Christian Grey... Cambie todo por flores y corazones.

Capitulo 23

POV Christian

Hoy luego del almuerzo llevaré a Ana al Escala, nesecito que ella sepa lo que soy, en estos días me he dado cuenta que necesito estar con ella. Y no se si acepte ser mi sumisa, tampoco se sí después de mostrarle mi estilo de vida aún quiera trabajar conmigo.

No se qué haré, igual le daré una buena recomendación, quiero que este en un buen trabajo, ella se lo merece, es hermosa e inteligente, quizá haga algo para que sea la editora en SIP, bueno, ya se acerca la hora así que me voy, no soporto este infierno, nesecito verla.

Me dirijo a un restaurante muy bueno en el centro de Seattle, queda algo cerca de la casa de Ana, pido la mesa para dos en un lugar privado, quiero estar asolas con ella.
Pasan unos minutos y ella aparece, tan linda como siempre, con unas llaves de auto, que extraño.

-Hola Christian, disculpa el retraso, el tráfico esta de locos- dice sacandose su Bolso y abrigo. Se ve hermosa, lleva una falda suelta color negra, con una camisa de tiras color rosa pálido y unos tacones, el cabello en una coleta, se ve fabulosa.

-Lo importante es que estas aquí.- digo guiñando un ojo.- Conduces?- pregunto porque honestamente no lo sabía.

-Si, un Audi, me lo obsequio el esposo de mama, al principio pensé que era demasiado pero llegue a comprender que era por razones de seguridad, y no objete en lo absoluto.- dice con una media sonrisa.

-Audi eh?, me parece bien.- digo. -Ordenamos?- pregunto.

-Claro- me dice ella, con su carisma, ella es tan inocente y feliz, y yo queriendo joderla con mis mierdas.

Ordenamos, comimos, tomamos vino y conversamos. Hasta qué ella me sorprende con sus palabras.

-Quiero que me digas que sucede contigo Christian?- que?

-Conmigo?- pregunto queriendo parecer sorprendido.

-Si Christian, tu eres un hombre extraño, muy enigmático, no muestras tu verdadero yo. Dime, que haces con alguien como yo?- Ana si supieras lo que quiero hacer contigo.

-Ana, que quieres decir con eso de "alguien como yo"?

-Christian tu eres un hombre guapo, exitoso, y yo una simple humana recién Graduada.- dice en tono triste.

-Ana, antes que todo no eres una simple humana, eres una mujer bella, inteligente y cualquier hombre, cualquiera estaría encantado con alguien como tu.- le digo y es la mera verdad.- La razón por la que te cite acá es porque quiero hablar de nosotros, principalmente de mi- le digo.

-Hablar de que Christian?-

-Ana, yo no soy un hombre de flores y corazones, no hago las cosas de "novias" y eso, mis gustos son muy peculiares.- le digo sin más.- Quiero explicarte con lujo de detalle a que me refiero pero debe de ser en mi apartamento.- término.

-Porque Christian?, porque no puedes explicarme aquí?- me dice algo exasperada.

-Porque quiero que lo veas con tus propios ojos- pido la cuenta y me levanto tendiendo mi mano, ella la toma con desgane.

De camino al Escala nadie dice nada. Ella va surgida en sus pensamientos. Hasta qué recuerda algo.

-Deje mi auto en el parking del restaurante Christian-

-Tranquila, llamare para un cuidado extra.- digo para calmar la tension.

-Bien- dice ella y sin más el silencio vuelve. Llegamos al Escala, subimos por el elevador.

-Vino?- pregunto, servirá para que se relaje, al igual que yo, le voy a mostrar mi secreto, el que nadie sabe.

-Si por favor- dice con una voz algo indecisa. Le sirvo una copa de Sancerre, y nos sentamos en el sofá.

-Ana, lo que te voy a mostrar es lo que soy, lo que hago, si quieres irte puedes hacerlo, si no quieres trabajar para mi lo entenderé. Quiero que sepas que mis intenciones contigo no son malas. Pero antes tienes que firmar un acuerdo de confidencialidad- le digo y veo en su rostro confusión.

-Porqué?- pregunta.

-Para que no comentes nada de lo que veas esta noche.- le digo- temo que mi abogado ha insistido.

-Esta bien Christian, firmare lo que deseen tu y tu abogado con quien obviamente has hablado de mi, pero quiero que sepas que bajo ninguna circunstancia hablaría de ti con nadie.- dios que boca más inteligente.

-Bien- digo, la llevo al escritorio y ella firma sin leer nada.

-Listo- dice.- podemos acabar con todo estoy de una vez por favor?- dice con tono molesto.

-Ven- le tiendo mi mano y la llevo frente a la puerta de mi cuarto rojo.