Un nuevo auto para Eunbi y de una marca lujosa, sea cual sea el modelo será costoso pero logro convencer a Jessica de comprárselo y no parece haber marcha atrás.
A salvedad que Tiffany haga algo al respecto, la que luego de escuchar la petición por parte de Jessica está en desacuerdo.
-Como un demonio, debiste mantenerte firme y negárselo.
-Ponte en su lugar, también es nuestra hija y todo ha sido sobre su hermana las semanas pasadas.
-Entiendo que este celosa y quiera que le compremos algo, pero pide un auto de tal marca, del que su precio no se compara a lo que invertimos con Mina. ¿Te detuviste a pensar en ello? —Es evidente que Jessica no pensó en ello— No tiene congruencia que pida al algo desorbitante solo porque le permitirnos a la hermana vivir sola.
-Tenías que verla, cree que solo tenemos dinero para Mina y eso parece. ¿Qué le hemos dado en los últimos tiempos a SinB? Nuestra hija se merece ese auto.
-¿Cómo mierda piensas comprarlo? —La actitud de su esposa la está desesperando— Por si lo olvidas ya no puedes disponer de tus ahorros, ese dinero es parte de la inversión para el hospital, si lo tomas te meterás en muchos problemas.
-Lo repondré. —En serio considero hacer justo lo que Tiffany ha dicho.
-Jessica no porque seas la que va a quedar al frente del hospital puedes tomar el maldito dinero a tu antojo aún si lo repones después. Es delito y puedes ser acusada de abuso de confianza.
-Nuestros amigos no me acusarían a menos que tú lo hagas.
-Nuestros amigos separaran la amistad de los negocios y claro que te acusaran, eso nos llevara a perder su amistad además de los problemas legales y de perder tu sueño del hospital, por el estúpido capricho tuyo y de SinB.
-Creí que la adorabas y estarías dispuesta a
-¿Comprarle algo estúpidamente innecesario cuando no tenemos dinero para mal gastar? Que se deje el auto que le dio Dongay.
-Dongay, Donghae está fuera de esto. Eunbi le pedirá el auto a Krystal o los abuelos, y supongo que se refería a mis padres.
-¿Te amenazo con eso? —Comenzaba a ver por dónde va la cosa.
-Sí, aunque espero que vaya y se lo pida a tus padres, para que te busquen y te den la charla de que tienes una esposa buena para nada, que si estuvieras casada con un hombre jamás pasarías estas carencias. —Es muy probable que de verdad suceda.
-Oh, no vamos a comenzar los chantajes que solo funcionan contigo. —Aquello ofendió a la doctora Jung y lo demostró en su expresión facial— Amor, Eunbi te convenció por medio del chantaje. Déjame hablar con ella y veras que la cosa cambia.
-Tú eres demasiado mala y se acabó. Me encargare, si te conté es para tenerte al tanto que le comprare auto nuevo, no para que vayas y la convenzas de que ya no lo quiera. —Hablo con voz imponente.
-Por última vez no puedes usar el dinero del hospital.
-Lo conseguiré de otra manera.
-¿De qué manera?
-¡Me voy a vender! —Soltó lo primero que se le vino a la mente y Tiffany frunció el ceño— ¿Me quieres comprar? Te hago un descuento.
-Típico de ti la de sacar estupideces a mitad de una discusión.
-Y típico de ti querer imponerte siempre, tu voluntad toda tu vida. —Se le queda mirando fijamente y Tiffany le mantiene mirada, no es la guerra entre la mirada helada y la de fuego porque enojadas no están, no han llegado a ese nivel, simplemente es un desacuerdo.
