CAPÍTULO 25: ERROR

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Una vez que algunas cosas comenzaron y progresaron, ya no fue posible volver al principio.

La desaparición de Xiao Yi solo pareció señalar el preludio de la ruina, levantando siniestramente las cortinas para mostrar un macabro juego de la muerte. Zeng Ruguo y Zhong Chengjian habían muerto trágicamente en solo dos cortos días; sin embargo, la hoz de la muerte nunca cesó. Al día siguiente de la resurrección de la mujer, apareció una cuarta víctima.

Excepto que no era uno de ellos el que había muerto. Fue uno de los trillizos, Xiao Shi.

Esta vez, Xu Xiaocheng fue el primero en descubrir el cadáver de Xiao Shi. Tan pronto como entró al baño, gritó y salió disparada instantáneamente, gritando histéricamente: "¡Otra persona murió! ¡¡¡Otra persona murió !!! "

"¿Quien murió?" preguntó Tang Yaoyao.

"No lo sé. Parecía ser una de las dos niñas ". Los ojos de Xu Xiaocheng se llenaron de terror. Aunque había visto el cadáver, su respuesta fue mucho más tranquila que antes; al menos su primera reacción no fue vomitar esta vez. "No tuve las agallas para mirarlo por más tiempo. Lo miré muy rápido e inmediatamente salí corriendo de allí ".

Dicho esto, el grupo se dirigió al baño. En el momento en que entraron, tropezaron con los restos de un cadáver esparcidos por el suelo.

El estado de Xiao Shi no se veía más bonito que el de Xiao Yi, que había sido asesinado a golpes con un cuchillo. Todas sus extremidades y órganos estaban desparramados al azar por el suelo, pintando un desastre espantoso; prácticamente se podía imaginar la brutalidad que se produjo, cuánto fue golpeado y aplastado el cuerpo, a partir de los restos irreconocibles de un cuerpo que salpica el baño.

Sin embargo, todos se mantuvieron relativamente tranquilos al ver el cadáver golpeado esta vez. Lin Qiushi le dio una mirada a la sangrienta escena y verificó que Xiao Shi estaba tan muerta como podía estar, no podía estar más muerta.

Ruan Nanzhu no pronunció una palabra en todo el tiempo; se quedó en silencio.

De pie a su lado, Lin Qiushi le preguntó al otro en un susurro lo que estaba pensando.

"Nada importante." Ruan Nanzhu respondió con indiferencia. "Solo tengo curiosidad por saber cómo reaccionará la madre esta vez una vez que vea esta escena".

Los rostros de todos se volvieron feos al pensar en la mujer.

Y, sin embargo, fue realmente como decía el dicho: ¡habla del diablo y él anda! ¡Ruan Nanzhu apenas había mencionado a la mujer, antes de que apareciera inesperadamente justo en la puerta del baño! Esta vez, ella no lloró escandalosamente. Con un porte asombrosamente tranquilo y una expresión que no podía estar más en blanco, agarró un trapeador en una mano y una bolsa desechable en la otra. Luego bajó la cabeza y silenciosamente comenzó a barrer el cadáver de su hija, juntando muy lentamente los pedazos del cuerpo de su hija.

Ni una sola palabra hablada rompió esta pantomima; sólo se oían los sonidos pegajosos y chapoteando del trapeador mojado que se arrastraba por la sangre espesa. La mujer embolsó hábilmente las partes del cuerpo de su hija, luego silenciosamente se llevó la bolsa llena.

"Tengo un mal presentimiento". La tez de Tang Yaoyao se puso pálida. "¿Que pasa contigo?"

"Igual que aquí." Zhang Xinghuo tragó saliva cuando estuvo de acuerdo. "¿Podemos realmente vivir todos hasta el último día?"

Solo quedaban dos días para la fiesta de cumpleaños, pero ese día parecía una eternidad a partir de ahora; después de todo, el tiempo pasaba tortuosamente lento cuando uno se sentía desdichado.

Kaleidoscope of DeathWhere stories live. Discover now