Christian Grey... Cambie todo por flores y corazones.

Capitulo 25

POV Christian

Ayer no pude dormir pensando en ella, Ana se marchó sin dejar que le explicara como funciona esto, porque fui tan estúpido? Ella no se merece alguien como yo, no se como pude pensar que ella me aceptaría, estoy jodido de mil maneras y ella es tan inocente. Voy a mi estudio y le hago llamadas a Ana, pero sólo me dirige al buzón, por dios Ana.
En minutos mi teléfono suena y mi corazón da un vuelvo pensando que es Ana pero es un número que desconozco:

Llamada

-Grey-

-Christian soy Kate-

-Hola Kate puedo ayudarte?-

-Ana esta contigo?- y en eso siento que la sangre abandona mi cuerpo.

-Estuvo conmigo anoche pero se marchó, Kate pensé que iría a su apartamento no quiso que la llevara.- digo nervioso.

-Christian Ana no volvió en toda la noche, he marcado a su teléfono pero sólo la contestadora.- dice Kate preocupada.- Paso algo entre ustedes? Alguna discusión?- si Kate supiera creo que me mata.

-No Kate todo esta bien. Tranquilízate buscare a Ana donde sea que este.-

-Bien Christian, si alguno de nosotros recibe noticias por favor hay que escribirnos ok.-

-Bien Kate.- y sin más cuelgo. Ana donde estas, que hice contigo? Por dios quiero que estés bien. Le pido a Welch que rastree el número pero me dice que estando apagado no puede hacer nada así que sólo resta esperar.

Al día siguiente:
Hoy es miércoles, me siento desesperado, No tengo noticias de Ana, no quiero ir a trabajar pero lo haré para desestresarme.
Así transcurre mi día, llego a casa, trato de dormir pero no puedo, Welch no tiene noticias pues el teléfono sigue apagado.

Ya es jueves y Ana esta desaparecida desde el martes en la noche, me siento impotente. Llego a la empresa.

-Andréa, no quiero que nadie me moleste.-

-Si señor- y sin más me dirijo a mi oficina, me encierro y tomo una copa de Bourbon, las horas pasan, y me sobresalta el sonido de mi teléfono es un mensaje:

"Christian, Ana me escribió y dice que esta en Portland, dice que esta bien y que pronto vuelve."

Kate Kavanagh

Salió de Seattle así sin más? Por dios santo que hice con esta niña? Se qué no quiere saber nada de mi, de ser así me hubiese escrito, pero lo haré yo, le escribiré pues yo no esperare más días:

"Dime porqué te fuistes? No me darás la oportunidad de explicarte? Quiero hablar contigo nena, donde estas? O tendré que usar mi tácticas en acoso? Dime algo por favor."

C.G

Enseguida me llega su respuesta y mis nervios me traicionan:

"Christian, eso es nuevo para mi, no soy quien para juzgarte a pesar de todo, solo que jamás espere algo tan oscuro en alguien como tu, sentí miedo y decidí alejarme. Sigue el curso tu vida que yo seguire la mia. El tiempo dirá si debemos hablar. Hasta pronto."

Ana Steele

Por muy duro que sea esto tendré que dejarte ir. No soy para ti, no te merezco, eres maravillosa, bella y única, te mereces a alguien como tu. Y sin más tomo mi desicion, me siento tan frustrado así que decido llamar a Elena, quiero descargar mi ira en alguien.

Llamada

-Querido que sorpresa-

-Al grano Elena, necesito algo pero ya, en mi apartamento.-

-Bien querido en una hora la tendrás allá.- y sin mas cuelgo y salgo de la oficina. -Andrea, me voy, dile a Ros que quede a cargo de la reunión con los franceses, y me envíe un reporte.-

-Muy bien señor- entro al ascensor, me siento muy enojado, por dios, que hace esta niña solo con ese mensaje me provoca, pero si eso quiere eso haré, olvidarme de ella aunque cueste.

Llego al escala a preparar todo, al menos con Elena me ahorro la firma de contratos y mis sumisas saben que hacer. Al cabo de un rato llega Nancy, es muy bonita, pero no como Ana, es blanca, cabello negro y ojos negros.

-Señor- dice cuando me ve.

-Arriba, segunda puerta- le digo sin verla. Llego al cuarto rojo y la veo arrodillada sólo en bragas.- sabes las palabras de seguridad?- pregunto.

-Si-

-Si que?-

-Si amo- y sin más la levanto y la pongo sobre una pequeña mesa, cojo un cinturón y comienzo a azotarla, descargo mi furia en ella, sólo escucho como ella cuenta y pienso en Ana, de no ser por esto ella estaría aquí.
Y en ese instante siento una punzada de asco, por dios que estoy haciendo, y sin más tiro el cinturón y ayudo a esta pobre chica.

-Toma, lo lamento, por favor vete- le tiendo su ropa, ella me mira y no dice nada, es buena pues sabe que no debe preguntar. Sin más se marcha. Yo me quedo en el cuarto rojo pensando en porque en ves de sentir liberación, control y poder aquí dentro sentí asco, sentí por primera vez que lo que hago esta mal. Que me pasa. Ana que me has hecho? Tomo todo lo que hay cerca de mi y lo lanzo, algunas cosas se quiebran, otras sola caen,
-Ana que me has hecho?- grito con fuerzas, siento una opresión en el pecho, que mierda es esto? Es algo inquietante, salgo de la habitación hacia el estudio y reviso el informe de Welch que no había querido ver, pues sentiría impulso de ir donde se encuentra Ana pero ahora es más que un impulso, quiero verla, quiero estar con ella, no como mi sumisa, no no no. Quiero a Ana conmigo como mi novia, mi mujer mi todo!! Necesito pensar, necesito saber que hacer, por primera vez siento que no tengo el control y no me gusta esta sensación.