CAPÍTULO 42 - boyfriend

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Simplemente la letra y ellos dos <3

Tengo que detener al instante el sorbo que le estoy dando a la copa que sostengo entre mis manos y alejarla de mis labios rápidamente para no derramar su contenido al no poder evitar reírme por la tontería que acaba de soltar Tyler.

Su sonrisa se ensancha aún más al ver mi torpe reacción y cómo casi derramo todo el contenido de la copa sobre mi vestido, revelando una hermosa y extremadamente contagiosa risa imposible de ocultar.

- Es en serio, ¡no me lo puedes negar!

Todavía sigo riéndome a carcajadas - llegando al punto de casi dolerme el estómago - por lo que acaba de decir, aún incapaz de formular frases coherentes. La verdad es que nunca habría pensado que Tyler pudiera ser tan gracioso.

Llevamos casi diez minutos discutiendo por el desastroso implante capilar que tiene un hombre de mediana edad que se encuentra unos metros más adelante de nosotros. Está rodeado por más señores de su misma edad y lleva hablando con ellos desde hace un rato mientras varios mechones de su peluquín se han ido despegando por la parte trasera poco a poco.

La introducción terminó hace unos minutos y ahora los asistentes estamos parados en medio de la sala esperando a que empiecen a enseñarnos las obras de arte, tiempo que Tyler y yo hemos aprovechado observando a este señor.

Os habéis estado riendo del pobre hombre.

Hemos estado debatiendo su complicada situación capilar.

- Venga ya, no seas tan malo - le digo dándole un suave golpe en el brazo.

- Por favor, ¡si se le nota casi el pegamento en los mechones de pelo! Hasta Donald Trump se coloca mejor el peluquín.

- Vale, vale, puede ser que no esté muy elaborado, pero es imposible que con el dinero que debe tener ese hombre se haga eso en el pelo.

- Entonces, ¿admites que tiene una peluca? Es decir, ¿admites que tengo razón? - cuestiona cambiando la pregunta a su favor, con una pequeña sonrisa victoriosa en su rostro.

Lo miro durante unos segundos sin contestarle, mordiendo mi labio inferior intentando reprimir una sonrisa mientras pienso en una forma en la que decir que está en lo correcto sin darle la razón en sí.

En serio, este chico tiene un problema; es demasiado competitivo. Todo lo convierte en una competición, y lo peor es que no sabe perder.

«Tampoco me hace falta aprender, nunca pierdo» lo escucho decir en mi mente, como si esa misma hubiera sido su respuesta.

- Admito que debería pedirle al que le hizo ese destrozo que le devolviera el dinero.

Tyler niega con la cabeza mientras se ríe al escuchar mi respuesta.

- Eres más orgullosa... - murmura en voz baja aunque sabe perfectamente que lo puedo escuchar -. Bueno, en fin, voy a ir a buscar otra copa - dice tras unos segundos -. ¿Quieres que te traiga algo más?

- Cualquier cosa que no sea champagne, por favor.

Tyler me da un asentimiento de cabeza y se da la vuelta para irse en dirección a la barra, donde varios camareros sirven copas a diversos asistentes. No puedo evitar mirar su espalda mientras se aleja de mí, aún con una sonrisa en el rostro; hacía mucho tiempo que no me divertía tanto con alguien en una noche.

La verdad es que todo esto del asesino, el miedo y estrés constante que supone, hace tu vida mucho más miserable. Estar todo el tiempo preocupada y pendiente de con quién hablas, quién te mira por un segundo de más, quién puede tener alguna razón para querer hacerte esto... hace que se te quiten las ganas de hacer cualquier cosa. Y si encima no puedes hablarle de eso a nadie, lo hace mil veces peor.

5 días [COMPLETA]Where stories live. Discover now