Christian Grey... Cambie todo por flores y corazones.

Capitulo 27

POV Christian

Luego de mucho pensar decido ir al lugar donde Ana esta, no quiero atormentarla, sólo quiero saber que esta bien, iré sólo.

-Taylor, iré a Portland, si necesito algo te llamo.- le digo secamente.

-Señor- solo asiente y se retira. El camino se me hace eterno pero todo sea por Ana, ya no soporto más, quiero verla.

Estoy afuera del lugar que señala el reporte de Welch, es una cabaña, me pregunto quien vive ahí y porque Ana vino aquí, han pasado las horas y nada de Ana. Luego de un rato ahí esta, tan bella, tan inocente pero luce preocupada y eso me causa una punzada de arrepentimiento pues se que es por mi culpa. Se ve tan tranquila así que decido no molestarla aún y acompañarla en su viaje.

De camino a Seattle Ana conduce un poco rápido para mi gusto, guardare la distancia, pero no la perderé de vista. Oh Ana si tan sólo supieras que vengo tras de ti.
Al llegar a su casa ella baja, toma sus cosas del maletero y entra. Decido esperar un poco hasta que se instale. Espero... Espero.. Hasta qué no puedo más y decido tocar.

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Hoy es lunes, Ana empieza hoy como mi segunda asistente, espero poder controlarme, la deseo tanto. Pero tengo que darle tiempo.
Llamo a Andrea

-Señor Grey- contesta de inmediato.

-Andrea hoy llega Anastasia Steele, la practicante, ya sabes que hacer, lo que le toca y por favor asegúrate se sienta cómoda- con estas palabras creo que Andrea cayó de su silla.

-Entendido señor Grey-

-Y Andrea, recuérdale de mi café por las mañanas.-

-Muy bien señor- y sin más cuelgo.

Necesito ver a Ana por las mañanas, ella es mi refrescante. Estoy concentrado en unos papeles cuando mi teléfono suena:

Llamada

-Grey-

-Christian querido, donde has estado, he querido hablar contigo-

-Elena, he estado muy ocupado. De qué quieres hablar?-

-Nancy me contó que la azotaste y la hechaste, podrías explicarme que demonios pasa contigo?-

-Elena, no es momento para hablar de eso, además no es asunto tuyo. Ahora estoy muy ocupado. Haré espacio en mi agenda y hablaremos. Hasta entonces.- y sin más cuelgo, Elena a veces llega a ser tan insoportable.

Sigo revisando mis documentos cuando tocan a la puerta.

-Adelante- digo. Y veo que entra ella con su rostro angelical, usando una falda tubo hasta la rodilla, camisa color perla de mangas, la cadenita en su cuello, me alegra que la use, y tacones negros, es toda una visión y basta sólo su sonrisa para que mi mal humor provocado por Elena se vaya al diablo.

-Su café señor- me dice ella y esas palabras me estremecen.

-Muchas Gracias Señorita Steele, cuénteme ya Andrea la adjudico todas las tareas que debe desempeñar?- digo tratando de ser los más formal que pueda.

-Si, ha sido muy amable conmigo- más le vale.

-Alguna inquietud Anastasia?-

-Si Christian, Andrea me dijo que por
Ser la segunda asistente tendré que asistir a viajes contigo, yo no se exactamente las funciones.- dice con tono preocupado.

-Anastasia, la primera asistente es quien se encarga de eso, pero hice un cambio porque quiero que superes tus capacidades, confió en ti y se que lo harás bien, y quiero estar todo el tiempo a tu lado- le digo con mi sonrisa malévola.

-Lo sabía, sabía que era eso!- dice y se levanta de su silla.- Christian me dijiste que esperarías a que asimilara todo.-

-Y lo haré Ana, sabré guardar la compostura. Pero quiero que me acompañes porque solo estando conmigo estaré tranquilo. Créeme!- le
Digo siendo muy sincero.

-Esta bien Christian, gracias una vez más. Tengo que volver al trabajo.- dice con una sonrisa hermosa.

-Muy bien señorita Steele, nos vemos para almorzar.- y ella voltea sus ojos, seguro molesta pero no dice nada. Y sin más sale de mi oficina.
Me quedo con una sonrisa tan estúpida. Por dios Grey!!