¡DEJA DE SER UN VIVIDOR!

Cap 5: Brisa de primavera

Al ver esto, Huo Mingchen inconscientemente soltó su puño y lo reemplazó con una sonrisa que no podía esconder en sus ojos. No sabía por qué estaba tan feliz. Se acostó en la mesa y escondió la mayor parte de su rostro, solo quedaban un par de caras frías y severas. Con los ojos expuestos, se quedó mirando el rellano sin moverse, luciendo tonto.

No sabía que la luz en sus ojos era cálida, incluso peor que la de esas chicas.

No sabe cuánto tiempo ha pasado, finalmente sonó la campana para el final de la clase de autoaprendizaje vespertino, como una gota de agua cayendo en aceite caliente, el aula estaba hirviendo de repente, y los estudiantes tomaron libros y estaban a punto de irse. En ese momento, cuatro o cinco líderes aparecieron. El hombre entró de repente y reconoció a uno de ellos como el nuevo presidente de la oficina académica.

"Todos se sientan en sus posiciones originales",

Un hombre con una tarjeta de trabajo tomó la bolsa del teléfono de la pared y se paró en la puerta con ojos penetrantes.

"El que ha entregado el celular viene a mí, me quita uno, y el que no ha entregado se sienta en el mismo lugar".

¡Mierda! ¡Algo malo! ! !

Este fue el primer pensamiento desde el fondo de los corazones de todos. Aquellos que entregaron sus teléfonos móviles estaban secretamente agradecidos, y aquellos que no entregaron estaban casi con alfileres y agujas. Huo Mingchen miró a Lu Qi por primera vez, pero vio que se quitó la tarjeta de trabajo de su cuello y salió del salón de clases.

Fang Qi quería llorar sin lágrimas, sosteniendo los hombros de Huo Mingchen balanceándose desesperadamente.

"¡Joder! ¡Lu Qi sabe que necesita una inspección en el hospital hoy! ¿Por qué no me pide un teléfono celular y solo pregunta por ti, por qué, por qué?"

Casi todas las horas escolares están descontadas. Si se descuenta este tiempo, debes ir a la oficina del consejero a tomar el té y luego invitar a los padres.

Huo Mingchen estaba inexplicablemente de buen humor cuando escuchó eso, como si lo estuvieran tratando especialmente. Reprimió la curvatura de las comisuras de sus labios y arrastró la mano de Fang Qi hacia abajo por el camino, diciendo con impaciencia:

"te lo mereces." "Si le entregabas el teléfono antes, estarías bien".

Era tarde en la noche, y la escalera estaba llena de estudiantes que estudiaban para la noche siguiente. Lu Qi estaba atrapado entre la multitud y se movía lentamente, sin dar unos pasos durante mucho tiempo. Su espalda siempre es muy recta, delgada y fuerte, incluso si está entre una multitud, puede reconocerla de un vistazo.

Al salir del edificio de enseñanza, Lu Qi estaba a punto de regresar al dormitorio. El teléfono en su bolsillo de repente vibró. Ni siquiera lo miró, como si supiera quién estaba llamando. Se detuvo en el lugar y miró hacia atrás. Como era de esperar, Huo Mingchen estaba parado detrás de él.

"¿Por qué no contestas el teléfono?". Huo Mingchen dio un paso adelante y se paró junto a él, riendo con desprecio. "¿Sabes que fui yo quien llamaba?"

Lu Qi dijo con calma:

"Bueno, también sé que me miraste toda la noche en lugar de estudiar".

Aunque este hecho es muy desgarrador, debo admitir que el círculo de amigos de Lu Qi es realmente pequeño y lamentable, y él sabe quién hizo la llamada cuando suena el teléfono.

"..."

Huo Mingchen no echó un vistazo a la vergüenza de estar expuesto, caminó y dijo:

"Esa Lan Mao te tiró una nota, ¿por qué no la recogiste?". " Porque yo estaba mirando, ¿no te atreviste a recogerla?"