Desgracia

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Su ser lo necesita, que la espera por conocer la información la está matando y puede que ni siquiera la consiga si continua esperando por ella, o puede que Mina no le permita enterarse, por eso, Nayeon, acude a Sana.

¿Por qué peleo con SinB? Es momento de que la diva lo descifre.

-Sana, sanita ¿Qué le pegaste a mi cuñadita? —Hace una pausa dramática acompañada de las expresiones que sólo ella sabe hacer— ¡Ay no! Se me están pasando tus frases que riman, que no son nada buenas como las de Chae o Dubu.

Sana esta seria. —¿SinB les contó?

-Que va, fue Jessica que dijo que golpeaste a su princesa, no lo dijo tan literal. Mi suegris le pidió a mi pingüi que le preguntara a su hermana al respecto, ya que SinB no le contó mucho.

-Ya veo. —Aún no está tranquila con el tema, sigue pensando mucho en ello— ¿Qué le dijo SinB a Mina?

-Algo como que fue un malentendido y que no está enojada contigo por el golpe, por si te interesa saber.

-Si fue un malentendido de mi parte.

-¿Por qué razón?

-Ya no tiene importancia.

-Por favor Sana, tú no eres una chica agresiva o que pierda la cordura con facilidad, tu nivel de tolerancia ante las situaciones es muy alto. —Muy pocas veces la ha visto enfadada— ¿Qué te hizo SinB? Suéltalo, desahógate.

-Ella nada, realmente nada, no a mí. Escucha golpearla fue una estupidez, no quiero hablar de ello.

-SinB se la pasa atacándome verbalmente ahora que vivo en su casa, no dudo que pueda molestarte también. —Comienza a abrir su propio conflicto.

-Lo hace por celos de hermana.

-Pues va muy lejos, una vez ya me abofeteo, me agredió antes y me dejo sin respirar unos minutos. —Se sincera en parte.

-¿Qué le hiciste?

-Nada.

-Deberías decírselo a su mamá, Tiffany la pondría en su lugar.

-Claro. —Lo dice de forma sarcástica— Cuéntame lo que te hizo ¿Cuál fue el maldito mal entendido?

-Mina estará enojada conmigo, es mejor que hoy no la vaya a visitar, capaz que me devuelve el golpe que le puse a SinB.

-No te alcanza. —La ve confundirse, no entendió su humor negro— Silla de ruedas.

-Oh, eres una conejita muy mala, este shiba te va a castigar. —A pesar de estar no muy bien, su esencia adorable persiste.

-Sana tu estas escondiendo la verdad.

-No es eso. —Baja sus mirada unos segundos para luego levantarla y darle respuestas— Me entere que molestaba a Momo cuando trabajaron en el laboratorio de mi mamá, por eso fui a pegarle.

-Pero si tú ya no sales con Momo. —Y esa frase duele.

-Entiendes ya lo patético que es, además resulto que SinB no la molestaba, y me entere que Momo hablaba con los demás empleados sobre como tenia sexo conmigo. —Forma una expresión desagradable.

-¿Qué?

-Me tengo que ir ya, tengo mucho que hacer y no quiero pensar en que quede como estúpida por alguien como Momo.

-No creo que fuera capaz de hacer algo así. —Se gana una mirada que la hace recapacitar— Quizás un poco.

-Adiós conejita.

My TurnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora