¡DEJA DE SER UN VIVIDOR!

Cap 105: El sistema enloqueció

Mientras Yan Yu bajaba las escaleras, sus pasos resonaron débilmente por la escalera. Había insectos volando alrededor en el débil resplandor amarillo de las luces de la escalera, y el clima era tan húmedo que era difícil respirar. Tampoco ayudó que un olor acre se extendiera por todo el edificio desde el vertedero cercano.

Apoyado contra la barandilla mientras encendía un cigarrillo, Yan Yu miró fijamente la pared rota y agrietada frente a él. De repente sintió que no estaba viviendo como un humano y que esto era bastante bueno, pero también sintió que ya no podía vivir así.

El cigarrillo que tenía en la mano se quemó hasta las últimas heces y lo apagó en la barandilla. Regresó a su apartamento y abrió la puerta, sin esperar que Xun Chuan estuviera parado justo detrás de la puerta. Sus ojos se encontraron, y no estaba claro quién asustó a quién primero.

Después de la conmoción inicial, Xun Chuan se hizo a un lado para dejar entrar a Yan Yu y luego flotó de regreso a la cama. Sus piernas se balancearon de un lado a otro cuando Yan Yu, sin decir una palabra, se cambió los zapatos en la entrada antes de sentarse junto al escritorio. Después de un largo período de silencio, Yan Yu abrió el cuarto cajón.

Xun Chuan detuvo sus movimientos, deseando desesperadamente mirar, pero luego pensó que no debería estar mirando.

Debajo del escritorio había un brasero utilizado para quemar talismanes. Yan Yu lo sacó y luego tiró la pila de papeles que sacó del cuarto cajón. Una llama naranja se encendió, iluminando su rostro y brindándole mucha más ternura a medida que las llamas se reflejaban en su luz.

Xun Chuan no pudo evitarlo y preguntó:

"¿Qué estás quemando?"

Con sus ojos reflejando la luz del fuego, Yan Yu dijo con calma:

"Algo que te causará desgracia".

Si nunca hubiera adivinado esta lectura, nunca habría roto con Xun Chuan. Si no se hubiera separado, Xun Chuan nunca habría ido a Ciudad X por él, y tal vez no habría muerto en ese momento. A veces, había cosas escondidas debajo de todo; todo pertenecía al destino.

Xun Chuan flotó silenciosamente y, mientras lo hacía, la energía "yin" que rodeaba su cuerpo debilitó las llamas. Temblaban sin parar, como si fueran a extinguirse en el próximo segundo. Yan Yu agitó la mano y el fuego recuperó su luminiscencia, ardiendo aún más, y los papeles rápidamente se convirtieron en cenizas.

Después de que todos los papeles desaparecieron, Yan Yu vertió una taza de agua sobre el recipiente, extinguiendo las últimas llamas. Le preguntó a Xun Chuan:

"¿Me odias?"

Originalmente se pensó que eran palabras que le arrancarían el corazón y el alma, pero ahora se pronunciaron con tanta calma.

Al escuchar esto, Xun Chuan supo que Su Qing debía haberle dicho algo. Empujó incómodo alrededor de la esquina del escritorio, y sus ojos miraron hacia el brasero de fuego,

"No, no lo hago. Podrías habérmelo dicho directamente a la cara...

Pero en el momento en que dijo estas palabras, se dio cuenta de que no tenían mucho significado. Si Yan Yu le hubiera hablado honestamente sobre esto, es posible que él mismo nunca lo hubiera creído. Probablemente habría sentido que Yan Yu ni siquiera estaba dispuesto a dar una excusa aceptable para romper. Como adivinación, este tipo de cosas era demasiado increíble.

Xun Chuan ni siquiera sabía que cuando los humanos morían, podían convertirse en fantasmas debido a sus profundos, profundos deseos insatisfechos.

Yan Yu palpó sus bolsillos, queriendo fumar, pero luego se dio cuenta de que estaba fuera. Xun Chuan sacó el encendedor de la mano de Yan Yu, lo arrojó a un lado con un golpe y luego se sentó sobre las piernas de Yan Yu, sentándose cara a cara con él.

