Flor de loto [Wakasa Imaushi] TERMINADA

28- Black Dragons

El sonido ligero de música podía escucharse aún desde la calle principal que daba hacia la casa de los Akashi.
Wakasa estaba preocupado pero ansioso también por presentar a Ren con sus amigos como habían acordado en sus conversaciones cotidianas.
Confiaba en que ellos podían comportarse y que Ren era tan encantadora que podría ganárselos rápidamente.

Su "novia", ahora que no se cansaba de llenarse la boca nombrándola con todo el mundo,  había dicho que tenía libre el fin de semana para visitar a sus amigos, así que las damas chismosas que eran los Black Dragons no pudieron esperar más para conocer a la única mujer capaz de hacer que Imaushi cambiara su estado de WhatsApp por unos emojis horrorosamente románticos: 

Ella💜

Si, estaba aparentemente prendado hasta la médula.
Shinichiro y Benkei estaban que revoloteaban a su alrededor para conocer a la chica que había conseguido "domar a la bestia amargada".

Todo iba bien. Incluso Takeomi había ofrecido su patio trasero para realizar la reunión, adelantándose a Shinichiro.
Estaba extrañamente amable después de ver los moratones de Wakasa al haberse encarado de frente a South y salir vivo en el proceso.

Habían acordado armar todo para una barbacoa. Beberían cerveza y conversarían toda la noche como los adultos que eran.

Benkei le había prestado nuevamente el Audi a Imaushi a cambio de su preciosa moto para enseñarle a Aki lo que era montarse en una, ya que insistía tanto en querer verlo conducir un vehículo como aquellos que le era imposible decirle que no.

Las cosas marchaban viento en popa para todos.
Bueno... Casi todas...

—Oye anciano, estacionate cerca de la entrada, no me gusta caminar.
Dijo su acompañante desde la parte trasera del auto, pateándole el asiento para llamar su atención, haciendo a Imaushi rechinar los dientes mientras aparcaba justo en la entrada (donde tenía planeado hacer desde un inicio).

—South, deja que Waka conduzca tranquilo
Le regañó amablemente su prima, siendo demasiado blanda para que el mastodonte le hiciera caso.
—Solo estoy aquí para molestar a los Haitani. No por tu puto noviecito
Dijo tan finamente como su vocabulario alcanzaba a pronunciar.

Imaushi lo dejó pasar ya que, en serio, meter a South en el mismo auto que él sin que uno de los dos estuviera inconsciente había sido una proesa.
Y su novia estaba tan contenta en cuanto él mencionó que podía ser una buena oportunidad para llevarse mejor con su primo que ver esa preciosa sonrisa de ojos brillantes mirándolo era todo lo que necesitaba para soportar al niño de dos metros.

Apenas abrieron los seguros, South salió disparado hacia el jardín, ya que había divisado el cabello platinado de Izana al fondo, riéndose con anticipación mientras se acercaba.

Genial, tres en uno, pensaba con malicia.

Unos pequeños dedos le tocaron, haciendo que se detuviera por medio segundo.
—South, nada de pelear con los amigos de Imaushi— Le pidió Ren con preocupación palpable —Comportate
Le tomó por el bícep, apenas alcanzando su carrera al bajarse del coche, poniéndole esos ojos de cachorro que le salían tan naturalmente. Haciendo fastidiarse al chico que le doblaba en estatura

—Vine a divertirme— Rodó los ojos el más alto, no siendo soltado por la rubia —Bueno, bueno. Nada de golpear ancianos hoy, lo prometo.

Ren asintió, sonriéndole ampliamente al dejarlo ir y girar nuevamente para prestarle atención a su novio, dirigiéndose con pequeños saltitos hasta él y dándole un pequeño beso en los labios antes de pegarse a él como una sanguijuela.