Chico Del Museo ~ NamJin

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Gracias al esfuerzo y a sus altas capacidades, ahora Namjoon es parte del grupo de estudiantes que realizan tutorías en materias específicas en sus horas libres. Le gusta enseñar y explicar. Siempre los retos que se le impongan los toma con mucha alegría.

Termina su clase y sale rumbo a la biblioteca, en pocos minutos llegará el estudiante que necesita clases extras de Inglés. Esta vez no comerá con Jin porque su clase tuvo una práctica de campo y se verán por la noche.

Namjoon camina por los largos pasillos hasta llegar a la cancha deportiva, saluda a sus compañeros y pasa por el gran parque hasta llegar a su lugar de destino. La biblioteca está casi vacía, a esta hora muchos chicos están en clase, es un buen día para comenzar las tutorías.

Mira la hora en su teléfono y faltan unos cuantos minutos para que llegue aquel alumno pero no ve a nadie entrar por la puerta. Se dispone a hojear los apuntes de inglés y hacer ciertas anotaciones en una libreta para organizar mejor las ideas.

Mientras está sumido en sus pensamientos, siente una presencia frente a él y el golpe de la mochila sobre la mesa, Namjoon levanta la mirada y se sorprende al ver al joven del que han estado hablando durante varias semanas.

— Hola, perdón por la tardanza. Estaba en clase de historia — comenta el joven para acomodarse en su asiento.

Namjoon sonríe y asiente con la cabeza.

— Bien, bueno creo que ya sabes mi nombre. Pero no recuerdo el tuyo.

— Soy Jungkook.

— Mucho gusto, Jungkook. ¿Empezamos?

— Claro.

— ¿Tienes tus apuntes de inglés?

El chico asiente rápidamente para sacar su libreta y mostrarle a Namjoon los apuntes realizados. El chico lo observa y pese a todos los comentarios negativos que circulan con respecto a él, lo nota que en realidad es muy tranquilo y hasta podría decir que tiene una personalidad agradable.

— ... Las oraciones condicionales son oraciones del lenguaje natural que expresan que una cosa depende de otra. Por ejemplo: Si duermes bien, despertarás de buen humor. ¿Comprendes? — explica Namjoon con mucha paciencia, tratando de ser lo más claro posible para que el chico entienda y pueda realizar sus tareas.

— No debo olvidar el "If", ¿Cierto? — pregunta Jungkook y Namjoon asiente con orgullo, pues está entendiendo más rápido de lo que imaginó.

— Tomemos un descanso de diez minutos, lo estás haciendo bien, Jungkook.

El chico asiente pero se queda en silencio observando cada movimiento que realiza Namjoon, que, movido por la curiosidad, detiene sus acciones y lo mira con una sonrisa.

— ¿Pasa algo? Te he notado un poco incómodo. Puedes decirme lo que quieras.

— Bueno... Eres la primera persona que veo que no me tiene miedo.

— ¿Por qué tendría miedo? Mmm.. ¿Eres un matón o algo así?

Jungkook ríe bajito y niega con la cabeza ante la mirada divertida de Namjoon, hizo que el ambiente se relajara un poco y se sintiera un poco más cómodo.

— He escuchado que soy hijo de un mafioso, que vendo drogas o cosas por el estilo. Nada de eso es cierto.

— Lo sé, fuiste becado al igual que yo. ¿Cierto?

— Si...

— Entonces... ¿Puedo preguntar por qué golpeaste el otro día a ese muchacho?

— Detesto que se metan con los más débiles. El tipo le había robado el dinero de su trabajo de medio tiempo a un compañero. Yo solo hice que se lo devolviera.

— Jungkook, ¿Puedo decirte algo?

— Adelante.

— Cualquier cosa que hagas, inclusive las más nobles acciones, si las acompañas con violencia, es como si fueras uno más de los malos. ¿Comprendes?

La mirada de Jungkook se desvío para un costado y Namjoon notó tristeza en su expresión. El chico bajó la cabeza y Namjoon sintió la necesidad de querer ayudarlo. Tiene una sensación de que el chico solo necesita un buen amigo.

— Sabes, yo... Yo era como esos débiles en secundaria. Todos los días me golpeaban, una vez me golpearon tanto que estuve inconsciente durante tres días. Papá nunca quiso tener problemas con los padres de esos chicos y por eso me mandó lejos. Tengo tanta rabia de ver cómo se aprovechan de los que no pueden defenderse y yo... Solo quiero protegerlos como nunca lo hicieron conmigo.

El corazón de Namjoon se rompió al escuchar la tristeza en las palabras del chico que estaba a punto de llorar. Se acercó un poco a Jungkook y palmeó su espalda para que sintiera algo de consuelo. El chico al cabo de unos minutos se limpió los ojos con la manga de su buzo y sonrió.

— Vamos chico. Puedes hacer las cosas bien de ahora en adelante. Si puedes comenzar de nuevo — culmina Namjoon brindándole una cálida sonrisa.

— Gracias por escucharme. Yo sabía que no me había equivocado contigo.

— ¿Qué quieres decir?

— Que no solo rapeas bien, eres un ser humano excepcional.

— ¿Cómo sabes que rapeo?

— No lo veas como si estuviera acosándote por favor, pero voy todos los fines de semana a BUKU por ti. Te admiro mucho.

— ¡Wow! Me siento halagado. La próxima vez, acércate a mi para saludarte correctamente. Ya somos amigos, ¿No es así?

— Amigos. Me gusta esa palabra.

— ¿Continuamos? Voy a escribirte varias oraciones....