126

5K 271 34
                                    

NARRA JUSTIN.

-¿Por qué debemos de irnos? ¿no podemos quedarnos a vivir aquí?- murmura Hailey mirando a sus espaldas, donde queda la casa en la cual hemos vivido estos últimos días.
Le sonrió con su bolso en mi mano derecha y con la izquierda sosteniendo su mano.
-Regresaremos cuando quieras- respondo besando su cabeza- ahora debemos irnos o el avión nos dejará.
-No me mientas, es tu avión, no puede dejarte- se queja haciendo que mi sonrisa se ensanche aún más.
-Me gustaría saber si alguna vez te quedas sin saber que decir.
-Cuando me miras a los ojos completamente desnudo en mitad de una playa desierta y comienzas a cantar- lanza dejándome frío.
Puedo ver en sus ojos que se transporta de forma rápida a los recuerdos de ayer.
-Ok...- respondo incómodo mirando a Erin y a papá que caminan un poco más adelante.
Suspiro cuando me doy cuenta de que no la han escuchado.
Disfruto recordar la excelente noche que tuvimos ayer pero es algo que debe de quedar sólo entre los dos.
-¿Ahora resulta que te da vergüenza esa clase de cosas?- me pregunta sonriendo.
No jueges conmigo, Baldwin.
-Con ella si- digo mirando a Erin para explicarle mi forma de actuar.
Niega sonriendo y suelta mi mano para adelantarse e ir corriendo a subir las escaleras que tenemos enfrente.
-Quédate ahí- le pido-estas perfecta para una foto.

-Quédate ahí- le pido-estas perfecta para una foto

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

-¿Oye, que es lo que perturba tu mente?- Maejor se sienta en el sillón de enfrente con una botella de cerveza en la mano.
-Gracias por traerme una- me quejo sin poder moverme.
Hailey duerme plácidamente sobre mis piernas.
-Toma, quijica- reprocha Maejor volviendo con otra cerveza.
-Gracias- sonrio hipócritamente pero sin nada de rencor.
-Bueno, responde a mi pregunta- insiste- estabas con la mirada perdida y la cabeza en otro lado cuando entré - eleva la voz.
-Si quieres que hable contigo baja la voz o la vas a despertar- le pido acariciando su suave cabello que cae entre mis piernas.
-Esta bien- susurra apoyándose sobre sus rodillas para estar más cerca.
-La verdad es que...- murmuro tocando mi frente.
Maejor me mira expectativo, es algo que me he estado callando por mucho tiempo y lo necesitaba a él para desahogarme.
-Tranquilo- me ayuda como sólo el sabe- solamente dilo.
-Maejor... adoro a está niña como no tienes idea- miro a Hailey feliz de tenerla entre mis brazos- y por primera vez estoy haciendo todo pacientemente para que nada se vaya de nuestras manos, no quiero herirla más de lo que ya lo hice en su momento, no quiero acabar con esto y que jamás volvamos a querer vernos... en realidad no quiero que esto termine jamás.
-¿Por qué hablas de un final?
Se acaba de poner en modo psicólogo.
-Porque es lo que siempre consigo, lo quiera o no, destruyo lo que amo y hago que termine.
Quien iba a decir que mis miedos serían revelados en un hotel de México con Hailey sobre mis piernas.
-Espera- le pido antes de que diga nada- necesito un cigarrillo y media botella de tequila.
Maejor sonríe negando y se levanta para volver a desaparecer del lugar.
-Más te vale que estés bien dormida pequeña- le hablo a Hailey- o esto nos llevará a otra de esas discusiones que tanto te gustan.
Mi amigo entra al rato con todo lo que mencioné en las manos.
-Ahora entiendo por que eres mi mejor amigo- lo molesto alcanzando un cigarrillo.
-Soy tu mejor amigo por que soy demasiado genial- dice riendo.
-Vamos a creer que es así.
Amo molestar a Maejor pero también lo amo a él, cuando lo conocí hace algunos años atrás jamás imaginé que nuestra amistad llegaría a tal punto, siempre fuimos los dos contra el mundo, incluso cuando llegó Za y Khalil. A pesar de que la amistad entre los cuatro era genial nosotros siempre tuvimos algo más sincero, más puro, más real.
Y hasta el día que me muera voy a estar eternamente agradecido con él.
-¿No prefieres llevarla a la cama?
-Lo estoy deseando- respondo con tono atrevido.
-Que idiota eres- se queja Maejor- me refiero para que ambos estén más cómodos.
-Estamos en nuestros lugares favoritos en el mundo- insisto- si la muevo se va a despertar y no nos dejará solos- explico mejor para que me entienda.
-Bueno, en respuesta a lo que dijiste antes, no creo que tengas razón, lo que pasa es que estas viviendo esta relación como si fuera la misma que tuviste con Selena- lo miro sorprendido- aún que me digas que no, ambos sabemos que es así.
-No creo que sea así- reclamo.
-Quizás me estas entendido mal- se explica- me refiero a que piensas que gracias al fracaso que tuviste con ella toda relación que tengas será igual.
-Te entendí y no estoy de acuerdo.
No, me niego a comparar a Hailey con Selena.
-¿Entonces que te hace pensar que esta relación también va a terminar en fracaso?
¿Me esta jugando la psicológica?
Me tomo mi tiempo para pensar y asi poder responder su pregunta, pero todo lo que se pasa por mi cabeza es para afirmar lo que acabo de negar.
-Bueno tienes razón- confirmo con toda la amargura del mundo, odio contradecirme- pero no sólo es eso- me defiendo- la distancia logra espantarme.
-No te sigo...
-Pues que lento- me burlo cortando el hielo- me refiero a todo lo que se viene este año...
-A ok- bufa entendiendo- hablas de la gira.
Justo después de mencionar esas palabras Hailey se remueve en mis piernas, balbucea algo que sólo tiene sentido para ella y se acurruca aún más cerca de mi.
Maejor la mira esperando que diga algo pero yo se que sigue profundamente dormida.
-Si...- mi amigo me hace callar aún mirando a mi chica.
Me río disfrutando del miedo reflejado en sus ojos.
-No va a despertarse- le digo.
-¿Cómo estás tan seguro?
-Paso todo el vuelo molestandome, debe de recuperar sus horas de sueño y hasta que eso pase seguira en coma.
Maejor asiente relajado.
-De todas formas no es algo que ella tenga prohibido escuchar- le recuerdo.
-Bueno si pero tu no te expresas de la misma forma cuando ella te esta escuchando.
¿En serio?
-En fin... si, me refiero a la gira, ella jamás va a querer dejar su vida para venir conmigo.
-¿Se lo has propuesto?
-¿Qué? ¡claro que no!- me altero- sería como ponerla entre la espada y la pared, como darle un ultimátum, como hacerla elegir entre su vida o yo.
-Ok, lo he entendido- Maejor se burla de mi- pero sigo sin entender tu miedo.
-La distancia es el peor enemigo de cualquier relación, bro.
Él asiente sirviendo la primera ronda de tequila.
Hasta que hace algo bien.
Nos bebemos los shots de golpe.
-No es enemigo de nadie cuando las personas lo saben llevar.
Él y sus consejos absurdos y de doble moral.
-¿No confías en ella?- me pregunta.
¿De que mierda habla?
-Claro que confio en ella- respondo segundos después.
-¿Entonces no confías en ti?
La pregunta me pilla por sorpresa, ¿qué debo responder a eso?
-Justin- Mike entra y aún que lo hace por sorpresa lo agradezco porque me da más tiempo de pensar en ello.
-Ya están sirviendo la mesa- nos avisa.
-¿Algo de nuevo fuera?- pregunto alarmado porque arruinen nuestro viaje.
-Hasta ahora nadie tiene idea de que estamos aqui- me tranquiliza.
Menos mal.
Maejor se levanta y sirve dos tragos más.
-¿Quieres uno?- le pregunta a Mike y el niega rápidamente saliendo del lugar.
-Piensa en lo que te pregunte y ya podrás responderme después- me dice Maejor después de terminar con nuestras bebidas y sale de la habitación dejándome a solas con ella.
La miro por varios minutos.
Ella es la clase de chica que me hace dudar sobre por qué alguien se quedaría conmigo. Su presencia convoca, eclipsa.
Y yo, supongo que soy parte del fondo oscuro que hace que ella resalte más.
Y pensar que ella no se cree nada de eso, no se da cuenta de lo especial que es, lo bonita que es, lo importante que hace sentir a las personas que a pesar de tenerlo todo sin ella no tienen nada.
-Cariño mío- susurro acariciando su delicado rostro- alguien debe de arreglar tus inseguridades y obviamente yo seré "ese" alguien.

