Christian Grey... Cambie todo por flores y corazones.

Capitulo 53

POV Christian

Mierda! Estoy tan furioso, no se por que Ana no me dijo de esa visita, estoy seguro que es Leyla, ahora estoy más preocupado que nunca por su seguridad. Es tarde así que mañana hablare con Taylor para buscarle seguridad a Ana, así ella haga berrinche no me importa, veo el reloj son las 3 am no se cuanto tiempo pase aquí, llego a la habitación y la veo profundamente dormida, su almohada esta algo húmeda, mierda estuvo llorando y yo no estuve aquí. Se que no es su culpa pero tuvo que decírmelo, me acuesto a su lado con cuidado y me quedo profundamente dormido.

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Por la mañana despierto y ella ya no esta en la cama, Son las 7am, hoy empieza en SIP, me gusta que trabaje ahí, aunque aún no es momento para que se entere de que es mía pero sólo así la mantendré segura y sabré todo lo que sucede a su alrededor.

Me ducho y me coloco un traje gris, bajo en busca de mi hermosa novia, llego a la cocina y ahí esta ella tomando su te, metida en sus pensamientos, tiene semblante preocupado y se que algo ocurre.

-Buen día- digo con una sonrisa, ella me ve seria y sólo asiente, se levanta y lleva su plato al lavadero.
-Anastasia....- no me deja terminar.

-Anastasia al carajo Christian.- dice en tono molesto y la veo asombrado, no entiendo que pasa.

-Que ocurre?- le digo en tono tranquilo, se que esta molesta pero no puedo actuar de igual manera.

-Hasta cuando será así esto?
Hasta cuando tendré que pagar por los platos rotos de otras personas?- mira hacia abajo, y se queda callada.

-No es momento Ana.- le digo levantandome.

-No Christian, sólo es cuando tu quieres. Adiós.- dice tomando su bolso y se va hacia el elevador.

-Taylor te.....- me interrumpe de nuevo.

-No Christian, quiero ir en mi auto.- y sin más se sumerge en el elevador y me deja ahí, así sin más. Que niña más terca, acaso no ve que es por su seguridad? Por qué me desafía? No le has explicado lo jodido que estas Grey..! Mierda.

-Taylor- grito sin esfuerzo.

-Señor-

-Necesito seguridad para la señorita Steele, y que intensifiquen la búsqueda de Leyla Williams, se apareció en el apartamento de Ana.-

-Cuando?- pregunta serio.

-El lunes pasado, lo supe hasta Ayer.-

-Bien, algo mas señor?- Niego- voy a tomar unos documentos y salimos a la oficina.

El día ha sido pésimo, Ana no responde ninguno de mis mensajes, no quiero llamarla porque se que tampoco me atenderá, la esperare en el apartamento con una sorpresa. Quizá deje su rabieta de niña caprichosa.

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POV Ana

De camino a SIP analizo todo lo sucedido, no entiendo esa reacción, el me debe muchas explicaciones, yo no soy ninguna niñita a la que hay que regañar, a la mierda esos tiempos cuando vivía con mama, el es mi novio y no tiene por que tratarme así por algo de lo que no estoy enterada. Quien demonios es ella? Fue alguna novia? De pronto caigo en la cuenta de que es una ex sumisa, es lo más lógico. Llego a SIP, me instruyen en lo que tengo que hacer y me asignan el escritorio.

-Buen día Ana.- es El señor Rodriguez, Se ve tan formal y guapo, basta Steele.

-Buenos días señor Rodríguez.- le digo formalmente.

-Oh no Ana, dime José, no creo ser tan mayor que tu.- dice sonriente.- Bueno empezamos con una café por favor Ana?-

-Si claro.- voy por el café.

