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Después de cuatros maravillosos días encerrados en el hotel de Australia o saliendo por seperado a encontrarnos en un restaurante debido a la locura que generó la estancia de Justin en el país volvimos a Estados Unidos.
Han pasado varios días sin vernos, Justin está concentrado en los últimos arreglos del álbum y en fijar una fecha para lanzar su primer sencillo y yo estoy en las reuniones para firmar con la nueva línea de Balmain.
Ambos estamos emocionados por lo próximo que se viene en nuestras vidas laborales pero eso no quita nuestra unión sentimental, hablamos casi todas las noches por FaceTime, Justin llega a estar toda una noche en el estudio y yo paso todo el día en la agencia, por eso no hemos podido vernos, aún que esto nos está dando un poco de tiempo para pensar en nosotros y lo que queremos.
Eso me lleva a la conservación que tuvimos hace más de una hora.

-Tienes que venir al estudio algún día- murmura Justin enfocando su rostro desde un ángulo bajo.
¿Cómo es posible que se vea tan hermoso con la cámara frontal desde cualquier ángulo?
-Hails- me llama al ver que no respondo, me he quedado embobada mirando su rostro.
-Lo siento- respondo avergonzada quitando la cámara de mi rostro un segundo- ¿qué me decías?
-Que tienes que venir algún día al estudio- responde molesto por no tener la atención.
-Cuándo encuentre un tiempo que no emplee en dormir, ya que tu sólo vas por la noche, iré- respondo.
La verdad es que he puesto escusas de toda clase para no ir al estudio, tengo mucho miedo de escuchar las canciones, se que las escribió en el tiempo de bajada que tuvo su vida y eso quiere decir que la gran parte están escritas para Selena, y seamos sinceras, por muy masoquista que seamos ¿quién quiere escuchar lo que el hombre de tu vida se quedó sin decirle a su ex?
Exacto. Nadie.
-De todas formas lo escucharas algún día- responde mi subconciente.
Si, es cierto pero hasta entonces ya estaré preparada psicológicamente.
-Es como si no quisieras verme- responde Justin enfocando su ojo muy de cerca, cosa que me hace reír.
-Necesitas dormir, estas delirando- digo- yo siempre quiero verte.
-Necesito dormir contigo- responde herizandome a kilómetros sólo con una palabra.
-Te voy a estar esperando... toda la noche- murmuro con un intento fallido de voz seductora.
-Rhode- me llama la atención- no jueges con fuego.
-Bieber- lo llama alguien y él aparta la mirada de la pantalla dejándome una perfecta toma de su perfil- ven a coordinar estos sonidos- le dicen y se escucha una melodía de piano realmente hermosa.
-Te veo luego- me dice disculpandose.
-Sin problema, cariño- respondo y doy un beso a la cámara de mi teléfono.
Cierro el FaceTime y me levanto a la cocina a preparar algo de comer.

-Entonces me contó que Pia le gritó a Stassie y todo se salió de control- me cuenta Robert con voz de locutor de radio.
Wou, me quedo de piedra al escuchar eso.
Ayer fue un concierto de Telana, al que ni Robert ni yo pudimos ir y en el que hubo un conflicto con mis dos amigas.
Telana le narró con lujo de detalles a su novio, que ahora como el buen amigo que es me lo cuenta a mi.
-¿Pero por que le gritó?- pregunto pensando en que podría molestarle a Pia.
-No se- responde Robert molesto por no saber- Telana dijo que ella simplemente se fue y que Stassie no ha hablado con nadie.
-No creo que no haya hablado con nadie, todos sabemos quien debe de saber todo- murmuro.
-Kylie- susurra Robert con cierto misterio.
-Exacto.
Ella es su mejor amiga, seguramente debe de saberlo, pero Pia también es muy amiga de Kylie. Eso se va a poner interesante.
Robert sale de mi habitación después de desearme buenas noches, apago las luces, me meto en la cama y cierro los ojos intentando conciliar el sueño. Ojos maravillosamente marrones y tatuajes infinitos cruzan por mi cabeza impidiendolo.
Maldición, ni en sueños puedo estar sin verlo.
La puerta de mi habitación se abre y no tengo que girar a mirar quien es, su perfume colapsa toda la habitación.
¿Estoy ya soñando?
Escucho como se quita los zapatos, deja su abrigo sobre la silla de la entrada y camina hasta la cama.
Sonrio cuando lo siento tan real.
-¿Qué haces aquí?- susurro.
-Dijiste que me ibas a estar esperando- responde de la misma forma, su aliento a cigarro llega a mi.
-Y eso hago.
Siento su cuerpo arder en el mío cuando se tumba a mi lado y me rodea con sus brazos dejando suaves besos en mi espalda.
Esta es la mejor sensación del mundo.
-¿Cómo has entrado?- pregunto.
-Robert es un buen cómplice- susurra entre besos- sólo me pidió que no te haga gritar mucho.
Le doy un suave codazo avergonzada de lo que acaba de decir.
-Auu- se queja- lo digo en serio.
Y le creo, esas palabras sólo las puede decir Robert.
Giro para estar de frente y veo sus hermosos ojos bajo la tenue luz que se cuela por la ventana.
-Te extrañé- susurro tocando sus perfectas facciones, desde su frente hasta sus labios, formando su rostro.
-Y yo a ti- responde después de varios segundos- Scooter piensa que sigo en el estudio, tuve que cambiar de coche en tres estacionamientos distintos para que los paparazzis no me sigan pero tenía muchas ganas de verte- relata su travesía con la que derrite mi corazón tras cada palabra.
¿Justin es conciente de que es capaz de enamorar a cualquier persona?
-Obvio lo es, es Justin Bieber- responde mi subconciente.
-Gracias por venir- murmuro pegandome mas a su cuerpo, él me rodea con sus brazos y tengo acceso exclusivo a su cuello.
Huele a gloria, creo que cuando entras al paraíso hay alguien con el aroma de Justin.
Comienzo a dejar pequeños besos en su cuello que luego cambian a mordiscos y lo siento temblar a mi alrededor.
-Hailey- me dice- ya te he dicho que no jueges con fuego.
-Quizás. Me. Quiero. Quemar- respondo entre cada palabra un beso y termino con una mordida.
Justin se mueve tan rápido como una bala y pasa a colocarme debajo de su esbelto cuerpo, ahora soy una presa en sus brazos, sin escapatoria.
-Bueno- susurra inocentemente y lo siento como no lo sentía hace varios días, totalmente mío y yo, totalmente suya.

