Tiffany ha despertado temprano cosa que le fue difícil, el síntoma de la fatiga por el embarazo es uno de tantos en ella. El objetivo de levantarse era hablar con SinB, lo que resulto imposible ya que esta ya había salido de casa al laboratorio.
Jessica se levantó tiempo después y al no encontrar a su esposa en cama empezó a buscarla. Finalmente la encontró en el comedor tomando el desayuno, algo bueno para su estado, cabe mencionar que la abogada lleva una dieta balanceada y benefactora para el embarazo.
-Eunbi se fue antes de que pudiera disculparme. —Esta culpable por los reproches que le hizo de Mina.
-Podrás hacerlo después.
-La he lastimado, no puedo con eso.
-No vayas a llorar que anoche fue suficiente, si la pasas triste por mucho tiempo lo resentirá el bebé.
-Le he estado dando días pésimos.
-Se cómo solucionar eso, ven conmigo a la cama.
-No quiero dormir, quiero pero no debo.
-No ha dormir. —La aborda por la espalda y la atrapa en sus brazos, luego empieza a dejarle besos en la mejilla.
-¿Cuándo veras a tus padres?
-Lo haría hoy pero no pienso dejarte sola mientras vienen los tuyos a reprocharte que estas embarazada, no voy a permitir que te hagan sentir mal.
-Puedo manejarlo. —Y la empuja para que pare de besarla.
-¿Qué pasa?
-Aquí no, vamos a la habitación. —Técnicamente acepta la propuesta anterior de Jessica a quien le provoca una amplia sonrisa.
Otras que han despertado alegres son Mina y Nayeon, lamentablemente la realidad se presenta con la intromisión de la enfermera. Nayeon da privacidad a Mina y espera fuera de la habitación, cuando puede entrar, la tensión aparece pero logra desaparecerla con su forma diva de ser.
Y todo parece ir bien hasta que el intruso cruza la puerta.
-Jae. —Saluda Mina con ánimo.
-Hola chicas. —Les devuelve para ambas y Nayeon hace un simple movimiento de mano.
La coreana está más que celosa ya que Mina lo llamo de una forma tierna, sin embargo, se obliga a permanecer con ellos y en una actitud positiva, no hará expresiones falsas ni comentarios negativos.
Ella no se dejara vencer por los celos.
-¿Volvieron a hacerse novias? —Pregunta de Jaejoong cuando apenas y toma asiento.
-¿Cómo lo sabes? —Mina está sorprendida.
-Es notorio, el amor no se puede ocultar. —Muestra su sonrisa— Es bueno que te permitas el amor, te hará bien, que ambas se estén dando otra oportunidad es positivo.
-¿Algún consejo? —Le pregunta Nayeon.
-Las segundas vueltas tienen futuro si el pasado es hablado, visto para no repetir los errores de este, platicar sobre en que no debe caerse en esta segunda oportunidad.
Las dos asienten y luego intercambian sonrisas entre ellas.
-Termine de armar los rompecabezas. —Mina cambia el tema de conversación.
-Habrá que traerte nuevos. —Mantiene su expresión animada y encantadora que reactiva la alarma en Nayeon.
-No sabía que te gustaran esas cosas pingüi.
-Ni yo.
-Supuse que le agradarían por eso de que le gustan los videojuegos. —Que conozca esa parte de Mina le disgusta a Nayeon— ¿Qué te gusta a ti?
