¡Cuarenta y cinco!: eventos de verano y confesiones traumáticas

2.6K 438 283
                                    

A través del paso de los minutos, JiMin se preguntó si NamJoon iba a aparecer o no. Sabía que habían pasado al menos seis minutos desde que llegó y como se encontraba cerca de la biblioteca cuando le llegó al mensaje supuso que había llegado muchísimo antes de lo que el mayor esperaba. Trató de aprovechar el tiempo libre para bajar un poco sus nervios y la incomodidad naciente para estar tranquilo.

No había tenido muchos momentos uno a uno con NamJoon, ellos no eran amigos, no hablaban a solas ni nada cercano a ello. Quizás ahora NamJoon no era el tipo de persona que lo largaba como lo había hecho al principio de su relación, pero ahora JiMin no estaba tan seguro de que hubiera una relación para empezar. ¿Por qué tan repentinamente quería tener un momento para hablar con él? Las preguntas le carcomían la cabeza, pero suponía que si el tema fuera YoonGi ya sería un poco tarde para que trate de espantarlo, en el peor de los casos, claro.

Después de diez minutos más, NamJoon hizo presencia al final del pasillo. Llevaba su ropa estilo hawaiana alegre que no combinaba del todo con su expresión seria. JiMin sonrió con labios apretados por culpa de la ansiedad y movió su mano con nerviosismo, a modo de saludo.

—Hola —saludó NamJoon cuando estuvo lo suficientemente cerca—. No me acordaba que la biblioteca estaba cerrada.

—Sí, supongo que nos tenemos que sentar aquí, ¿o prefiere ir a otro lado?

NamJoon negó con la cabeza y se sentó al lado de JiMin con las piernas cruzadas. El menor de los dos lo observó con interés, esperando que NamJoon estuviera tan nervioso como él para no sentirse tan solo, pero sólo lucía tenso. Tampoco estaba seguro de que podría estar pasando por la cabeza de NamJoon, él siempre había sido difícil de leer para JiMin.

—¿Pasó algo? —decidió preguntar primero, quizás un poco más apresurado de lo que hubiera querido.

—No realmente —contestó NamJoon con aparente calma. Miraba sus manos en el hueco entre sus piernas—. La verdad te pedí que vinieras por un impulso que tuve y ahora mismo me estoy arrepintiendo un poco.

—¿Ah sí? —JiMin se rió por la sinceridad—. No pasa nada Hyung. ¿No quiere hablar ahora? Espero que sí porque ahora me muero de curiosidad —agregó a modo de chiste y se sintió más relajado cuando NamJoon sonrió por lo bajo.

Bueno, NamJoon no se veía como alguien que viniera para amenazarlo, así que JiMin se sentía muchísimo más tranquilo.

—No sé cómo comenzar, si te soy sincero. No es un tema lindo, pero siento que vas a entenderme si te lo digo.

JiMin parpadeó, mucho más intrigado ahora.

—¿Ha hablado de esto con alguien más?

—Tú... tú serías el primero.

—Oh.

NamJoon quería hablar de algo personal sobre lo que ni siquiera había hablado con YoonGi al respecto. JiMin sintió esta especie de remolino de ansiedad en el estómago otra vez, pero ahora venía cargado de una curiosidad implícita y preocupación latente. Esperaba que no fuera algo demasiado malo, para variar.

—Bueno —se acomodó un poco, queriendo poder mirar a NamJoon directamente—. Está bien, puedo escuchar sin juzgar.

—Sí, sé que tú eres ese tipo de persona —tomó un poco de aire, tenso en su posición, la cual no abandonó ni siquiera cuando decidió que sería momento de comenzar a hablar—. Antes que nada, quiero preguntarte algo. Si me dices que no, si te incomoda, entonces hasta aquí llegamos. No quiero pasar ninguna línea contigo.

Bien, JiMin se encontraba cada vez más intrigado.

—Claro, Hyung. Puede preguntarle lo que quiera.

NamJoon se quedó callado un momento.

De persecuciones y hermanos celosos ✧ ym ➺ omegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora