Agradar

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Su record de puntualidad se vio afectado aquella mañana, por lo que entro a toda prisa ignorando los saludos a su paso, más de uno quedo desconcertado hasta que recordaron que ella es la reina del drama del lugar y que seguro su actitud tiene que ver con ello.

-Diez minutos tarde abogada Hwang. —Bora al ser su amiga, entro a la oficina sin pedir permiso— ¿Puedo saber a qué se debe su impuntualidad?

-Choco un camión e hizo bastante tráfico. —Y vaya que se le notaba el fastidio.

-La verdad que por algo soy tu amiga.

-Es la verdad, de no ser por eso hubiera llegado a tiempo, conduje como loca hasta que ese estúpido camión tuvo que chocar ¿No lo pudo hacer en otro horario?

-Claro, señor chofer ponga sus horarios de choque por la noche, cuando la abogada Hwang no pase. —A veces dudaba que Tiffany fuera la gran abogada que es.

-Exacto, para una vez que tengo una mañana cálida y se me hace tarde. —Se despojó de su abrigo colgándolo en el perchero cercano.

-¿Mañana cálida? —Bora más o menos se imaginó a lo que se refería.

-Jessi despertó traviesa y no podía rechazar algo así, luego me di cuenta de la hora y le grite.

-Pobre Jessica.

-¿Por qué no se pone así en la noche? Me quiere sabotear, mi propia esposa. —Y provoco que Bora rodara los ojos.

-Cambiemos de tema. ¿Qué tal las cosas con la baby Jessica? —Se tumbó en el sofá frente al escritorio ya que Tiffany tomo lugar en la silla de este.

-Apenas y le dirijo palabra.

-Joder Tiffany. ¿Por qué tomaste el lugar de tu esposa? —Se conocía la relación de Jessica con la baby Jessica.

-Porque esta vez de verdad estuvo mintiendo, yo siempre confiaba en ella hasta que se demostrara lo contrario, debió confiar en mí para decirme que dejaba la escuela de fotografía.

-Te hirió en tu interior glamuroso.

-Y estuvo lejos de nosotras para hacer nada. Además le percibo algo extraño por eso la tengo en la mira, así milimétrica con cada movimiento que haga.

-O que no haga. ¿Qué está haciendo estos días? —Habían pasado un par de días desde que se descubrió todo.

-Conociendo la ciudad, su hermana está encantada con ella, la lleva a todos lados y Jessica soltándoles dinero como si tuviera mucho, esa niña tendría que estar castiga por lo menos hasta que se case.

-Tú y tus exageraciones, tal vez Jessica lo hace por Mina, es adorable.

-Un encanto mi niña y si está muy feliz con su hermana, sabes por ella dejare mi actitud pesada con Eunbi, ya no hizo las cosas, ahora tengo que presionarla para que haga algo por su vida.

-Es perfecto y ya que estamos en actitudes positivas. —Se puso de pie dirigiéndose a la puerta— Hay un joven que tiene muchas ganas de verte, sé que te hará cabrear pero por lo menos dale una oportunidad y escúchalo.

-¿De que estas hablando?

-Es encantador, solo escúchalo, hazlo por mí.

-Bora. —Y la vio salir.

Tiffany se quedó confundida y empezó a sacar papeles para comenzar a trabajar, solo minutos después Bora regreso con un joven bien presentable, al cual le calculo la edad de sus hijas.

-Este chico dice que le diste clases y tiene algo que pedirte, los dejo.

-Abogada Hwang, es un gusto verla en su lugar de trabajo, en lo que se desempeña quiero decir. —Él estaba un poco nervioso.

My TurnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora