IV

1.2K 70 6
                                    

ºNarra Gilbertº
Me encontraba terminando de desayunar con Bash, hablábamos de la boda cuando la pequeña Delphine entró a la cocina.

Delphine: Cuál boda?
Sebastián: Buenos días a ti también.
Delphine: Lo siento, buenos días, papá. Buenos días, tío Gilbert.
Gilbert: Buenos días, pequeña.
Sebastián: Ahora que ya nos saludamos... Delphine, tu tío Gilbert se casará.
Delphine: Enserio?! -Dijo muy emocionada- Con mi tía Laura?
Gilbert: Así es... -Un golpe en la puerta me interrumpió. Bash fue a abrir y por esta entró Jack-
Jack: Buenos días familia.
Gilbert: Jack! Qué haces aquí?
Jack: Vengo a invitarlos a ir a Charlottetown, aceptan?
Sebastián: A qué iremos?
Jack: Laura quiere ver las flores para la boda y algunos otros detalles, así que me parece bien que el novio la acompañe, y que Bash y Delphine vayan también... por favor digan que si, no quiero ir solo con la pareja de novios y George.
Sebastián: Yo si voy.
Gilbert: De acuerdo, vamos.

Salimos de la casa y subimos al automóvil, aún era raro para mí el ver un auto aquí en Avonlea y Bash parecía algo sorprendido, pero también emocionado. Ayudamos a subir a Delphine para después subir todos nosotros.

Jack: Están listos?
Sebastián: Seguro que sabes manejar esta cosa? No quiero morir ahora.
Jack: Tranquilízate, ya lo he manejado antes.

Aunque no tenía tanta confianza en Jack para conducir el automóvil, el camino a casa de mi linda prometida fue muy tranquilo, al llegar, ella y su padre nos esperaban en la entrada, Jack se estacionó y mi futuro suegro lo quitó del asiento del conductor diciendo que "para evitar que causara un accidente" haciéndonos reír a todos. Después de saludar a Laura y a su padre, nos pusimos camino a Charlottetown y en el trayecto ella y yo hablábamos con Delphine acerca de lo emocionados que estábamos por la boda. Al llegar a Charlottetown decidimos que lo mejor sería que nos separáramos para poder arreglar los mayores detalles posibles.

George: Yo me encargo de hablar con el ministro.
Jack: Yo quería hacer eso!
George: Tú quieres hacer todo.
Laura: Gilbert y yo nos encargamos de las flores.
George: Muy bien.
Jack: Bueno, entonces Bash y yo nos encargamos del alcohol.
George: Oh no, claro que no! Ustedes dos vienen conmigo.
Jack: Qué?! Porqué?!
George: No dejaré que se embriaguen con las muestras de vinos y whisky, recuerden que una niña viene con nosotros.
Jack: Pero...
George: Pero nada. Andando. Después yo iré con ustedes a arreglar el tema de las bebidas, pero no tomarán ni una sola gota.

Los tres adultos se fueron con Delphine a buscar al ministro y Laura y yo comenzamos a caminar rumbo a la florería. Al entrar el olor a flores inundo mis fosas nasales, comenzamos a ver que tipo de flores nos gustaría tener en nuestra boda hasta que una voz nos interrumpió, volteamos a nuestra derecha y una señora de edad avanzada se encontraba ahí sonriéndonos.

X: Puedo ayudarles en algo?
Laura: Hola, yo soy Laura y él es mi prometido Gilbert. -Sonreí porque el hecho de que me llamara "mi prometido" sonaba tan bien- Queremos ver algunas flores para nuestra boda.
X: Muchas felicidades! Cuándo es el gran día?
Laura: En un mes.
Gilbert: Técnicamente faltan 29 días. -Dije haciendo que rieran un poco-
X: Que bien lleva la cuenta. Bueno, para una boda yo les pido a los novios que me cuenten un poco de sus cualidades y de su historia de amor, para poder ofrecerles las flores que vayan de acuerdo a ustedes.
Laura: Bien, por dónde empiezo?...

Ella comenzó a contarle un poco de lo que ella veía en mi, después yo le platiqué lo que veía en ella y al final le resumimos nuestra gran historia.

