XLIV

607 36 19
                                    

ºNarra Lauraº
Luego de salir de la habitación, bajé con mis hijos y cuando estuvimos abajo los abracé con todas mis fuerzas.

George: El abuelo se irá, no es así?
Laura: Si, cariño.
Amal: Se irá?
John: A dónde?
Laura: Él tiene que dejarnos ahora, porque extraña mucho a la abuela y quiere ir a visitarla.
Amal: Se irá a vivir a las estrellas con mi abuela?
John: Pero no queremos que se vaya.
Laura: Lo sé, pero, él tiene que irse, porque está sufriendo mucho y no queremos que el abuelo sufra o si? -Ellos negaron- Entonces no hay que detenerlo.
George: Pero lo vamos a extrañar.
Laura: Si, pero él estará bien y ya les dijo que los ama y no deben de olvidar eso, de acuerdo?

Los tres asintieron y Gilbert y mi tío llegaron a la sala, no había notado que Sebastián también estaba aquí, él solo me saludó con una sonrisa y yo fui con Gilbert.

Gilbert: Tu papá quiere verte, ve tranquila, yo me quedo con los niños.

Subí rápidamente las escaleras hasta llegar a la habitación de mi padre, toqué un par de veces y luego entré.

Laura: Hola.
George: Hola, cariño. Puedes acercarte?
Laura: Ya estoy aquí. -Llegué a su lado- Qué pasa?
George: 33 años y aún sigues hermosa.
Laura: Lo dices porque soy tu hija.
George: Lo digo porque es la verdad, aún recuerdo la primera vez que te tomé en mis brazos, siempre me sentí orgulloso de tener a una niña que tenía todas las cualidades para ser perfecta... bueno, solo tenías un defecto.
Laura: Cuál?
George: El crecer demasiado rápido, no entiendo porque lo hiciste si te prohibí rotundamente crecer. -Dijo haciéndome reír- Y ahora eres toda una mujer, igual de hermosa que tu madre.
Laura: Gracias, papá.
George: Puedo decirte algo? -Sus ojos se llenaron de lágrimas-
Laura: Claro.
George: No quiero irme... no quiero morir. -Las lágrimas comenzaron a bajar por su rostro- No se lo he dicho a nadie, pero no quiero dejarte ni a mis nietos, quiero verlos crecer, quiero enseñarles sobre negocios y ayudarles con sus tareas y también quiero ahuyentar a los pretendientes de la pequeña Amal.
Laura: Ay papá... -Le sonreí con lágrimas en mis ojos- Yo tampoco quiero que te vayas, quédate conmigo un poco más por favor, te necesito.
George: Ya no creo aguantar, estoy cansado y esto me duele, pero, recuerdas cuando te fuiste a la universidad? También te dije que no quería que te fueras, pero tú me dijiste que siempre estarías conmigo, y ahora lo mismo te digo yo, al igual que tu madre, yo siempre estaré contigo.
Laura: Más te vale cumplirlo.
George: Cariño... mis empresas... sé que estarán en buenas manos contigo.
Laura: No te preocupes por eso, papá, yo me haré cargo.
George: Y lo harás de maravilla, eres igual a mí en el carácter, llevarás el negocio familiar de maravilla. Recuerda que todo es tuyo, el testamento ya está en manos de Jack, espero que no te moleste que le haya dejado esta casa.
Laura: Claro que no! Él la merece.
George: Él pensaba que no, pero siempre estuvo dentro del testamento, es mi familia también.
Laura: Lo sé, papá.

Él habló conmigo demasiado tiempo y también recordábamos los viejos tiempos hasta que la noche nos alcanzó, y aún así seguimos hablando.

