la preocupación en el rostro de sus mejores amigos. Todo llegó a su mente como una película. Lo miró por unos segundos más y al final tomó aire con algo de dificultad, se acercó a Taehyung nuevamente y lo abrazó.