X: Una gran historia de amor... muy bien, yo les recomiendo para la decoración de la boda, rosas y hortensias, porque las rosas representan el romanticismo, la pasión, belleza y dedicación y las hortensias son símbolo de elegancia y valentía.
Laura: Me agrada. Y para el ramo?
X: Un ramo de peonías sería el indicado.
Laura: Podría agregar un poco de lavanda? Eran las favoritas de mi mamá.
X: Claro que si.
Laura: Muchas gracias! Las tendrá listas para la fecha señalada?
X: Claro que si, señorita, usted no se preocupe por nada...

Miré fijamente a Laura para admirar los hermosa que era, tenía unos rostro simplemente angelical, y verla ahí, centrando toda su atención en las flores solo hizo que me enamorara mucho más de ella, no sabía como lo hacía, pero cada día lograba enamorarme más y más, no sé en que momento dejé de prestar atención a la platica, pero la voz de mi prometida me hizo volver a la tierra.

Laura: Querido, te parece bien?
Gilbert: Qué cosa?
Laura: Las flores, Gilbert.
Gilbert: Ah si, me parecen perfectas.

La señora nos dijo que las flores estarían listas para el día de la boda y que ella misma se encargaría de trasladarlas hasta la iglesia y casa de Laura, ella estaba a punto de darle el dinero, pero yo me apresuré a pagarle con mi dinero, le agradecimos por el servicio y salimos de ahí.

Laura: Gilbert, yo iba a pagar las flores.
Gilbert: No puedo dejar que lo hagas.
Laura: Pero...
Gilbert: Sin peros... el novio es quien paga la boda.
Laura: No es justo que pagues todo tú.
Gilbert: Linda, no te preocupes por nada. Además, ya tengo trabajo.
Laura: Enserio? En dónde? Porqué no me habías dicho nada?
Gilbert: Porque con el asunto de la boda se me olvidó por completo, pero el doctor Ward me ofreció un consultorio junto a él.
Laura: Gilbert, eso es grandioso!
Gilbert: Lo sé, linda. Así que no discutas más el tema de correr con los gastos de la boda porque no te dejaré pagar ni un centavo.

Ella apenas iba a protestar, pero una voz conocida interrumpió nuestra plática.

X: Laura?!
Laura: Diana? Anne? Son ustedes?
Diana: Si! Mírate estas hermosa!
Laura: Ustedes también lo están. -Dijo mientras les daba un abrazo a las dos-
Anne: Cuando volviste?
Laura: Hace unos días.
Diana: Gilbert, también es un gusto verte.
Gilbert: Igualmente, me alegra verlas a las dos.
Laura: Chicas, antes de que me olvide, quiero decirles que están invitadas a nuestra boda.
Anne: Te casarás?!... es decir... se casarán?
Gilbert: Si, a principios del mes de julio.
Anne: Eso... eso es...
Diana: Maravilloso! Muchas felicidades a ambos.
Laura: Gracias, Diana. Quiero que cuando llegué mi vestido ustedes sean las primeras en verlo.
Diana: Claro, nos avisas cuando llegue.
Gilbert: Anne, estás bien? -Pregunte pues la vi muy pálida y sorprendida-
Anne: Yo...
Diana: Tenemos que irnos. Suerte con los preparativos!

Ellas se fueron y nosotros nos miramos extrañados, pero no le dimos tanta importancia. Llegamos al lugar en donde estaba el automóvil y unos minutos después aparecieron los demás.

Jack: George no nos dejó probar nada de alcohol... Gilbert, no será un buen suegro.
George: Deberías de agradecerme, o ya se les olvido que cuando se embriagan no pueden ni levantarse al día siguiente.
Sebastián: Solo era un trago.
George: Si claro. Suban al auto.

Todos subimos y en el camino a casa nos burlábamos por los pucheros que ponían Jack y Bash mientras les reclamaban a mi futuro suegro por no dejarlos beber ni un poco. Llegamos primero a mi casa y Bash bajo a Delphine en brazos porque ya estaba dormida, me despedí de todos y entré cuando ellos tomaron el camino hacia su casa. Al entrar, fui con Bash a acostar a Delphine para después subir a mi habitación y dormir yo también.

~Always Been You~ [Gilbert Blythe]Where stories live. Discover now