Mi día transcurre tranquilo, el es muy amable, de vez en cuando me lanza miradas extrañas pero las ignoro. Christian me ha enviado mensajes que prefiero ignorar, con el tengo que marcar un límite, que sepa que yo también tengo derecho a molestarme.
Ya es hora de irme, todo estuvo tranquilo, quizá por ser primer día. Me despido de José y salgo, me despido de la recepcionista que es muy amable conmigo, al salir veo el Audi de Christian, Oh por favor. Lo ignoro y me dirijo al subterráneo en busca de mi auto, busco las llaves en mi bolso y me estremezco al escuchar esa voz que me hace temblar.

-Por cuanto tiempo más me vas a ignorar Anastasia?- esta molesto aún? Pues yo más.

-No lo hago.- le digo sin verlo a los ojos.

-Los mensajes? Verme ahi afuera? Eso es ignorar.- dice con sus manos metidas en sus bolsas del pantalón.

-Christian, no quiero discutir, no es el lugar.-

-Ven conmigo.- me dice con tono de súplica.

-Quiero ir al apartamento, no voy desde la semana pasada.- veo como su rostro cambia.

-No quieres estar conmigo?-

-No es eso...- veo frustrada a todos lados- Bien vamos.- se que es una inútil batalla tratar de convencerlo así que mejor voy con el.
Durante el camino ambos nos limitamos a decir nada, llegamos y esta la mesa puesta, Gail cocina y hay música suave de fondo. Tomo una ducha y salgo de nuevo a la cocina. El esta esperándome y me siento sin decir nada. Comemos en silencio. Al terminar el decide romper el hielo.

-Dime que es lo que te tiene tan molesta?- ja es en serio?

-Mmm pues veamos, me gritaste ayer por la noche sin razón alguna, por la visita de alguien que no conozco, me dejaste sola cuando lo que quería era estar contigo. No me das explicación alguna sobré por que te molesto tanto que no te haya contado, Quieres más?- el sonríe secamente y niega.

-Bien, hace un par de años tuve una sumisa, Leyla, tuvimos esa relación Amo-Sumisa por 5 meses, pero quiso más, yo nunca di MAS a NADIE Anastasia, así que termine el contrato.....- luego de explicarme quien es y el porque de su reacción siento miedo, y también se que es por ella que estuvo preocupado o aun lo esta al parecer, ella esta mal y puede andar por ahí armada. Comprendo el porque su preocupación.

-Que es lo MÁS que ella quería?-

-Flores y corazones, algo normal, algo que yo no estaba dispuesto a dar.-

-Y por que y....- no me deja terminar la pregunta y m planta un suave beso.

-Por que tu eres diferente, tu me provocas querer MÁS, tu nunca fuistes mi sumisa, eres mi redención Anastasia. Contigo soy otro.- por dios eso me hace tan feliz.

-Lo lamento.- le digo sentandome en su regazo, el me recibe gustozo y me abraza fuerte.

-Te Nesecito Ana, siempre conmigo a salvo y para eso Nesecito que dejes protegerte, nena eres todo para mi.- dice aspirando mi cabello.

-Haré lo que creas necesario, te amo.- le digo besándolo apasionadamente. Sus besos me vuelven loca hacen que me pierda. Nos separamos jadeantes.

-Tengo una sorpresa?-

-Si?- el asiente. Se levanta y me baja suavemente de su regazo, se aleja y vuelve con un enorme oso color gris, con un corazón en su pata delantera que tiene una C y en la otra una A. Es hermoso.

-Oh Christian es hermoso.! Gracias!!- digo abrazando al enorme oso y besando su nariz. Es tan suave.

-Me pondré celoso nena, no quiero arrepentirme de haberlo comprado.- dice sonriente.

-Hay para ti también- digo acercándome y besándolo deliciosamente.

-Que tal tu primer día de trabajo?-

-Bien, bastante tranquilo.-

-Tu jefe?- oh por dios!

-Muy respetuoso.- digo para terminar el tema. Asiente y nos quedamos viendo a los ojos, sabemos lo que pensamos, suelto al oso y me tiro sobre el, nos vamos a la habitación para amarnos mejor, a nuestra manera y vaya manera. Lo amo tanto, el es mi dios griego, mi Christian.