V

1.1K 71 3
                                    

ºNarra Lauraº
A solo una semana de la boda y los nervios comenzaban a aparecer, mi vestido llegaba hoy y me encontraba con Diana y Anne en mi casa, esta última había estado muy extraña las últimas semanas, pero cuando le preguntaba el porqué, ella evadía el tema. Alguien tocó a la puerta de la casa y yo me apresuré a abrir, era mi vestido, lo recibí y entré a la casa de nuevo muy emocionada, Diana inmediatamente me ayudó con la caja y fuimos directo a mi habitación.

Diana: Esto es tan emocionante!
Laura: Siento que me desmayaré en cualquier momento.
Diana: No lo harás, al menos no lo harás antes de que te pruebes el vestido.

Lo sacamos con cuidado de la caja y era un hermoso vestido de seda blanco y el velo también estaba ahí, era justo como lo pensé, un hermoso velo tan largo, media 8 metros y era simplemente espectacular. Entré al vestidor y Diana y Anne me ayudaron a probarme el vestido, me pidieron que cerrara los ojos y cuando terminaron los abrí, al verme en el espejo no tardaron en salir unas lágrimas de felicidad, el vestido era perfecto, con mangas cortas y ceñido hasta la cintura y de ahí la seda caía suelta ligeramente hasta mis pies.

Diana: Te ves hermosa, Laura!
Anne: No creo volver a ver una novia más hermosa que tú, el vestido es perfecto, es elegante, es bonito, simplemente... eres tú... -Un sonido en la puerta nos interrumpió-
Laura: Si es mi papá no lo dejen entrar, tiene prohibido ver el vestido. -Diana fue a abrir-
Jack: No soy tu papá, pero él me... -Al verme se sorprendió y sus ojos se cristalizaron- Dios! Mírate, estás radiante. Estoy orgulloso de ti.
Laura: Gracias, tío. No llores o volveré a llorar también.
Jack: Tienes razón. En fin, George me manda con esto. -Traía una caja de madera entre sus manos, la acercó a mi y al abrirla era la tiara de la familia- Dice que lo usarás el día de la boda.
Laura: Claro que si! Cuando era niña jugaba con ella todo el tiempo.
Jack: Te vas a ver igual de hermosa que tu madre el día de su boda. -Dijo mientras veía cómo Diana me ponía la tiara-
Anne: Pareces de la realeza, estás perfecta.
Diana: Lo mismo digo. -Terminó de colocar la tiara y el velo-

Me miré en el espejo y no podía creer lo que veía, la tiara era hermosa, una tiara de oro con diamantes de plata, de abajo era gruesa y en el centro tenía tres zafiros medianos y en la parte de arriba terminaba en puntas con un diamante de plata en cada una de estas, y combinada con el velo y el vestido era simplemente hermoso.

Jack: Me harás llorar.
Laura: Ay tío!
Jack: Está bien, no lloraré. Ahora me voy porque tengo que seguir ayudando a tu padre con los regalos que están llegando.

Agradecía que mi papá me ayudara con eso, inmediatamente después del día en que fuimos a Charlottetown, él estuvo hablando con sus amistades para que asistieran a la boda, la casa ese día estaría repleta de personas, pues tendrían que pasar una noche aquí y los que no podrían venir estaban mandando sus regalos y felicitaciones, así que mi papá y mi tío se encargaban de recibirlos.

Diana: Muy bien, te quitaremos el vestido.

Ellas me ayudaron a quitarme el vestido, la tiara y el velo cuidadosamente, acomodaron todas las cosas en su lugar y yo me puse unos pantalones, había comenzado a usarlos hace poco y admitía que eran muy cómodos.