George: Pero sabes algo? Estoy feliz... porque te dejo en buenas manos y porque volveré a ver a tu madre, ella ha de estar esperándome.
Laura: Estoy segura que si, papi.
George: Y le hablaré de la grandiosa mujer en la que te has convertido y que es abuela de 3 maravillosos nietos y que tiene un yerno excelente.
Laura: Estará feliz.
George: Y orgullosa. -Volvió a llorar- Puedes tomar mi mano, hija? No quiero estar solo en este momento.
Laura: Claro, papá. -Tome su mano- Descansa.
George: Claro que merezco un descanso, después de 69 largos años. - Sonrió y me miró- Mi niña... mi pequeña princesa, no me dejes.
Laura: Estaré aquí cuando despiertes, papi.
George: Te amo, mi pequeña.
Laura: También te amo, papi.
George: Con todo el corazón?
Laura: Con todo el corazón. -Le sonreí-

Él miró hacia el techo de la habitación y unos segundos después apretó fuerte mi mano para después dejar de hacerlo, lo miré y tenía los ojos cerrados, parecía dormido, pero había un detalle... ya no respiraba. Le di un beso en su mejilla y me recosté un momento a su lado para poder abrazarlo, lloré mucho tiempo y cuando por fin decidí salir de la habitación, la madrugada me había alcanzado. Bajé hasta la sala de estar y todos me miraron, yo solo pude verlos unos minutos antes de dejarme caer y ser abrazada por mi esposo, él me consoló mucho tiempo, tanto que estuvimos así hasta el amanecer, después me acerqué a abrazar a mi tío, también lloró conmigo y cuando mis hijos se despertaron, llegaron junto a nosotros.

George: Ya no está.
Laura: No, cariño. -Los tres me abrazaron-
Amal: Él estará bien, mami?
Laura: Si, mi niña, la abuela va a cuidarlo.

Luego de estar abrazados un tiempo, la señora Adelina se los llevó para desayunar y los adultos nos encargamos de organizar el funeral.
Fue algo un poco grande, vinieron amigos de él de todas partes, incluso después de tantos años me encontré a Louis y a su familia, ellos apenas llegaron y fueron a saludarme, Louis y su esposa fueron los últimos.

Louis: Hola.
Laura: Hola, Louis.
Louis: Lamento lo que pasó.
Laura: Gracias. -Unas voces me hicieron voltear y vi a mis hijos junto a mí- Qué pasa?
George: Mami, puedo salir con Maddie al jardín? Llevaré a mis hermanos.
Laura: Claro, cariño. Con cuidado.
Louis: Son tus hijos?
Amal: Quién es él?
Laura: Es un amigo de tu abuelo... Creo que Maddie los espera, vayan al jardín.
George: De acuerdo. -Miró a Louis- Con su permiso, señor. -Amal y John imitaron a su hermano y después se fueron al jardín-
Louis: Encantadores.
Laura: Lo sé. -Sentí una mano en mi cintura para después ver a Gilbert a mi lado-
Louis: Hola, Gilbert.
Gilbert: Louis. -Dijo con indiferencia-
Louis: Acabo de conocer a sus hijos, unos niños encantadores.
Gilbert: Lo sé, son iguales a su madre.
Louis: Permítanme presentarles a mi esposa, ella es Claire. -La mujer a su lado sonrió- Ellos son Laura y Gilbert Blythe.
Claire: Es un placer.
Laura: El placer es todo nuestro.
Louis: Y mi hija tiene que estar por alguna parte.
Claire: Vamos a buscarla?
Louis: Ve a buscarla tú, la niña es tu única responsabilidad.
Claire: Louis, creo que ambos deberíamos...
Louis: Claire, no vas a decirme lo que tengo que hacer, ve a buscar a la niña.
Laura: Nosotros nos retiramos, necesitamos recibir a más personas.
Louis: Podemos hablar después?
Laura: No lo creo, estaré ocupada. Adiós, Louis.
Gilbert: Fue un placer verlos.

Gilbert y yo nos retiramos de ahí, no se necesitaba ser un genio para saber que el matrimonio de Louis estaba muy mal, pero no iba a darle importancia a eso, obviamente Gilbert trató de que Louis no me incomodará, pero en estos momentos nada me afectaba, lo único en lo que pensaba era que mi papá ya no estaría más conmigo.

~Always Been You~ [Gilbert Blythe]Where stories live. Discover now