𝑻𝒉𝒆 𝑺𝒆𝒄𝒓𝒆𝒕𝒔 𝑺𝒉𝒆 𝑲𝒆𝒆𝒑𝒔 [ᴛʀᴀᴅᴜᴄᴄɪᴏɴ]

〜Capítulo 12

N.A: Y ahora empieza.

El verano ha salido exactamente como estaba previsto. Había pasado tiempo con los Malfoy en su casa o en partes de la comunidad mágica disfrazados de la prima de Draco. Conseguí que Narcissa aceptara que no me comprara ropa que mostrara mi figura hasta el cuarto año, ya que no quería tener que preocuparme por los chicos hasta al menos entonces. Así que me comprometí y le permití que me comprara muchas piezas de joyería.

Había organizado todas las cuentas con los Goblins, incluso Slytherin, ya que mi abuelo no podía. Griphook me informó que habían encontrado otro Horrocrux en la bóveda de Bellatrix Lestrange. También me informaron que debemos tener todos los pedazos de su alma para regresar a él de una vez. Los goblins dijeron que podría llevar algo de tiempo, pero les di más dinero y les dije que intentaran localizarlos lo más rápido posible y que los ayudaré lo mejor que pueda. El dinero no era un problema aquí, el tiempo lo era, ya que cuanto más tardaba, mayor era la oportunidad para que Dumbledore llegara a mí.

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Actualmente estoy corriendo al Caldero Chorreante de Gringotts para encontrarme con los Weasley para hacer mis compras escolares antes de quedarme con ellos durante una semana. Me iría con ellos a la estación de tren.

Cuando entro, noto de inmediato a los Weasley, ya que su cabello es lo más brillante del pub.

"¡Bella!" Los gemelos vitorean volviendo la atención hacia mí.

"Hola." Digo con una sonrisa falsa, especialmente porque sé que las dos mujeres y el niño más joven me están usando por mi dinero y mi fama.

"Encantada de conocerte, querida, ¿tienes tu dinero o necesitas ir a Gringotts? Puedo ir por ti si quieres, yo tengo que ir por nosotros." Pregunta la madre del niño.

"Oh, llegué temprano, así que ya fui, gracias, Sra. Weasley." Le digo con falso agradecimiento. Sabía que era muy raro que otro mago entrara en las bóvedas de otro mago, y luego era solo alguien en quien confiaba verdaderamente y yo no confiaba en ella en lo más mínimo.

"Está bien, bueno, vámonos." Dijo con una amplia sonrisa. Primero fuimos a la tienda de pociones para conseguirles a todos los ingredientes que necesitaban. A medida que nos acercamos a la librería, vemos una gran multitud alrededor de la tienda. La Sra. Weasley jadea de repente y la vemos mirando un letrero. Al parecer, un hombre de Lockhart estaba firmando sus libros.

Me vuelvo hacia George confundida. "¿Quién es Lockhart?"

"Es el autor favorito de mamá, ella está enamorada de él." George se ríe y la Sra. Weasley lo mira.

Ella lo regaña: "¡Fred! No estoy enamorado de él."

"En realidad Sra. Weasley, ese es George." Le digo sonriéndole.

"Gracias cariño." Me dice antes de regañar a George. Fred solo me sonríe.

"Vamos todos, vamos a buscar sus libros. Molly, puede regañarlo en casa." El señor Weasley dice llevándonos a la tienda. Vamos a buscar nuestros libros. Escuchamos vítores y somos empujados hacia la parte trasera de la tienda. Veo a un hombre ridículamente sonriente posando para una cámara. Está fingiendo reír como si alguien dijera algo gracioso. Mira en nuestra dirección y veo que sus ojos se centran en mí.

"No puede ser." Habla, haciendo que todos centren su atención en él. "¡Belladonna Potter!" Exclama. El hombre que había estado tomando fotos me agarra e intenta arrastrarme hacia adelante. Me aparto de su agarre.

"¿No has escuchado que no debes agarrar a la gente?" Lo regaño y me arreglo la ropa. Todos miraban al hombre.

"Lo siento, señorita Potter. Quería que se tomara una foto con el Sr. Lockhart." Se disculpa.