46- Familia

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De camino a casa había recibido un mensaje de Ren, disculpándose por no haber podido preparar nada para la cena, teniendo un antojo terrible por sushi de calamar.

Aquella era la primera extraña encomienda de su embarazo, así que Wakasa estaba emocionado por ver su cara cuando llegara con la bolsa de esa tienda rara que quedaba del otro lado de la ciudad.

Llegaría tarde a casa, pero una vez que había dado con la dirección del local y había esperado por el peor servicio del mundo casi una hora, tenía consigo los cuatro rollos especiales que su novia le había indicado.
Tuvo que parar a cargar gasolina, demorando otro tanto, pero 15 minutos antes de las 10:00pm ya estaba en casa.

—Princesa, estoy en casa— Se quitó las sandalias, levantando el paquete en sus manos —No vas a creer lo que Takeomi me dijo... ¿Princesa?

Ren escuchó el cerrojo abrirse justo cuando había mandado a su primo a la cocina.
—¿Ah?
El bichito en su vientre y ella sintiendo alegría de ver a papá llegar a casa (o al menos eso imaginaba) mucho antes de lo que esperaba después de enviarlo a cruzar Tokyo para hacer tiempo.
Se levantó del sofá, alzando la mirada para saludarlo.
—¡Hola mi amor! Llegaste temprano.

El rostro de su novio se contrajo completamente, haciéndola recordar que debía verse terrible después de la paliza que había recibido.

—¿Qué te pasó?
Levantó el labio superior muy molesto, como un animal mostrando los colmillos antes de ponerse a gruñir.

—Ya no tienen soda en la cocina
Se hizo oír South, apareciendo muy campante comiéndose una de sus barras de proteína como si fueran dulces.

La sangre le hirvió al verlo ¿Le había pegado por lo del embarazo?
La bolsa se le calló de las manos, siendo completamente desplazada a pesar de todo el cuidado con el que la había paseado por toda la ciudad para que llegara intacta.

—Tú, bastardo... ¿Te atreviste a tocae a mi princesa?— Dijo en voz baja, temblando de rabia —Despues de que te dije específicamente que no la lasrimaras

Ren se llevó las manos al bajo vientre, esperando que al verla tranquila bajara su furia
—Amor tranquilo, no es lo que...

—¡Hijo de puta! ¡Te voy a matar!
Escupió cómo un animal, nublando su pensamiento al ver el parche sobre el ojo de su novia y su rostro hinchado.

El primer puñetazo ocurrió tan rápido que no ella ni él adolescente se lo esperaron.

—¡South!
Se levantó enseguida Ren, viendo fallidos sus intentos por mantener la calma ante los tres golpes seguidos de Imaushi sobre su primo.
—¡No, Wakasa!— Le suplicó la chica en su lugar —No es lo que...
La patada en el rostro hizo sangrar inmediatamente la nariz del rubio, la fuerza de empuje siendo tan fuerte que era un milagro que no se hubiese desmayado.

—No toques a la madre de mi bebé
Continuó, tirándosele encima como un leopardo hambriento, repartiendo puñetazos con una mano mientras dejaba inmóvil su cuello con la rodilla, sin darle oportunidad a hablar mientras la sangre empezaba a mancharle los nudillos.

—¿¡Cómo que madre!?— Escuchó la voz ronca y enojada — ¿¡Se qué carajos habla este cabrón!?

—¡No fue South! ¡Detente! ¡Imaushi!
Tuvo que empujarlo, haciéndolo trastabillar porque era prácticamente imposible que le aguantara uno solo de los golpes. Con la rabia de su novio, probablemente la knockearía, y ella inconsciente no se enteraría si en serio mataba a su primo.

—¡Cabrón desgraciado!
Quiso golpearlo nuevamente, pero el muchacho metió los antebrazos cómo en la MMA para cubrirse al tenerlo encima.

—Si me da otro se lo voy a regresar
Advirtió South medio atontado.

Flor de loto [Wakasa Imaushi] TERMINADAWhere stories live. Discover now