𝑻𝒉𝒆 𝑺𝒆𝒄𝒓𝒆𝒕𝒔 𝑺𝒉𝒆 𝑲𝒆𝒆𝒑𝒔 [ᴛʀᴀᴅᴜᴄᴄɪᴏɴ]

〜Capítulo 35: Moony

N/A: Sé que el último capítulo fue corto. Lo siento por eso.

Punto de vista Bella:

Estaba corriendo por los pasillos para llegar a la sala de Defensa y llamé a la puerta y me detuve para recuperar el aliento. Wow, realmente necesitaba empezar a hacer ejercicio.

"Adelante." Escuché una llamada de voz y entré todavía respirando un poco más profundo de lo que me hubiera gustado. "¿Estás bien?" El profesor Lupin preguntó divertido.

"Sí, solo un poco sin aliento corrí aquí porque de lo contrario llegaría tarde." Le digo sentada en un escritorio. Él asiente con la cabeza en la comprensión. "Entonces, ¿cómo vamos a hacer esto?" Le pregunto intrigada.

"Bueno, se me ocurrió una idea, que tu boggart es un dementor si puedes derrotarlo, entonces un dementor será un poco más fácil." Explica apoyándose en su escritorio.

"Suena razonable." Acepto asintiendo. Levanta un dedo en un solo para darle un momento y yo asiento saltando sobre el escritorio para esperarlo. Vuelve con un baúl y, por lo que parece, pesado. "Supongo que hay un boggart allí." Comentó.

"Supones bien." Él ríe. Se pone de pie y me mira. "¿Recuerdas el hechizo?"

"Sip." Asiento antes de lanzarlo.

"Brillante. Voy a abrir el baúl ahora." Él me dice. El profesor Lupin retrocede para que el boggart se concentre en mí. El dementor sale y rápidamente grito el hechizo, convirtiéndolo en una calavera maquillada con una sábana blanca encima. Me río y el profesor Lupin cierra la tapa.

"Excelente, ahora te voy a enseñar el hechizo para repeler a un dementor." Dice parándose a mi lado. Me muestra el movimiento de la muñeca que era un remolino. "El encantamiento es expecto patronum."

"Expecto patronum." Digo claramente y él asiente.

"Juntos ahora."

"Expecto patronum". Digo haciendo el movimiento y no pasa nada.

"Ahora, el último paso. Debes pensar en un recuerdo feliz muy poderoso. No puede ser agradable. Debe ser el recuerdo más feliz que puedas imaginar." Dice serio. "Intenta pensar en uno." Él instruye. Pienso en cuando descubrí que era una bruja y no un bicho raro como decían los Dursley.

"Entiendo." Digo con confianza con un asentimiento. El profesor Lupin asiente y abre el baúl. El dementor vuelve y se desliza hacia mí mientras la habitación se enfría y las luces parpadean. "¡Expecto patronum!" Grito. "¡Expecto patronum! Expecto-"

Pero el salón de clases y el dementor se estaban disolviendo... Estaba cayendo de nuevo a través de la espesa niebla blanca, y la voz de mi madre sonaba más fuerte que nunca, resonando dentro de mi cabeza -

'¡Belladona no! ¡Bella no! Por favor, haré lo que sea...'

'hazte a un lado - hazte a un lado, chica-'

"¡Belladona!"

Me sacudí de vuelta a la vida. Yo estaba tumbado de espaldas en el suelo. Las luces del aula se encendieron de nuevo. Ya sabía lo que pasó.

"¿Estás bien?" Preguntó Lupin.

"Si." Le dije poniéndome de pie y apoyándome en un escritorio.

"Aquí-" Lupin me entregó una rana de chocolate. "Cómete esto antes de que volvamos a intentarlo. No esperaba que lo hicieras la primera vez. Me habría sorprendido si lo hubieras hecho."

"Es cada vez peor." Murmuro dando un mordisco al chocolate. "Pude escucharla más fuerte esta vez junto con Voldemort." Explico.

Lupin palidece. "Belladonna, si no quieres continuar, lo entenderé con creces."