𝐃𝐢𝐥𝐞𝐦𝐚𝐬 𝐃𝐞 𝐔𝐧 𝐁𝐞𝐭𝐚 ×𝐕𝐊𝐨𝐨𝐤𝐌𝐢𝐧×

Dilema 6

Cuando Jungkook despierta siente algo húmedo recorriendo su cuello, se asusta al ser consciente de que Jimin regresaba a ser el Omega necesitado en su semana de celo. Abre los ojos con cuidado, moviendo lentamente sus manos hasta encontrar cada una a los costados de la cadera de Jimin. Tomarlo de ahí solo provoca que un suave gemido escape de entre sus labios, demostrándole a Jungkook lo nublada que tenía la mente por su lobo.

─Buenos días, bebé, deja que te coloque en una posición más cómoda ¿sí?─ utilizando tiernas caricias termina haciendo que el Omega ceda a su petición, dejándolo acostado con la espalda sobre el colchón─. Iré por medicina rápido, no tardo.

El Beta sabía muy bien que debía correr, no tardando ni 5 segundos en encontrarse fuera de la habitación. Ni siquiera sabía qué hora era, pero por la oscuridad de la casa suponía que ya se encontraban bien entrados en la madrugada.

─¿Taehyung?─ pregunta cuando se asoma por la sala y ve la luz de la cocina encendida. La cabeza del Alfa no tarda en asomarse para preguntarle qué sucede─. Jimin despertó, necesito darle supresores y que salgas de la casa unos minutos.

─No será necesario─ contesta Taehyung mientras ingresa de nuevo a la cocina con Jungkook siguiéndole como un pollito. Entonces puede notar la gran cantidad de frascos que se encuentran repartidos sobre la mesa─. Compré supresores especiales para los Alfas, así que no podré oler absolutamente nada durante las próximas 6 horas, eso dejará a mi lobo tranquilo para estar en casa.

Jungkook lo ve con verdadera sorpresa grabada en su expresión, pero luego señala los frascos, no reconociendo ni uno solo de los ingredientes.

─Ah, son para hacerle té a Jimin, Karrel dijo que lo calman bastante durante el celo─ el Alfa le pide con un gesto el que tenía la tapa pintada de rosa─. También dijo que este es el favorito de su lobo por el olor.

─¿Me explicarás qué debemos hacer por un Omega en celo?

El suspiro que Taehyung suelta es totalmente dramático y exagerado, pero Jungkook decide dejarle pasar que quisiera comportarse como una diva en ese momento. Igual, le gustaba mucho la forma en la que el cuerpo del Alfa se movía cuando hacía cualquier escena dramática como esa.

─Kookie, cariño mío, lamento decirte esto pero ¿no tienes que ir a trabajar mañana?─ con esa simple pregunta los ánimos se le vienen abajo al Beta.

¿Qué demonios se supone que harían? Jimin no podía quedarse solo en las horas que él trabajaba.

─Pedí la semana libre para cuidar de mi Omega─ suelta con voz burlona, pero eso únicamente hace que el corazón de Jungkook se congele antes de una punzada aguda de dolor─. Yo puedo quedarme mientras tú trabajas, no será gran cosa siempre que me tome las pastillas a sus horas. Además, Yoongi me ayudó para mentirle a mi jefe.

─¿Por qué lo llamas tu Omega?─ pregunta el Beta, sin saber que sus ojos derretían completamente al pobre Alfa que solo quería darle un sentido irónico al asunto.

─Es broma, bebé, no te pongas celoso─ regresa a bromear. Taehyung era consciente de que, por más que deseara que Jungkook solo tuviese ojos para él, el Beta había sido criado y programado con la idea de que los Betas solo debían ser pareja de otro Beta.

Cuánto les molestaba esa idea, lo malo era que nunca discutían ese tipo de cuestiones.

─No estoy celoso, Alfa estúpido─ Jungkook le da un golpe en el hombro para desviar su atención y ocultar el ligero sonrojo que ahora cubría sus mejillas─. Solo dame lo que sea que necesite Jimin en este momento.

Taehyung le muestra su característica sonrisa cuadrada mientras su cabeza se agita a los lados, negando tiernamente a los ojos de Jungkook.

─Vete a dormir, yo veré que Jimin se calme y se entretenga con algo.

─Tae…

─No empieces a discutir, deja de desvelarte, mañana debes ir a trabajar─ el Alfa da unas cuantas vueltas alrededor de la cocina para tomar lo que necesita: una caja de supresores y una taza con agua caliente en la que prepara un té para el Omega.

Como en un cuadro de pesadilla, Jungkook siente que su mundo se inclina hacia la izquierda mientras sus oídos se tapan. Se queda rígido en el lugar, notando cuán perfecta quedaría esa misma escena en alguna película o libro romántico, viendo la forma en que Taehyung se encuentra cuidando de la salud del Omega al que había llamado suyo. Ni siquiera le importa si se trataba de una broma o no.

Creía que en cualquier momento era capaz de entrar en pánico, de no ser por la próxima acción del Alfa que, pasando a su lado, le deja un beso en la cabeza.

