Capitulo 26

11.8K 630 8
                                    

POV Ana

Llevo 2 días acá en la cabaña de Paul, siento que me he relajado pero no dejo de pensar en Christian, porque quiso que yo supiera de ese mundo en el que esta, que quería decir con eso de "No es lo que piensas"? Estaba todo muy claro, empiezo a cuestionarme si fui muy ruda al irme y no dejarlo hablar.

Una lágrima rueda por mi mejilla sin poder detenerla, no entiendo porque lloro, quizá una parte de mi quiso creer que el era perfecto por dentro como por fuera, que razones tendrá para ser así? No se que hacer, necesito dar mis prácticas en algún lugar, y se que en la empresa de Christian me ayudaría mucho pero estar cerca de el dolería, pero no puedo esconderme por mucho tiempo.

Luego del mensaje que le envíe a Christian, pienso que estoy siendo muy dura, pero me pregunto cual será la reacción adecuada ante esto? No lo se.

Hoy es viernes y creo que es hora de volver, no se nada de Christian desde el último mensaje, lo extraño, lo tengo presente por la cadenita que llevo puesta, no me la he quitado desde que me la dio, lo siento conmigo.
Me baño, me coloco unos jeans azules que compre, una blusa verde Aqua, y unas ballerinas negras, pongo las demás cosas en un bolso que encontré acá, ya es hora de volver.

Salgo y en las casas cercanas veo que esta un auto estacionado, pero no le tomo importancia. En el camino a Seattle pienso en que hacer, que diré, pues se que Doña Katherine "Inquisidora" Kavanagh me hará miles de preguntas y obviamente no puedo decirle la verdad. He visto por el retrovisor que el auto viene detrás desde que salí. Siento nervios, espero y sólo sea imaginación.
Llego a casa pero Kate no esta, seguro esta Con Elliot así que me relajo, me voy a mi habitación dejo todo sobre la cama y vuelvo a la cocina a prepárame un te y un sándwich. Le envío un mensaje a Kate:

"Sana y salva en casa."

Ana Steele

A lo que ella responde:

"Mucho de que hablar jovencita"😛

Kate Kavanagh

Sentada en el sofá frente a la tv pero sin prestarle atención escucho que tocan la puerta. No se quien pueda ser. Al abrir me llevo la sorpresa que nunca espere.

-Christian- mi voz es un susurro apenas audible. Veo como el tiene la mirada triste y perdida.

-Porque te fuiste Ana?- pregunta en tono serio.

-Christian que esperabas que hiciera?- le digo regresando a la sala, el entra y cierra la puerta. -Querías que aplaudiera?- le digo con sarcasmo.

-No Anastasia, esperaba que me dejaras explicarte.- dice casi molesto.

-Que quieres explicar Christian?- le digo. -Ok Explica.-

-Ana, tuve un comienzo difícil en la vida, lo que viste no sólo se trata de perversión, me provee cierto control y liberación.- lo dice pasando una de sus manos por su cabello como si eso lo atormentase.

-No entiendo Christian.-

-Ana, sólo dame tiempo y te explicare mejor pero por ahora solo puedo decirte que ya no es lo mismo, desde que te conocí algo en mi cambio, ya no deseo hacer eso como antes. Por favor Ana cree en mi.-

-No lo se Christian, porque me lo mostrastes?- pregunto sería.

-Porque no quería ocultarte nada Ana, tu me vuelves loco, quiero tenerte conmigo, aún así tuviera que contarte toda mi vida porque quiero ser honesto. Pero no permitiste que te explicara.-

-Lo siento, es dificil para mi Christian, no todos lo días viene alguien y te muestra un cuarto rojo del dolor.- le digo muy sarcásticamente.

-Lo se Ana, me perdonas?- me dice acercándose a mi y me toma de la cintura. Sabes como jugar Grey.

-Esta bien- Le digo, me planta un suave beso en los labios con el que logra derretirme.

-Ana, dime trabajarás conmigo? Entiendo si no deseas saber nada de mi pero necesito que hagas tus 6 meses de prácticas, pues tengo algo para ti luego de eso.- me dice sentándose en el sillón.

-Y de que se trata?- pregunto.

-Todo a su tiempo, pero dime si lo harás? Prometo mantener mi distancia y no interferir en tu trabajo.- me dice como todo un CEO.

-Esta bien Christian, sólo dame tiempo para asimilar todo ok.- le digo dejando un beso en el aire. El solo sonríe y asiente.

-Christian como supiste que llegaba hoy?- le digo, recordando que nadie sabía, ni Kate.

-Tácticas de acoso! Te dije que las usarías.- oh por dios, esto me asusta.

-Oh ya veo, señor Christian "Megalomaniaco, Obseso del control" Grey. Tengo mucho que saber de usted- le digo soltando una risita.
Conversamos un rato, me siento muy tranquila cuando estoy con el, me refresca un poco. El se acerca a mi en el sillón y me abraza, quedamos así hasta que no se en que momento me quede dormida. Cuando despierto ahi esta el observándome y acariciando mi cabello.

-Por dios, porque no me despertaste Christian?-

-Te veías tan linda, puedo observarte dormir el tiempo que sea Anastasia eres tan hermosa.- y noto algo de tristeza en sus palabras. -Me tengo que ir dice, una parte de mi se retuerce por eso.

-Bien- le digo.

-Ana, te espero el Lunes para que empiezes tus prácticas.- dice con tono seductor.

-Bien, ahí estaré.- le digo.

-Hasta luego nena, descansa.- me siento triste porque se va. Y sin más sale, al abrir la puerta veo que el auto de Christian es el mismo que estaba en Portland y que me seguía, por dios que hombre tan enigmático. Cierro la puerta y me quedo ahí con una sonrisa tonta, debo de pensar muchas cosas. Son las 8 de la noche, Kate no vuelve, mejor me voy a dormir. Mañana será otro día.

Christian Grey... Cambie todo por flores y corazones.Where stories live. Discover now