XXV

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Al día siguiente, me levanté temprano para desayunar y para prepararme para la boda de Prissy y el profesor. Louis, mi padre y yo desayunamos entre risas, después todos nos fuimos a preparar. Yo aún no terminaba y ellos ya estaban listos, me puse un vestido turquesa y deje mi pelo suelto al natural. Cuando estuve lista baje a la sala de estar, ahí me esperaban mi padre y Louis.

George: Te ves hermosa, mi niña.
Louis: Como siempre, o no es así?
George: Tienes razón, Louis. Ahora vamos que se nos hará tarde.

Partimos con rumbo a la iglesia. Al llegar todos querían saludarnos y también al gran vizconde de Cranbrook. Louis y mi papá fueron a saludar a los Andrews, yo me senté en una banca libre cuando alguien me habló.

Gilbert: Está libre el lugar, señorita?
Laura: No, estoy esperando a mi novio.
Gilbert: Oh, y cree que tardará mucho?
Laura: No lo creo, él siempre es puntual.
Gilbert: Bueno, no creo que le moleste si me siento un rato.
Laura: No creo, de echo usted me recuerda mucho a él.
Gilbert: Cómo estás, cariño? -Dijo dejando de actuar y dándome un corto beso en los labios-
Laura: Estoy bien ahora que tú llegaste.
Gilbert: Y tu padre?
George: Estoy aquí. -Dijo mi padre llegando- Me da gusto verte, Gilbert.
Gilbert: Igualmente señor.
George: Creo que no se han conocido formalmente, así que, Gilbert te presento a Louis William Enrique vizconde de Cranbrook.
Gilbert: Ya nos habíamos conocido.
Louis: No en las mejores circunstancias claramente, pero es un gusto verte Gilbert.
Gilbert: Igualmente.

Mi padre tomó asiento a un lado de Gilbert y Louis estaba al lado de mi padre, aún estaba hablando con Gilbert cuando las puertas de la iglesia se abrieron dejando ver a Prissy del brazo de su padre, se veía hermosa en el vestido blanco, comencé a imaginarme vestida de blanco y del brazo de mi padre caminando hacia el altar y a un Gilbert de traje esperándome al final del pasillo. Prissy llegó junto al señor Phillips y todos tomamos asiento. De pronto ella empezó a ver en todas las direcciones de la iglesia, cruzó mirada con su madre hasta que el profesor le dijo algo, ella lo miró y dejó caer su ramo y salió corriendo de la iglesia seguida por las demás niñas y dejándonos a todos sorprendidos, en especial al señor Phillips.

Louis: Increíble! Allá va el viaje a Paris todo pagado.
Gilbert: De qué habla?
Laura: Oh, él y mi padre le regalaron a Prissy y al señor Phillips una luna de miel en Paris, que claramente no se realizará.
Gilbert: Eso cuesta mucho dinero.
George: Está bien, eso no importa ahora.

Todos fuimos saliendo de la iglesia, mi papá y Louis iban adelante mientras hablaban sobre una reforma en Inglaterra. Le pedí permiso a mi papá para ir con Gilbert y él accedió, dijo que Dominic me recogería en su casa más tarde. Mi novio y yo nos fuimos directo a su casa, cuando entramos vi a Sebastián comiendo y sosteniendo el recibo que le dio Mary.

Laura: Enserio que estas enamorado.
Sebastián: Igual que ustedes. Por qué volvieron tan rápido?
Gilbert: No hubo boda.
Sebastián: Cómo?
Laura: La novia salió huyendo de la iglesia antes de empezar la ceremonia.
Sebastián: Eso si es sorpresa.
Laura: Bueno, ella es feliz con su decisión, me alegro que no se casara con un idiota como el profesor Phillips.
Gilbert: Eso en parte es bueno.
Sebastián: Tal vez los próximos en pisar la iglesia como novios sean ustedes.
Laura: Puede ser.
Sebastián: Obviamente Jack y yo seremos padrinos.
Laura: Obviamente.
Gilbert: Por cierto, y Jack? No estaba en la iglesia.
Laura: Mi tío se tuvo que ir de viaje.
Sebastián: Y no se despidió?
Laura: No te preocupes, volverá para tu boda con Mary.
Sebastián: Eso me tranquiliza un poco.

Estuvimos toda la tarde hablando y riendo, hasta que la noche nos alcanzó y Dominic llegó por mi. Me despedí de Bash con un abrazo y de mi novio con un gran beso y subí al carruaje. Cuando llegué a mi casa los Andrews estaban ahí.

Sr. Andrews: Por favor perdónenos, estamos conscientes del gran regalo que le dieron a mi hija, venimos a darles las gracias y a devolverlo.
George: No se preocupe, quédeselo, podrían irse ustedes dos de viaje o si conocen a alguien que lo necesite.
Sra. Andrews: Oh no, no podemos quedárnoslo, es un regalo muy costoso.
Louis: Y por eso cuando se toma una decisión tan importante como lo es el matrimonio, se debe estar muy seguro de querer hacerlo. -Dijo viendo fijamente a Prissy y esta solo bajo la mirada apenada-
Laura: Louis!
Louis: Es la verdad. En fin señores Andrews, a nosotros no nos sirve el regalo, por favor quédenselo, tal vez su hija quiera ir con su hermana o alguna amiga.
George: Enserio no tienen que disculparse de nada con nosotros.
Sr. Andrews: Está bien, muchas gracias vizconde y muchas gracias a ti George.
George: Por nada, regresen con cuidado a casa.

Los Andrews se fueron y yo subí directo a mi habitación, me puse la pijama y con lo que pasó hoy me imaginé la boda de Gilbert y mía, si bien no tenía intenciones de casarme antes de los veinte años, pero si Gilbert me propusiera matrimonio mañana, yo aceptaría gustosamente, estaba segura de que quería pasar el resto de mi vida con él y con esos pensamientos me quedé profundamente dormida.

~Always Been You~ [Gilbert Blythe]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora