A pesar de su estado de arrepentimiento y culpabilidad, la abogada Hwang se las arregló para mantenerse fuerte y visitar a sus hijas, había que contarles el trágico final de Jinyoung y también tenía que ejercer su papel de madre y pasar el día con ellas ahora que no vivía en casa.
Mina convenció a su hermana para que salieran con Tiffany, algo no tan complicado considerando que SinB ya creía en su madre. Cuando el auto de la abogada llego fuera de la mansión, la menor fue la más rápida en salir.
-Gane. —El asiento de copiloto fue de Mina mientras SinB sin protesta subió atrás.
-Se ven muy lindas mis amores. —Fue lo primero que una apagada Tiffany les comento.
-Esto parece a como si ya estuvieran separadas y fuera nuestro día contigo. —SinB siendo letal en su primer comentario.
-No es así, es temporal en lo que Jessica despierta. —Afirmo Mina manteniendo la fe y abrochándose el cinturón de seguridad.
-Su madre me ha lastimado y no sé qué vaya a pasar. —Les compartió—Y cambiando de tema, Jinyoung se suicidó no debió soportar la presión, el pensar que iría diez años a la cárcel porque una abogada corrupta lo decidió. —Se sonrió no la clase de sonrisa feliz.
Las menores se quedaron en silencio, asombradas con la información recién conocida, Mina incluso experimento pesar por la muerte, el tipo de empatía natural en el ser humano, pronto encontró la expresión devastada en su madre.
-¿Te estas culpando? —Le cuestiono preocupada.
-¿La mochila de pingüino? —Cambio el tema viendo la mochila que su hija trae consigo— Vas a ver a tu novia.
-Mamá, no es tu culpa.
SinB observaba en tranquilidad a su madre, sin perder detalle.
-Soy una mala persona. —Dijo Tiffany y ocurrió lo que no quería, se rompió frente a sus hijas derramando lágrimas.
-El pego a Eunbi y dijo mentiras fuertes sobre ti que Jessica cree, por su culpa nuestra familia la está pasando mal. No digo que se lo merece, si tú moviste todo para que pagara más de lo que debía quizás este mal pero su suicidio no puede ser tu culpa, fue su decisión, una mala. —Mina odia ver a Tiffany llorar, quería hacerla sentir mejor.
-Es inútil lo que digas, no ayuda. —Menciono SinB.
-Denme un segundo. —Tiffany se obligó a parar sus lágrimas.
En esos segundos Mina maldijo en sus adentros a Jessica que debería estar ahí para su madre.
-Perdonen. ¿Qué es lo que quieren hacer hoy?
-Para empezar ir a desayunar, Jessica no se levantó y tampoco llamo al servicio. —Respondió SinB.
-Decidimos esperarte para desayunar juntas. —Agrego Mina entendiendo que el tema de Jinyoung no debía comentarse.
Durante el desayuno se omito por completo cualquier mención relacionada, hasta la pregunta sobre cómo estaban las cosas con Jessica. Tiffany aparento estar normal, sin que sus hijas lo creyeran, es que apenas y hablaba y sus sonrisas eran diferentes a las de siempre.
Se entendía que en los adentros de la abogada giraban un montón de ideas y que el remordimiento la seguía consumiendo. Aunque estuviera por desmoronarse su matrimonio, todavía podría compartir con sus hijas como esa mañana, algo que los padres de Jinyoung nunca más, son esa clase de ideas las que le perforan el alma.
Luego de desayunar, SinB que aún no se curaban por completo sus hematomas, prefirió dejar la visita de su madre ahí por lo que Tiffany la devolvería a casa, Mina tomaría su camino por verse con Nayeon así que empezó a despedirse de su mamá.