-¡Mi amor!- grito desde el gran y alto balcón que tenemos en el hotel.
-¿Eemm?- emite saliendo del baño con el cepillo de dientes en la boca.
Sonrio al ver esa escena, es preciosa.
-Termina lo que estas haciendo y luego ven- digo observando su delgado y hermoso cuerpo.
Quien lo iba a decir.
Después de terminar mi relación con Selena ahoge mi dolor en las mujeres, para nadie es un secreto y siempre las buscaba perfectas físicamente, grandes senos o gran trasero, nunca las dos cosas y de repente vengo a perder la cabeza por una preciosa mujer que no es ninguna de las dos cosas, pero que es perfecta en todos los demás sentidos.
"Jamás encuentras el amor en algo que estas buscando" decía mi madre.
Mamá. Pattie.
Que feliz estaría de conocerla, estoy seguro de eso.
-¿En que piensas tanto?- sus pequeños brazos rodean mi cuerpo.
Me encantaría hablar de mis problemas con mi madre, de lo mucho que la extraño y del miedo que me da perderla por lo idiota que fui, pero no, es algo que al final debo de arreglar yo solito.
Disfruto de su cuerpo pegado al mío por un segundo mientras miro las olas que mueren en la orilla de la lejana playa.
-Pienso en la suerte que tuve de ir a tu cumpleaños.
Busca mi mirada desde mi espalda y cuando da con ella sonríe.
-La de la suerte fui yo- responde- ¿sabes cual fue mi deseo de cumpleaños ese día?
Ruedo los ojos sonriendo y me coloco de frente a ella.
-¿Vas a mentirme diciendo que tu deseo fui yo y asi enamorarme más?
-Para nada- niega con la cabeza haciendo que su cabello dorado baile sobre su espalda- mi deseo fue salir con Matthew.
En cuanto lo dice sale corriendo.
¡Baldwin!
Corro tras ella hasta que la agarro de la cintura y la lanzo en la cama.
-Retira lo dicho- le exijo dejándola inmóvil sobre mi cuerpo.
-Pero es la verdad- insiste entre risas.
-¿Te gustaba Espinosa?- pregunto algo irritado.
-Me gustaba lo celoso que te ponías de él- afirma riendo.
Vaya.
-Que cruel eres, Baldwin- le digo- lo utilizabas para darme celos.
-¡Yo nunca dije eso!- grita sin dejar de reir.
-Vaya que si- insisto bajandome de su cuerpo.
-¿No quieres saber que fue lo que en realidad pedí esa noche?- utiliza su voz seductora para echizarme.
-¿No vas a mentirme?
Niega aún tumbada en la cama.
-Pedí que tu arrogancia desapareciera- se rie pero se que habla en serio.
-Amabas mi arrogancia.
Ella niega pero puedo ver en sus ojos que miente.
-En realidad lo hice por ti- juego con ella- si era amable te habrías enamorado desde el primer momento.
Rueda los ojos y se levanta.
-Al final con arrogancia o no, te funcionó- admite.
Mi pequeña niña.
-Y no sabes lo feliz que soy de eso- respondo atrayendola a mi cuerpo- te tengo una propuesta- recuerdo.
-¿Indecente?
Esta chica siempre tiene con que sorprenderme.
Rio negando.
-Eres una ninfómana.
-Claro, como tu eres un ángel caído del cielo- dice irónicamente- ¿entonces cuál es la propuesta?- insiste.
-Escapate conmigo- le digo con una idea en mente.
-¿Esa no es una canción de Carly?
Asiento.
Es exactamente lo que quería que pensará.
-Y desde el día de hoy nuestra canción.

-Pero ya estamos en la otra punta del planeta

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

-Pero ya estamos en la otra punta del planeta.
-Pero podemos ir más lejos, mientras estés conmigo no vas a conocer de límites...
-¿Dónde iremos?
-No lo se, tu solamente vístete- digo dandole un rápido beso- ya se nos ocurrirá algo.

© 《Acostúmbrate It ©Where stories live. Discover now