Capítulo 35: Preludio a la tempestad

2.9K 172 717
                                    

En esta tarde, en el campo de entrenamiento, tres días después del gran sermón que nos dieron los pilares a Shinazugawa y a mí, yo Tomioka Giyuu, estoy supervisando el entrenamiento no solo de los pilares, también de los cazadores que han obtenido la aprobación de estos para integrarse a esta última etapa.

No me sorprendió ver a los cazadores que se integraron estos días con nosotros, todos los tsugukos están aquí, así como Makomo, Kanao, el escandaloso de Inosuke, un raro y callado Zenitsu y Genya.

Creo que después de la confrontación que tuve con Shinazugawa hace días, el trato que tiene con su hermano cambió, ya que, por el momento, ya no trata de convencerlo de que se retire y tampoco le grita tanto, aunque también me enteré de que tuvo una larga plática con Masachika y Yae.

El entrenamiento que tenemos el día de hoy es un combate royal de todos contra todos, el objetivo es quitarnos las cintas que tenemos atados en la cabeza, aquel cazador que pierda su cinta es eliminado.

La arena era un área circular y nadie podía salirse de ella, si lo hacen quedarían descalificados, se pueden usar cualquier técnica de espada y solo portar las bokken. Bombas, shuriken o cualquier otro artefacto estaba prohibido.

Una regla adicional que propuso Makomo, fue que los combates fueran por la cinta, si se veía un combate personal serian descalificados. A lo que todos estuvieron de acuerdo.

Al principio, el combate era algo lento, muchos decidieron guardar cierta distancia y mantenerse a la defensiva para ahorrar energías. Muy pocos fueron los que se lanzaron al ataque desde el principio. Uzui, Rengoku, Inosuke y Shinazugawa fueron de esos pocos que atacaron sin pensarlo mucho.

Después de cierto estancamiento, algunos aprovecharon para pasar a la ofensiva, como Iguro y las hermanas Kocho y, por último, algunos decidieron hacer equipo como fue el caso de Kanao y Tanjiro o Makomo y Sabito.

Mitsuri me estaba atacando, ella intentaba por todos los medios quitarme la cinta de la cabeza, pero cuando me coloqué por su espalda y estuve a punto de quitarle su cinta, Iguro se acercó a ayudarla.

- ¡Iguro san!

- Hagamos equipo Kanronji.

- ¡Si!

Así ambos empezaron a atacarme. Este equipo está bastante equilibrado, por lo que me es difícil esquivarlos al mismo tiempo. Se me ocurrió una idea para poder quitármelos de encima, ya que no lejos de mi vi que estaba Himejima y empecé a correr hacia él.

- ¡No huyas!

Me gritó Iguro, pero yo lo ignoré, solo seguí corriendo y al estar algo cerca de Himejima, él se da cuenta de mi llegada. Le ataqué de una forma que fuera fácil de escapar cuando me bloqueara. Al bloquearme hago un giro en el aire y ahora quedé a su espalda.

Como Mitsuri e Iguro venían corriendo detrás de mí, se toparon ahora con una gran muralla llamada Himejima, ambos se detuvieron de golpe, pero como Himejima los tenía de frente, los empezó a atacar.

- ¡Ah! Nos engañó.

Fue el comentario de Mitsuri y me alejé de ahí para no verme involucrado con Himejima. No obstante, no pude ir demasiado lejos porque dos personas me detuvieron el paso.

- Ara ara Giyuu san, eso fue muy bajo para Mitsuri san e Iguro san.

Kanae me sonríe mientras que Shinobu se pone en guardia.

- Bueno, a veces para sobrevivir tienes que depender de tu entorno – Les dije.

- En eso tienes razón Giyuu – Shinobu poco a poco se separa de Kanae – Pero lamento decirte que eso no funcionará contra nosotras.

Después de la tormentaOnde histórias criam vida. Descubra agora