♡

Me despierto tras tener una pesadilla en la que moría quemada dentro de un edificio y al despertar entiendo el motivo, Justin duerme enrollado a mi cuerpo trasmitiendome todo su calor provocando que yo este sudando y a punto de asfixiarme.
Me deslizó por la cama hasta estar fuera de sus brazos y por suerte no se despierta, no se si tenga cosas que hacer hoy pero dejaré que duerma un poco más.
Entró al baño y me doy una larga ducha.
Al salir y mirarme en el espejo como lo hago habitualmente me encuentro con una sorpresa, Justin me a echo un chupeton en la cadera, lo voy a asesinar.
Salgo del baño con toda la rabia del mundo que desaparece cuando veo a mi ángel dormir tapándose el rostro con su brazo.
Es totalmente una belleza.
Me acerco y me siento a su lado.
-Buenos días- susurro besando su pecho.
-Muy buenos días- responde sonriendo.
-No se si tienes algo que hacer hoy- murmuro y él aparta el brazo de golpe.
-¿Y tu no vas a la agencia hoy?- pregunta.
-No, es domingo- respondo graciosa y él se calma.
-¿Y por que no nos vimos el domingo pasado?- pregunta.
-Porque tuviste grabación del video- le respondo asombrada de que no se acuerde.
Asiente restregando su rostro para espantar el sueño.
-¿Entonces no tienes nada que hacer hoy?- pregunto.
-No lo se- responde desbloqueando su teléfono para confirmar mi pregunta- aún que, no quiero hacer nada- dice lanzando el teléfono en la cama- bueno, algo si- añade abrazandome para besarme.

Después de una hora bajamos a desayunar.
-Pensé que jamás bajarían- nos dice Robert desde las escaleras.
Me sonrojo y me escondo detrás de Justin.
-Tengo que salir- dice corriendo hasta la sala- deje café echo- murmura cuando vuelve mirando su teléfono- buen provecho- concluye giñando un ojo.
-Bro- lo llama Justin antes de que salga y Robert voltea- hazme otro favor, llevate mi coche- le dice y a Robert se le ilumina los ojos.
-Dime que es el Bugatti- le pide cruzando los dedos exageradamente.
-El mismo- responde Justin y lanza las llaves que mi amigo agarra al vuelo- que te vean al salir, así piensan que no era yo- le pide y no amigo sale corriendo levantando un pulgar en respuesta.
Sonrió de lo manipulador que puede llegar a ser este chico y vamos a desayunar a la cocina.
-Johnny esta en la ciudad- me dice Justin caminando hasta el salón cuando terminamos de comer.
-Genial- respondo.
-Quiere salir hoy ¿te apuntas?
-Si.
Hace tiempo que no veía a Johnny y ya lo echaba de menos, será bueno volverlo a ver, incluso más con Justin.
-A todo esto- dice mirándome- me dijo que había hablado contigo cuando estabas en Cannes.
-Eh... si- respondo.
-¿Y de que hablaron?- pregunta mirándome expectante.
-De ti- bufo sin poder mentirle.
No le da tiempo a preguntar nada más, su teléfono suena y debe responder, desde donde estoy lo veo caminar hasta la puerta de salida al jardín, veo sus tatuajes que sobresalen de su camiseta a tiras y una vez más me siento afortunada de tener a ese hermoso hombre en mi vida.