─Ve a dormir, Kook─ pide en un susurro.
Pero el muchacho no se mueve mientras el Alfa hace su camino hasta la habitación donde se encuentra el Omega. Los segundos pasan de forma tranquila, Jungkook ni siquiera sabe cómo consiguió que sus pies se moviesen hasta llevarlo a su habitación.
En completo silencio cepilló sus dientes y lavó su rostro antes de colocarse un pijama para entrar a su cama.

Si antes estaba totalmente desconsolado por la idea del Alfa siendo compañero del precioso Omega que se encontraban cuidando, ahora simplemente se sentía confundido con sus sentimientos. Las voces de sus padres regresaban a resonar en su cabeza, no le daban tregua, solo le recordaban que su lugar no se encontraba al lado de ninguno de los dos chicos que se encontraban bajo su mismo techo.
Tal vez, incluso, sería mejor que Alfa y Omega se unieran para que Jungkook pudiera dejarlos en paz.

Cierra los ojos con fuerza, obligándose a dejar la mente totalmente vacía, sacando los recuerdos de sus padres, cerrando la puerta de sus pensamientos en la cara de Taehyung, pero es entonces que nota como su imaginación le juega la vuelta, dejándolo encerrado en un pequeño cuarto con la imagen de un bonito Omega de cabello rosado sonriéndole con los ojos cerrados adorablemente.

En el momento en que suena su alarma Jungkook se sienta rápidamente sobre su cama asustado, creyendo no haber dormido absolutamente nada, pero notando que el cambio de luz era demasiado brusco como para tratarse de que en verdad se hubiese desvelado. Sí había dormido las horas que le restaban antes de irse al trabajo, su problema era que únicamente había soñado con el rostro de una sola persona.

─Ah, Jungkook, apaga tu jodida alarma. Casi me quedo dormido─ la voz de Taehyung lo asusta, por lo que gira para encontrarse al Alfa sin camisa acostado a su lado─. Jimin acaba de quedarse dormido, no lo despiertes.

─Buenos días a ti también, idiota─ lo saluda el Beta mientras toma su teléfono para descartar la alarma─. ¿Tan mal te fue cuidándolo?

─No, se calmó mucho con el té y los supresores, pero está en su etapa indefensa ¡deberías verlo! Es como tener un bebé, quitando la parte de su desesperado deseo por quedar marcado y embarazado.
Jungkook se levanta para comenzar a buscar la ropa que se pondría ese día mientras escucha hablar a Taehyung sobre lo difícil que era mantener a un Omega tranquilo en esa primera fase.

─Karrel dijo que Jimin podría hablar hasta mañana, así que debemos tener cuidado con todo lo que él necesite.

─Cierto, pásame la lista para saber qué hacer cuando sea mi turno de cuidarlo.

─Te voy a pasar también el número de Karrel, dijo que quería fotos de su hijo y que vendría a verlo en cada momento libre que tenga─ en ese momento Jungkook abre la puerta para salir del cuarto y dirigirse al baño.

En un corto periodo de 10 minutos Jungkook ya se encontraba bañado y cambiado, tomando el desayuno antes de partir a su puesto de trabajo. Estaba a punto de salir del departamento cuando escucha leves golpes a la puerta del cuarto de Taehyung.

Con sigilo regresa sobre sus pasos para ir a ver qué podría estar ocurriéndole al Omega que se suponía debía estar dormido.

Al abrir la puerta se encuentra a Jimin vestido en un bonito camisón celeste sentado sobre el suelo, un puchero adornando sus carnosos labios. El Omega se apresura a estirar los brazos cuando ve a Jungkook frente a él, por lo que el Beta lo carga dejando que Jimin rodee su cintura con sus piernas para llevarlo de regreso a la cama.

─¿No estabas dormido, pequeño?─ le pregunta con voz suave.

En ese instante el Omega le sonríe justo como recuerda en su sueño y con toda la tranquilidad del mundo se deja acomodar sobre la cama.

─Bien, llamaré a Taehyung para que te cuide, yo iré a trabajar pero no tardo en venir ¿de acuerdo?─ Jungkook estaba a punto de levantarse de la cama cuando la pequeña mano del Omega toma una de las suyas, halándolo hacia él─. ¿Qué quieres?
Con un poco de esfuerzo, Jimin consigue sentarse en la cama sin soltar al Beta, estando lo suficientemente cerca para darle un beso en la mejilla y acariciar el cuello del Beta con ambas manos, deslizándolas hacia al pecho. Luciendo satisfecho con su trabajo, Jimin suelta su mano para dejarlo ir mientras la sonrisa no se borra de su rostro.

Demonios, su corazón estaba latiendo demasiado rápido ¿no era eso taquicardia?

─Adiós, Jimin─ se despide corriendo el Beta, que simplemente cierra esa puerta para ir a golpear la de su cuarto y despertar a Taehyung antes de irse corriendo hasta la empresa donde trabajaba.

Es hasta que se encuentra en el lugar de trabajo que comienzan a surgirle problemas con que todos sus compañeros de oficina lo observan con una mirada extraña. ¿Ahora qué ocurría? No tenía el valor de ir a preguntar, por lo que optó por ignorar la sorpresa en el rostro de todas las personas a las que se acercaba hasta que su mismo jefe esclareció sus dudas.

─Jeon─ le llama el Alfa que dirigía en su sector─ ¿estás saliendo con un Omega?

Muchas de sus dudas e inseguridades se borraron en ese segundo.