Flor de loto [Wakasa Imaushi] TERMINADA

25- Error

La expresión de preocupación de la chiquilla rubia tenía más que desconcertado a Imaushi.
¿Realmente estaba tan asustada de su primo?
¿Qué iba a hacerle el mocoso? ¿Uno o dos rasguños?
Tampoco era que quisiera pelear con él, de todas formas después de que acababa de pedirle indirectamente a la chica ser su novia y "casi" había aceptado.

—No hay necesidad de que te asustes princesa
Dijo tocándole el hombro, mostrando una sonrisa tranquila, seguro de que lo menos que debía hacer ahora que lo habían pasado tan bien era pelearse con su familia.

—Quítale tus raquiticas manos de encima.
El adolescente le tomó toda la cara con una mano, empujándolo lejos.
Wakasa no perdió el equilibrio, pero si se molestó por la forma infantil de la reacción del chico después de que él hablara explícitamente de no buscar pelea.

—¿No te enseñaron modales, mocoso impertinente?
Se defendió el platinado al recuperar el equilibrio. Lo había tomado desprevenido, pero no iba a dejar que lo tocara ni una sola vez más.

—Me paso tus modales por el culo, ancestro
Intentó dar otro paso, siendo momentáneamente frenado por el gritito agudo de su prima.

Wakasa chasqueó la lengua
—Otra vez con lo de viejo— Dijo en voz baja, sintiéndose realmente ofendido —Ni siquiera llego a los treinta. Tu prima y yo tenemos prácticamente la misma edad.

—Él tiene razón South. Además— Le miró pidiendo compasión —Waka acaba de pedirme ser su novia... Y voy a decirle que si.

Miró de reojo al albino, quién estaba con los ojos como platos.

—¿Enserio?
Preguntó, perdiendo completamente el interés en buscar pelea.
¿Ahora tenía novia? Genial.

—¡Y un carajo— Se hizo escuchar el otro rubio —No puedes salir con una reliquia de museo

La sangre le hirvió nuevamente al leopardo, sintiendo la imperiosa necesidad de patearle el culo a ese gigante engreído.
Si había mandado el trasero de Benkei al suelo en sus mejores días, el escuincle brasileño delante suyo terminaría besándole las sandalias en dos segundos.

—¡Que solo soy tres años mayor!
Le apuntó con un dedo, olvidando que acababa de desistir a la idea de pelear.

—Siéntate grandote— Le pidió como último recurso su prima —Si me dejas explicarte, seguro entenderás que soy lo suficientemente adulta para decidir con quién salir.

—Por favor Ren, ¿Tengo que recordarte que la última vez que saliste con un cabrón como este, terminé con una orden de restricción?

La chica le dió un rápido vistazo a su pareja, esperando que no fuera a asustarse con lo que su primo acababa de decir.
—Bueno, si. Pero fue una exageración...
Le dió una mirada de disculpa a su ahora novio.
Esperaba que no fuese a terminarla dos minutos después de haber comenzado a salir.

Hasta para ella, con su muy escaso número de novios, eso sería un récord. Y uno muy vergonzoso.

Se mordió el labio con fuerza, pensando en que si perdía al hombre más guapo con el que había estado tan fácilmente, en serio iba a llorar mucho.

Para su sorpresa, Imaushi solo suspiró, girando un par de veces su cuello y poniéndose serio.
—No voy a pelear contigo South— Dijo, haciendo sonreír a la chica —Respeto a tu prima. Y ella es lo que más me impor...

Un puñetazo certero en la nariz lo envío directo al suelo.
Ren gritó, intentando inútilmente empujar a su primo lejos.
—¿Escuchaste eso? Tu noviecito es una gallina— Se rió el más alto, teniendo esa expresión de loco en la mirada —Te estoy haciendo un favor al quitarte a este estorbo
—¡South no!— Se dejó caer junto al espabilado chico, verificando que estuviera consciente —Imaushi...