Víctima del destino

LII. En las buenas y en las peores.

Inicio de flashback.

Estando fuera de la cabaña, Hwasa intentaba detener y convencer a Tae Hyung, para que no le hiciera daño a Ji Min, como lo había intentado.

- No puedes enojarte con ellos. –dijo Hwasa.-

Se detuvo frente a él, deteniendo su andar.

- ¿cómo puede hacerle esto a Jungkook? –dijo Tae Hyung.-

- Escúchame. Jungkook está muerto, ya no está amarrado a Jimin como alguna vez lo estuvo. –insistió ella.- él ahora es libre de ejercer su vida amorosa con quien él quiera.

- Pero él es su amigo.

- Alaska era tu amiga y después tu esposa. –dijo Hwasa.-

- No es lo mismo. –replicó Tae Hyung.-

- Es lo mismo.

Bufando, Tae Hyung se dio vuelta y se dirigió al lago, sentándose con cuidado a la orilla de éste y dejando sus pies colgados en la orilla, Hwasa lo siguió y se quedó a su lado.

- Por favor entiende, para Jimin el volver a sentir amor debe ser muy duro, lo que ahora necesita es apoyo y Yoongi necesita a su mejor amigo. –dijo Hwasa.-

Por un momento, Tae Hyung guardó silencio, tal vez intentando esquivar aquel comentario.

- ¿puedo vivir contigo? –preguntó Tae Hyung.-

- ¿qué?

En ese instante unos pasos se escucharon aproximándose, ella se volteó y vio a Ji Min acercándose, tomado de la mano con Yoon Gi.

Fin del flashback.

Rodeados de la naturaleza nocturna, bajo el brillo tenue de la media luna, Yoon Gi y Ji Min se miraban a los ojos, el mayor sonrió y tomó las manos del castaño, sin apartar la mirada de aquellos ojos grandes que reflejaban el brillo de las estrellas en el cielo.

- Jimin... quiero estar contigo en todas las circunstancias. –dijo Yoon Gi.- en las buenas...

Soltó una de sus manos, para retirar un pétalo que había entre los cabellos de Ji Min.

- En las malas. –susurró, retirando una basura que estaba sobre la mejilla del mismo.- y en las peores.

Quitó algunas de las espinas que habían quedado en la ropa de Ji Min.

- No importa a lo que me enfrente o lo que me pase. –susurró, sintiendo cómo una de las espinas le picaba el dedo, provocando que sangrara levemente.- porque tú vales cada pequeño y gran sacrificio.

Alzó su dedo a la vista de Ji Min, después su brazo libre, el cual estaba lleno de incontables pinchazos por las espinas.

- Quiero pertenecerte y quiero que tú me pertenezcas. –volvió a tomar sus manos, besándolas.- Jimin... ¿quieres ser mi novio?

Ji Min escuchaba sus palabras con suma atención y sin interrumpirlo, dejándose hacer completamente por él, mirando sus acciones, sus mejillas enrojecieron, otra vez vio aquel brillo en los ojos de Yoon Gi, su corazón no dejaba de latir rápidamente y su cuerpo se estremecía. Esbozó una sonrisa la oír aquella pregunta, dejó su pequeña mano en la mejilla del contrario, acariciándola, dejando por último un tierno y lento beso sobre sus labios, los cuales podría jurar que sabían mejor de lo que habría podido imaginar.

- Sí quiero. –susurró Ji Min.-

Se separó un poco de Yoon Gi y tomó también su mano, para ayudarlo a sacarse las espinas de sus brazos, provocando que algunos de los pinchazos más profundos sangraran.