Capítulo 44: El demonio del odio (Parte II)

1.3K 114 208
                                    

No podía perdonar a este demonio que se atrevió a lastimar a Kanronji, yo Iguro Obanai, tengo que alejarlo lo más que pueda de ella y esperar a que Makomo destruya el cuello de ese enano.

Me abalance hacia el demonio, atacaba diagonalmente con mi espada para evitar que este demonio tuviera la oportunidad de contraatacarme, tampoco le estoy dando un respiro, apenas mi espada choca con una de sus dagas rápidamente lanzo otro ataque en diagonal.

- Que molesto eres.

El demonio parece más enojado que antes, aparte de que ahora está a la defensiva y eso es un poco raro, durante todo el combate jamás tuve la oportunidad de estar a la ofensiva ¿Será por el enojo que tengo?

No, esto es diferente, ya me había enojado antes con un demonio y nunca había tenido este, como decirlo, aumento de fuerza.

"El entrenamiento para despertar la marca de cazador.

¿Hablas de las marcas que utilizaste para hacer retroceder a Muzan?"

Si, eso tiene que ser, en alguna parte de mi cuerpo debió aparecer una marca de cazador.

"En estos momentos, mi frecuencia cardiaca debe ser superior a las 200 pulsaciones por minuto y mi temperatura corporal debe estar por los 39 grados Celsius."

Eso fue lo que nos dijo Tomioka cuando activó su marca frente a todos nosotros y es la misma sensación que yo tengo en estos momentos. No hay duda, finalmente he activado mi propia marca.

- Je, jamás creí que en verdad se lo agradecería.

- ¿Qué?

- Oh, no estaba hablando contigo.

Tomioka, mi primera impresión de ti fue que eras un fraude, cuando escuché los rumores de cómo te habías convertido en pilar, pensé que habías hecho trampa o algo por el estilo. Por eso cuando se anunció que ibas a dar un entrenamiento especial por seis meses decidí ingresar para comprobarlo por mí mismo.

Fue gracias a ese entrenamiento que pude conocer a Kanronji, para mí la mujer más hermosa del mundo, sin embargo, al principio pensaba que tu estabas tras de ella por la forma en la que le ayudabas, no te voy a mentir Tomioka, en verdad tenía celos de ti.

Esos celos aumentaron cuando tú y ella tuvieron esa cita en ese restaurante occidental, cuando los vi comiendo llegué a odiarte, pero de repente, tú saliste de ese restaurante y nos invitaste a comer con ustedes.

Cuando me senté en aquella mesa me preguntaba cómo te atreviste a invitarnos si estabas en una cita con Kanronji, sin embargo, cuando me dijiste que eso había sido una petición de Kanronji me calmé un poco, incluso hablé contigo aquella noche.

Cuando Kanronji comenzó a llamarte por tu nombre, nuevamente sentía celos de ti, pero eso terminó cuando me ayudaste en aquella ocasión.

"Vamos a invitarla a comer y después me retiraré.

¿Estás seguro?

Si, diré que tengo algo que hacer y los dejaré solos"

Jamás imaginé que Tomioka me ayudaría a tener un momento a solas con Kanronji, cuando le pregunté porque lo hacía, sus ojos se oscurecieron un poco mientras su rostro se mostraba de forma nostálgica.

"Esta vez, quiero que sean felices.

¿Eh?"

Jamás entendí que quiso decir con eso y él nunca lo volvió a mencionar. El plan se hizo como habíamos acordado y desde esa noche he pasado mucho más tiempo con Kanronji.

Después de la tormentaWhere stories live. Discover now