CAPÍTULO 53 - Anti-Hero

12 4 7
                                    

Tras Tyler dejarnos frente a nuestra residencia, Kayla y yo subimos a nuestro apartamento y nada más cerrar la puerta, ambas nos lanzamos sobre el sofá; estamos absolutamente agotadas.

El día de hoy ha sido demasiado intenso, tanto física como mentalmente. Muchas cosas nuevas descubiertas, frescas ideas y recientes teorías por explorar, hacernos a la idea de que alguien nos llevaba siguiendo por bastante tiempo y no teníamos ni idea de ello... ¿Cómo sabemos que el propio asesino o cualquier otra persona no ha estado detrás de nuestros pasos también? Esto demuestra que ahora más que nunca no podemos estar seguros en ningún lugar.

Tuvimos suerte de que pudimos escapar a tiempo, antes de que descubrieran nuestras identidades, y de que tuviera cierto conocimiento sobre la conducción, pues gracias a eso y que no hubiera ningún obstáculo en la carretera, pudimos salir de allí a salvo. ¿No se supone que Kayla tenía el carnet y sabía conducir? Si es así, ¿por qué no pudo hacerlo? ¿Por qué se paralizó frente al volante?

- ¿Kayla? - mi voz, escasa de decisión y confianza, es el único sonido que se escucha en la estancia.

- ¿Mhm?

Trago saliva antes de contestarle, insegura de si debería hacerle esta pregunta o no y, sobre todo, nerviosa porque me da miedo conocer su respuesta.

- ¿Por qué no condujiste hoy cuando estábamos frente al bar?

La chica no contesta durante un par de segundos, incluso llego a pensar que no me ha escuchado, pero justo cuando voy a repetir la pregunta, las palabras salen de su boca.

- No sé conducir, Alison, me daba miedo coger el volante y estrellarnos - contesta de una forma casi robótica.

- Entonces, ¿por qué me contó Nathan que tienes el carnet de conducir desde hace años?

Se hace el silencio de nuevo en la estancia, pero esta vez de una forma mucho más intensa. Sé que me ha escuchado esta vez, perfectamente, y la razón por la que se está demorando tanto en contestarme me está asustando. Me aterra escuchar la respuesta que me vaya a dar Kayla, aunque sabía que en algún momento íbamos a tener esta conversación; solo era cuestión de tiempo.

- Alison, no creo... No creo que debamos hablar de esto ahora, ¿sí?

- Kayla, ¿por qué me has estado mintiendo diciéndome que no sabías conducir, a mí y al resto?

- No quiero hablar de esto, me voy a dormir - la escucho levantarse del sofá.

- No, Kayla, espera - la detengo, levantándome para estar frente a ella. Su rostro solo expresa pánico y terror, y en ese mismo momento me replanteo conocer la verdad. Nunca había visto a Kayla en este estado, y me asusta la razón -. ¿Por qué te aterra tanto conducir si tienes tu licencia desde hace mucho tiempo?

- Si no te lo he contado hasta ahora es por una razón, y dudo que quieras saberla de todas formas - se pone a la defensiva, moviéndose para pasar por mi lado. No obstante, me muevo con ella, impidiéndole el paso de nuevo.

- Sí quiero saberlo, no me importa qué haya sucedido. Somos amigas, mejores amigas, y puedes contarme lo que sea, lo sabes.

- Hay ciertas cosas que están mejor guardadas, y cuanto más al fondo mejor - declara en un tono firme y seco -. Y ahora, si no te importa, me gustaría irme a mi cuarto de una vez por todas.

Pasa por mi lado sin decir nada más, dejándome parada en mi lugar, inmersa en mis pensamientos unos instantes. Kayla solo se pone a la defensiva cuando entras en un terreno que no le gusta, pero nunca había sido tanto como hoy, y eso que sé que conmigo se reprime. Creo que solo actuaría de esta forma si alguien nombrara su... Y de repente, todo parece tener sentido.

5 días [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora