Por accidente | Enzo Perez

0001

Juana

Desde que me desperté, la suerte no estuvo de mi lado, así que, estaba segura de que hoy no sería un buen día. El despertador me sonó media hora tarde, perdí mis apuntos, se me rompió la mochila y, como si eso fuera poco, no había ni luz, ni agua en el edificio. Si, esa es mi suerte.

Antes de salir, pegué un grito de frustración y con mis pocos apuntes en mano, al igual que la mochila, las llaves y el celular, fui hasta el estacionamiento a buscar mi auto para irme lo más rapido posible a la facultad y no llegar tan tarde.

—La puta madre, esto solamente me pasa a mi —tenía la goma del auto pinchada, por lo que tendría que cambiarla.

En el baul, busqué la rueda de repuesto y cuando caminé hasta la parte delantera del auto para cambiarla ME TROPECÉ Y ME CAÍ DOBLANDOME TODO EL PIE. Si no me dolería tanto y no me hubiera caído por eso, probablemente me estaría riendo de mi misma por tener tanta mala suerte. Pero ahora, no había lugar para eso.

—Nena, ¿estás bien? —escuché una voz. ¿Nena? Si había algo que me molestaba demasiado era que me llamaran "nena", "chiquita", "flaca". No sé por qué pero lo odiaba. Tenía nombre y era bastante lindo como para que me llamen así. Y aunque es posible que algunos no lo supieran, no es necesario ponerme esos apodos.

—Nena no, me llamo Juana —dije aún en el piso. Escuché a esa persona reírse, sin verlo.

—¿Te ayudo? —miré para arriba y ahí estaba Enzo Perez mirandome con una ceja levantada y una media sonrisa en sus labios.

—Bueno, no sé como porque no me puedo ni mover, viste —viré los ojos.

No sé en que momento pero de repente estaba a "upa" de el y no sé donde me estaba llevando.

—Epa, ¿qué estamos haciendo?

—Te pienso llevar a un hospital, debes tener algun esguince o peor con ese golpe que te diste.

—¿No me tendría que doler más?

—A veces, al principio no duele tanto y te empieza a doler después, en frio.

Finalmente llegamos a lo que, supongo, era su auto y el, después de haberlo rodeado, empezó a manejar hasta una clínica o hospital, ni idea.

—¿Un mal día? —me preguntó en el camino.

—¿Se nota? —lo miré.

—Y...más o menos —rió—. Te vi pasar con todas las hojas y la mochila rota y encima me enteré que no hay ni agua ni luz, así que me imagino que no es el día más espectacular.

—¿Sos nuevo en el edificio?

—Si, me mudé recién hoy. Bah todavía no, recién vine a hablar con el encargado y a la tarde hago la mudanza —explicó.

Asentí y hablé:—¿Falta poco? Porque me esta empezando a doler.

—Ya llegamos.

Quien diría que ibamos a conocernos de esta manera: por mi "accidente", después de un pésimo comienzo del día. No sé si será la mejor manera, pero la más rara seguro que si.

• ♡ •

pregunta importante: les gustaría que narren los dos (intercalando) o solamente exista el punto de vista de ella?