Capítulo 106

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Tenía 5 meses de embarazo, mi vientre se veía un poco más abultado y el cansancio ya formaba parte de mi día a día, comía demasiado y me sentía muy sentimental frecuentemente, afortunadamente el riesgo por el golpe que recibí hace tiempo ya había pasado, habíamos ido al ginecólogo para saber el sexo de nuestro bebé, dijo que sería niña, en ese momento Oliver comenzó a saltar de alegría, lloró y abrazó al médico, yo no pude evitar reír al ver su reacción, después le contamos a mis padres y ellos lloraron de la emoción.
Estaba yendo al restaurante con mis padres a ayudarles en lo que ellos me permitían hacer, además de que asistía a la academia por las tardes pero solo medio tiempo ya que era lo que me permitían por el embarazo.
Ahora mismo me encontraba en mi casa, hoy tendría una cita romántica con Oliver, me había colocado un vestido de color beige que llegaba a la mitad de mis muslos y tenía un escote triangular, mi vientre se notaba aún más cuándo utilizaba este tipo de vestidos holgados, llevaba puestos zapatos de piso y me había atado el cabello en rizos, me coloque un poco de perfume y labial que combinaba con el color del vestido, él me había dicho que ya estaba en camino así que solo quedaba esperarlo. Mis padres estaban enterados y no se habían opuesto, nuestra relación había mejorado y estábamos más unidos que nunca, mi padre hace un par de días llegó a casa con un pequeño suéter de color amarillo, dijo que sería para su nieta Nadine, juntos habíamos elegido ese nombre y a todos nos había encantado.
El claxon comenzó a sonar y me dí prisa para bajar de mi habitación, me asegure de dejarles una nota a mis padres, además de la cena preparada y un postre para que lo disfruten ambos, después me asegure de cerrar la puerta y apagar las luces de todas las habitaciones, tomé mi gabardina negra y salí de casa cubriendome del frío, él me estaba esperando afuera de su auto, llevaba, por primera vez, ropa normal, llevaba puesta una chaqueta de color negra y un pantalón del mismo color, su cabello estaba revuelto y se veía precioso, le sonreí y me acerque decidida para darle un beso en los labios.
Oliver: te extrañé, cariño.- me dió un beso más duradero, me rodeó la cintura y después miró mi abdomen, una sonrisa se le dibujo en su rostro.- te ves preciosa, nuestra princesa te hace ver el triple de perfecta.
Aitana: ¿ah sí?- asintió y yo le sonreí.- entonces vámonos antes de que se haga más tarde.
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Llegamos a un restaurante bastante peculiar, los colores en el interior eran bastante apasionados, era algo elegante, las mesas eran divididas en cabinas para tener un espacio personal y no sentirse incómodos, la recepcionista nos llevó a nuestra mesa y nos dejó una tableta para ordenar por medio de esta, me senté frente a Oliver, había un par de velas largas en el centro de la mesa, en el mantel había pétalos de rosa pegados y un ramo de flores en un jarrón lleno de agua.
Oliver: ¿te gusta?- asentí con emoción y él sonrió.- busque por toda la ciudad, algo que tú merecieras, pero todo era muy básico y poco convencedor, mereces un lugar bonito y entonces este fue el que más me convenció.
Aitana: es precioso, mi amor, muchas gracias por siempre tratar de darme lo mejor, te amo.- acaricié su mejilla y él dejó un beso en la palma de mi mano.- me gustaría poder darte al menos un poco de todo lo que tú haces por y para mí.
Oliver: mi amor tú ya me das todo.- le sonreí y él acarició mi mejilla.- haberte encontrado fue lo mejor que me pudo pasar, después de eso ya no quiero nada más, lo tengo todo al tenerte a ti, además, tendremos una pequeña princesa, ¿qué más podría pedir?
Aitana: me gané el universo contigo.- me sonrió nervioso y después tomó la tableta entre sus manos para comenzar a ver el menú.- elige por mí, sorprendeme aún más.
Oliver: lo que mi mujer ordené.- me recargue en el respaldo del asiento mientras lo veía concentrado deslizando su dedo de arriba hacia abajo, cada día que pasa me doy cuenta de lo cuan afortunada soy por tenerlo a mi lado, y no es que yo me sienta poca cosa para él, pero él es más de lo que yo en algún momento llegué a desear, más de lo que creí merecer, lo amo con el alma y no me atrevería a dañar su corazón, quiero pasar el resto de mi vida a su lado, tomar su mano y amarnos con locura cada día de nuestras vidas.

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