"¿Qué tiene de malo ser un fantasma?",

Xun Chuan agarró la barbilla de Yan Yu, con los ojos fríos y helados, provocando una inclinación arrogante en su rostro, "

Si no hubiera muerto, tal vez incluso tendrías en tu corazón olvidarlo". después de que rompiéramos, y ni siquiera sentirías nada".

Debido a que murió, Yan Yu lo recordará para siempre, nunca podrá olvidarlo por el resto de su vida...

De alguna manera, esto podría contar como que Xun Chuan entendió a Yan Yu. La personalidad de Yan Yu no era mala, pero también era cierto que no tenía corazón, de lo contrario no habría podido vivir hasta ahora.

Yan Yu dijo:

"Olvidar es algo bueno".

La puerta fantasma no se abre todos los años; podría ser una vez después de tres años, una vez después de cinco años. No siguió un algoritmo establecido. Algunos shu-shis podrían adivinarlo, pero los fantasmas no. Algunos de ellos quieren la oportunidad de reencarnar y lucharían con uñas y dientes para no dejar pasar esta oportunidad.

Esta noche, Yan Yu evidentemente podía sentir la agitación del aire de resentimiento que se acumulaba afuera. Preocupado por los fantasmas malignos que irrumpían, escondió la espada dorada del dinero en sus mangas y descansó junto a la cabecera de la cama, aliviando solo un poco su estado de tensión y alerta cuando volvió a ser de día.

Yan Yu estaba acostumbrado a intercambiar sus días y noches, y con sus actividades nocturnas cada vez más comunes, ahora tenía mucho sueño cuando llegaba la mañana. Abrió los ojos y, al ver que Xun Chuan todavía estaba acostado a su lado, bostezó antes de acurrucarse contra él y quedarse dormido poco después.

Sin hacer ruido, Xun Chuan se dio la vuelta y miró hacia Yan Yu. Extendió la mano en silencio, como si quisiera pellizcar la nariz de Yan Yu, pero no quería despertarlo. Al final, retiró su mano hacia atrás.

Era la época más calurosa del año, cuando toda la hierba y los árboles estaban amarillentos por el sol y el calor. Xun Chuan echó un vistazo a través de las cortinas del exterior, pero tuvo que alejarse de los ardientes rayos del sol y esperar en silencio hasta que el sol descendió.

Mientras tanto, Yan Yu durmió todo. Además de rodar de vez en cuando o cambiar su cuerpo, no se despertó. Finalmente, al ver que la puesta de sol comenzaba a iluminar la habitación con su tenue resplandor amarillo, Xun Chuan caminó hacia la puerta principal. Su cuerpo se disipó momentáneamente en el aire, pero luego, en el siguiente segundo, fue rebotado por una fuerza inesperada.

Retrocedió unos pasos y luego reapareció con el cuerpo recogido. La expresión de su rostro cambió ligeramente, solo se dio cuenta ahora de que hace algún tiempo alguien había instalado un conjunto de hechizos alrededor de la habitación y no había forma de salir. Yan Yu pareció sentir algo entonces y abrió los ojos en silencio.

"No podrás irte".

Cuando Yan Yu se levantó de la cama, no había ni una sola mirada de cansancio en él. Miró a Xun Chuan y dijo:

"... ¿No me prometiste que irías a reencarnar?"

La expresión de Xun Chuan volvió a cambiar, luciendo extremadamente amargado al escuchar que no podía irse. Había una expresión inesperada de derrota cenicienta en su rostro, y se rió burlonamente:

"¿Cuándo has sido engañado tan fácilmente que crees todo lo que digo?"

Cuando dijo esas palabras en voz alta, se dio cuenta de que no estaban del todo bien. Si Yan Yu le creyera, ¿por qué colocaría esta matriz aquí para detenerlo?

La ira inmediatamente se elevó en él, y pateó una silla, incapaz de creer que no podría salir de esta serie. Obstinado, corrió hacia la puerta, pero su cuerpo fue rápidamente repelido.

Al verlo hacer esto desde un lado, Yan Yu pensó en su corazón, qué tipo tan increíblemente terco con una actitud que simplemente no retrocederá de ir por el camino equivocado. Dado que la matriz realmente no podía lastimarlo, Yan Yu se cubrió con la manta; no ver nada con sus ojos significa que no hay nada de qué preocuparse.