Christian Grey... Cambie todo por flores y corazones.

Capitulo 22

Hoy es lunes y toca ir a la empresa de Christian, no se si estoy haciendo lo correcto, por la manera en la cual el me confunde pienso que no será adecuado trabajar junto a el, pero le di mi palabra y no me gusta faltar a ella.

Me arreglo con una falda talle alto que me llega a la rodilla color gris, una camisa manga larga hasta el codo por dentro, unos tacones negros. Me recojo el pelo en un moño, y me maquillo un poco, al verme al espejo noto que con este atuendo mi cuello esta solo, y pienso en ponerme la cadenita de Christian, si la usare, que podría pasar? El me la obsequio y no quiero ser grosera y no usarla. Estoy lista, son las 8:30 am así que corro a desayunar, tomo mis documentos, mi bolso de mano las llaves del auto y salgo, Kate se fue muy temprano al periódico donde daría sus prácticas así que tengo que cerrar muy bien.
Salgo y ahí esta mi auto, es un Audi azul marino oscuro, muy bonito, me gusta porque es discreto. Me lo regalo Bob el esposo número 4 de mama, quise negarme pero siendo honesta me encanto el auto.

Voy a en camino a Grey House, y siento nervios, dios, que me hace este hombre. Al llegar noto que es un edificio bastante alto, muy bien diseñado, entro a la recepción y una mujer muy elegante me recibe:

-Disculpe tengo una entrevista con el señor Grey, Mi nombre es Anastasia Steele- le digo a la chica que me ve de manera muy extraña.

-Muy bien señorita Steele, tome use esto, y suba por el elevador al piso 20- me dice entregándome una tarjeta de visitante, asiento y agradezco.
Subo por el elevador, la puertas se abren y hay una rubia muy elegante, dios agradezco haberme vestido así.

-Puedo ayudarle?- me dice la chica rubia que al parecer es la secretaria.

-Si, soy Anastasia Steele y tengo una entrevista con el señor Grey- Digo bastante firme.

-Un momento por favor, puede tomar asiento, gusta un café, agua, algo?- pregunta ella con un tranquilidad natural.

-Muchas gracias estoy bien.- digo.

Luego de unos minutos, me llama la misma rubia. -Señorita Steele, el señor Grey la recibirá ahora.- me estremezco y me pongo de pie.

-Por aquí, sígame porfavor- llegamos a una puerta muy grande color marrón. -Es aquí, no necesita tocar- me da una sonrisa y se marcha. Abro la puerta y ahí esta el de espaldas al gran ventanal admirando la hermosa vista que debe proporcionarle su majestuosa empresa, casi podría asegurar que pensaba en algo pues su cara emanaba tristeza. Cuando cierro el se gira.

-Ana- me dice, me ve de pies a cabeza y se acerca a mi dando grandes zancadas sin perder la elegancia. -Te ves hermosa- y sin más me planta un beso en los labios, un beso que sabe a "Te extrañe" un beso suave pero a la vez íntimo que hace me estremezca completa.

No separamos pero me siento apenada y molesta.

-Christian porque haces eso? Estamos en tu oficina.- pregunto molesta.

-Lo siento Ana, lo necesitaba.- que?

-A que te refieres con eso Christian?-

-Si Ana, lo mismo, lo necesitaba, necesito tus labios desde la cena con Elliot, y es de eso que quiero hablarte. Toma asiento- me dice señalando una silla delante de su escritorio.

-Sabía que te quedaría hermosa- me dice pero no se de que habla.

-A que te refieres?- pregunto. Y veo que su mirada baja hacia mi cuello. Oh ya veo.

-Si, algo tan hermoso se vería bien en cualquiera- digo.
El solo niega pero no dice más.

-Antes que todo quiero saber si en realidad deseas dar tus prácticas aquí?- pregunta algo serio.

-Si Christian, ya te lo había dicho.- Digo. Me intimida este hombre. Le entrego mis documentos.

-Bien Ana, tienes muy buenas calificaciones, fuiste la mejor de tu clase. Perfecto- Dice- Bien, verás Ana este trabajo consiste en ayudar a la primera asistente, tu archivarás documentos, fotocopiarás, yo podré delegarte tareas cuando la primera asistente no este, se que no es nada comparado a lo que tu estudiaste pero quiero que lleves una buena referencia cuando tengas que marcharte- al decir eso frunce los labios.- que te parece Ana?-

-Esta bien, cuando empezaría-? Pregunto emocionada!

-Mañana mismo si deseas, pero antes que aceptes nesecito hablar contigo Ana. Que harás mañana?- pregunta serio.

-Christian no tengo mucho que hacer acá...?- digo.

-Bien, almorzamos juntos?- dios santo siento que esto irá más allá de mis facultades.

-Si esta bien, dime donde y alla te veo.- le digo algo sería.

-Te envío un mensaje ok.- asiento.

-Ven, te mostrare las instalaciones.-

Y nos dirigimos hacia la puerta a recorrer el enorme edificio, siento que esto es algo nuevo, no se porque acepte a ser su asistente, "porque quieres estar con el" me grita mi subconsciente. Dios santo. Espero hacer lo correcto.