Diana: Bien, todo está guardado y listo para el siguiente sábado.
Laura: Los nervios empieza a surgir.
Diana: Tranquila, todo saldrá bien.
Laura: Eso espero.
Diana: No has visto a Gilbert?
Laura: Hace una semana que no lo veo, tiene demasiado trabajo y yo estoy con los detalles de la boda.
Anne: Entonces no se han visto para nada?
Laura: No.
Diana: Bueno, ya tendrán una vida entera para verse todos los días.
Laura: Eso es cierto. -Dije sonriendo imaginando cómo sería despertar todos los días al lado de Gilbert-
Anne: Tengo que irme.
Laura: Pero... -Antes de que dijera algo ella salió corriendo de la habitación- Diana, sabes que le pasa a Anne? -Ella solo suspiró-
Diana: Si lo sé.
Laura: Me lo podrías decir?
Diana: Te lo diré solamente porque mereces saberlo... Anne está enamorada de Gilbert.
Laura: Qué?!
Diana: Yo pensé que lo habías notado.
Laura No... es decir... hace años noté que él le gustaba, pero creí que solo era eso, nunca pensé que estuviera enamorada de él.
Diana: Pues lo está... desde hace ya un largo tiempo.
Laura: Dios! -Las lágrimas comenzaron a descender por mis mejillas-
Diana: Oh Laura, no te atormentes, ella lo superará.
Laura: No sabía que le causaba un daño.
Diana: No tienes que preocuparte por eso. Ahora debes concentrarte en tu boda.
Laura: Cómo lo haré si una de mis mejores amigas gusta de mi prometido?
Diana: Créeme, Anne, lo acepta.
Laura: Tú crees?
Diana: Si no lo hiciera no hubiera aceptado ayudarte. Ahora, tengo que irme. Por favor no te preocupes por nada que no sea tu boda.

Diana se fue y yo me quedé en mi recámara pensando que era la peor persona del mundo. Anne no se merecía eso. Ni siquiera baje a comer por lo mal que me sentía y en la noche mi papá tuvo que traerme la cena hasta mi recámara.

George: Puedo pasar? -Dijo tocando la puerta-
Laura: Adelante.
George: Cómo está mi princesa? No bajaste a comer, supuse que estabas ocupada, así que te traigo la cena.
Laura: Gracias.
George: Te pasa algo?
Laura: No, es solo que... solo son los nervios.
George: Oh ya entiendo. Quieres hablar de eso?
Laura: En realidad no.
George: Bien, solo me quedaré y te haré compañía hasta que termines de cenar, no quiero que te enfermes antes de tu gran día.
Laura: Está bien. -Dije soltando una pequeña risa y comenzando a comer- Por cierto, gracias por la tiara.
George: No es nada, hija. Yo sabía que la usarías en tu boda.
Laura: Aún recuerdo cuando jugaba con ella de pequeña.
George: No pensé que el día en que la usarías formalmente llegara tan rápido. Estoy seguro que te verás hermosa.
Laura: Estoy orgullosa de llevar la historia de mi familia sobre mi cabeza.
George: Eso es bueno. La tiara se hizo para tú tatarabuela, tu tatarabuelo quería que usara algo especial en su boda y desde ese día todas las novias de la familia la han usado... ahora es tuya, y pasará a mi nieta y luego a mi bisnieta...
Laura: Estamos adelantando las cosas, papá.
George: Tienes razón, además ya le advertí a Gilbert que no puede tocar a mi princesa.
Laura: Papá!
George: Qué? Por cierto, antes de que me olvide. -Me pasó un sobre cerrado- Esta es la primera parte de mi regalo de bodas.

Lo abrí y eran los boletos de ida y vuelta hacia la ciudad de Venecia, en Italia y una lista sugerencias de mi papá de los lugares para visitar.

Laura: Ay papá! Muchas gracias! No era necesario...
George: Claro que lo era! Yo sé cuanto amas Venecia... y también sé que a Gilbert le gustará visitar Venecia contigo a su lado. Y los mejor será que se queden en nuestra casa, ya avisé para que la tengan lista para ustedes dos.
Laura: Gracias por el regalo.
George: Solo es la primera parte.
Laura: Y cuál es la segunda?
George: Eso es una sorpresa para cuando vuelvan. Oye, te parece si hoy dormimos juntos? Cómo cuando eras pequeña.
Laura: Claro.

Mi papá se adentro en la cama y seguimos hablando hasta que alguien nos interrumpió.

Jack: Puedo dormir con ustedes? Me siento solo.
George: No, no puedes.
Jack: Tú eres malo... Sobrina, puedo?
Laura: Si, tío.

Él también se acostó a mi lado y pronto los tres nos quedamos profundamente dormidos.

~Always Been You~ [Gilbert Blythe]Where stories live. Discover now