Destroyed || KookMin

5.6 Nuevo

Acaba el primero. Son las diez de la noche. Jimin ve su piel enrojecida y adormecida. El dolor despierta el cuerpo. Jungkook tiene un agarre fuerte; respira lento y se muerde los labios para no temblar el pulso. Juega un poco y con cuidado con su dedo índice y corazón donde está escrito el simple mensaje.

Jungkook acaba la segunda mano a las doce y cuarenta de la noche. Se limpia el sudor de la frente con una toalla y busca plástico para envolver. Jimin ve los diseños en tinta negra. No coinciden en estilo y no le importa. Quién sabe, quizá Namjoon fuese el primero en percatarse que significan. Y luego lo regañaría como si tuviera cinco años.

Nunca se visualizó a sí mismo con tatuajes, no obstante, esta situación tampoco la hubiera imaginado ni por error. Jungkook se percata de lo satisfecho y realizado que luce. Incluso es como tener a una persona totalmente distinta en frente.

—Debes esperar una semana para quitarte esto. Sino puede dañarse, irritarte la piel, un montón de cosas que no creo que quieras. —explica envolviendo las áreas tatuadas.

—Vale.

—Y ¿Qué significan exactamente? Es divertido enterarse de lo que pasa por la mente de la gente al terminar sus tatuajes. —murmura Jungkook, espera que responda y no lo deje hablando solo como casi siempre.

—Uno explica al otro ¿No te parece? —Jungkook relee los que escribió—. Don't be like a Prey... (Be) smoth like a like a snake... Be strong, be brave...

—Sí, supongo que si se explican.

En la mano derecha, donde está la quemadura en su palma tiene un ciervo de astas grandes y un pequeño diseño de plumas. En el dedo índice "Be kind" y en el corazón "Be brave". Mientras en la izquierda tiene una serpiente; anular "Don't be like a Prey" y en el medio "(Be) smoth like a like a snake". Acaricia sobre el plástico la serpiente.

Tiene un mal presentimiento de eso.

—Gracias, apenas esté en mi casa te pagaré. —Asegura.

—No hace falta. Es un favor—responde rápidamente. Hay un momento de incomodidad por quedarse viendo—. Creo que... Luces muy bien, en serio, eres muy lindo. —Una sonrisa tímida emerge de los labios del peli gris.

—Tú eres guapo y una masa de músculos. Buenas noches. —Despide y va a su habitación. Jungkook mientras guarda todo lo que usó sigue en las nubes. Aún tiene dos semanas enteras -por el momento-, puede sacarlo del pueblo con el tapabocas y suéter, nadie se daría cuenta de que es él.

Podría ayudarlo a sonreír más. Jimin es una persona que debería estar sonriendo, es demasiado tierno como para dejarlo tan... tan...

—Destruido sería la palabra ¿No? —susurra y apaga la luz de la cocina.

~ * * * ~

Cierra el paraguas y se revuelve un poco el cabello. El clima como siempre es una mierda y su humor también es una reverenda mierda. Se persigna al momento de entrar a la iglesia. Se limpia los pantalones negros y al andar lo suficiente se percata de que hay alguien ahí. No lo reconoce de espaldas; nadie que conozca que venga a la misa tiene el pelo así de gris.

Se nota que es tinte por el tono, no son canas—Si no me encuentro aquí y está cerrado no se puede—. Interrumpe su propio sermón cuando la persona se gira. Su cara se vuelve totalmente neutra por identificarlo. De a zancadas logra alcanzarlo y finalmente abrazarlo por fuerza.

—Pensé que te habían matado o te tenían... en algún lado—Se aparta, Jimin hace que lo suelte con sutileza. Un gesto suave que apenas nota el párroco—. ¿Dónde estabas? ¿Qué...? ¿¡Y esos tatuajes!? —El estilo se le hace familiar a pesar de ser distintos. Jimin muestra un poco sus manos, Yoongi ve la marca de quemadura de cigarro.

—Es algo que necesitaba. Vine para decirte que estoy... bien. Estoy quedándome con alguien más.

— ¿Quién? ¿Por qué no viniste aquí directamente? Yo-

—Este sitio es muy cerca—dice en un susurro—. S-se supone que estoy muerto ¿Sí? Me fui con una mujer que decía conocerte; te llamaba por tu nombre y pensé que era verdad. También es posible que sacaran a Daesung... Si me ven aquí me van a matar de verdad. No me puedo quedar.

—En... entiendo, pero... ¿Qué vas a hacer?

—Vendrán a buscarme en dos semanas. Hasta ese momento, sigo muerto—relata—. No le digas a nadie ¿Sí?

—Tranquilo. no lo haría.

—Tu... ¿Aquí viene un hombre llamado Valko? Es gordo, un tanto calvo...

—Es de los que siempre viene ¿Por qué? —Jimin niega con la cabeza y sonríe. Mira arriba y baja lentamente la cabeza.

Yoongi sufre un terrible escalofrío por la imagen. Jimin está distinto. Por decir un eufemismo. No mueve un solo musculo cuando empezó a alejarse con relativamente lentitud. Su andar elegante, muy decidido siendo todo lo contrario a lo que esperaría de él en una situación así.

Si está "muerto" es porque algo muy grave pasó. Si ya contactó con sus amigos es porque ya tiene cómo volver, no obstante, parece que tener algo en mente y Yoongi se siente intimidado por eso. Se acerca a donde estaba y se topa con una biblia. Abre en la página marcada; lee lo que dice hasta que el color amarillo de resaltador llama su atención.

— ¡HEY! ¡JIMIN! —Corre por la salida que usó el otro. Lastimosamente ya no estaba nadie a la vista—. Mierda...—apretó los dientes. Miró de nuevo.

«Mía es la venganza y la retribución (...)»

—Que rayos... piensa que puede hacer. —se dice entre dientes.

Ya mucho más lejos permanece con la capucha sobre la cabeza. Afortunadamente no está lloviendo. Se detiene en una parada de autobús y pudo ver a Jiyong entrar a un café. Su cabello rojo chillón corto por los lados. Se relame el labio y sonríe ladino.

—Empecemos con mi lindo exnovio. —Da una risita cruel poniéndose guantes con cuidado para no levantar el plástico.

Ellos jugaron primero. Ahora es turno y va a arremeter con toda su fuerza.

No va a quedarse así.